Pov Kelly
Yo nunca conocí a mi tío. Mi madre tampoco me hablo mucho de él, lo único que me dijo fue que era una persona despreciable y nada más. Cuando nos contaron de su muerte mi madre se deprimió de sobre manera.
Yo llegaba de estar con mis amigas, me pareció raro que las luces de la casa estuvieran apagadas a esa hora, ella siempre llegaba antes. Una vez que prendí las luces vi a mi madre tirada en el sillón llorando. Corrí a donde estaba, al verme solo me miró.
- Tu tío murió- Fue lo único que salió de sus labios antes de volver a llorar. Nunca la había visto tan desecha, ni siquiera cuando su novio de años la dejo estuvo tan mal
El funeral se hacía el día siguiente y mi madre tenía planeado ir. El lugar donde él vivía no estaba tan lejos de nuestra casa, solo a cinco horas de viaje en auto y una tres en colectivo.
Una vez que llegamos no fue muy difícil encontrar la dirección del cementerio, siendo el único. Mi madre estacionó en la entrada, bajo y me espero observando el interior del lugar, yo aún estaba media dormida y mis sentidos no estaban del todo despiertos.
Baje, junto a mi madre caminamos al lugar en donde había muchas personas juntas.
- No espere que fuera tan popular- Murmuró mi madre agarrándose de mi brazo.
- Tranquila- Le susurré
Mi madre era de esas personas que cometían errores y les costaba darse cuenta de lo hizo, pero una vez que se entera le da vergüenza, parece una niña cuando se pone así.
Nuestro paso era lento, por mi parte porque aún estaba dormida y por la de mi madre porque no quería llegar nunca al parecer. No fue hasta que nos detuvimos que note la presencia de otra persona enfrente nuestro.
Una chica un poco más alta que nosotras nos miraba en silencio, su pelo blanco, que solo le llegaba hasta los hombros, le hacía juego a sus ojos un tanto negros. El silencio entre nosotras era muy pesado, parecía que no quería hablar.
- Bienvenidas- Comentó de pronto, su tenue voz me dio más sueño y por alguna extraña razón tranquilidad- Les agradezco que hayan venido, a pesar de no que no tuvieran una unión muy amplia- Mi madre me apretó más el agarre en el brazo al escuchar esas palabras, después como si nos permitiera el paso nos indicó que continuáramos. Tuve que ser yo la que la empujara porque si fuera por ella seguiríamos allí hasta el anochecer, digo por mi madre que se quedó de piedra en cuanto la vio llegar - Yo soy Allison, la hija adoptada de su hermano- Comentó lo más tranquila que se podía estar en su estado- Usted debe ser María- Note como miraba a Mamá por sobre el hombro
- Sí, yo soy maría la única hermana de Pablo, soy la más grande de nosotros- Contestó mi madre a una pregunta no formulada, su voz se notaba nerviosa y no la oculto muy bien, a pesar de su esfuerzo- Ella es mi hija Kelly- Me señalo con su mano. La mirada de Allison ahora se posó en mí, al encontrar nuestras miradas me dedicó una sonrisa
Cuando llegamos al lugar unas personas la llamaron, con mi madre nos encaminamos al ataúd que aún estaba fuera, justo arriba del pozo que sería donde lo enterrarían. Mi madre me soltó el brazo y caminó unos pasos hasta estar un costado del cajón de madera, colocó el ramo de flores que había traído de casa y comenzó a murmurar cosas que no entendí. De pronto solo se largó a llorar desesperada continuando, murmurando cosas. Yo realmente me sentía mal por ella, y a su vez no me sentía tan culpable al ser incapaz de llorar por él, ya que nunca lo conocí no tenía la necesidad de llorar por un desconocido
Durante la ceremonia su hija, la que sería mi prima, no apareció frente nuestro. De vez en cuando la encontraba con la mirada, y a pesar de que en ningún momento vi rastros de lágrimas sabía que sufría en su interior. Al terminar esta, Allison nos guío por el pequeño pueblo para encontrar su casa, al llegar a una instalación bastante grande y de color celeste tirando a blanco, paramos
- Yo iré a guardar mis cosas- Comentó sin ganas- si lo desean pueden pasar y tomar algo refrescante- Propuso bajando del auto
Mi madre acepto la oferta y bajo junto con ella, yo me quede en el auto. Deseando llegar de una vez por todas para tirarme en mi cama y dormir hasta el otro día, no debí haber ido a esa fiesta. No paso mucho cuando vi salir a mi madre, su cara de angustia se agravó más por lo que supuse que dentro, notó algo. Ella salió tiempo después con su bolso, al parecer no poseía mucha ropa, ya que su bolso no era muy grande.
El camino de regreso fue en silencio, ella se quedó dormida pasando la hora.
- Pobre debe estar cansada- Comentó mi madre viéndola por el retrovisor
- Seguro no durmió nada la noche anterior- Continué la charla
- Cuando llegue hare los trámites para el pase de escuela, no te molesta que vaya a la tuya ¿Verdad?
- Nah, mientras no esperes mucha ayuda de mi parte- Levante los hombros. Odiaba cuando me encargaban a alguien, parecía niñera
- No espero que estés detrás de ella las 24 horas del día, pero que si necesita algo se lo puedas dar- Comentó mi madre molesta
- Veré que hare.... ¿Cuándo es que te vas de viaje?- Cambie de conversación, no quería discutir por algo inútil
- Seguro la semana que viene, estaré afuera casi tres semanas- Suspiró- Me gustaría acortar el tiempo pero me será imposible, tendrás que estar con ella a solas- Me miró de reojo
- Seguro, veras que pasaran volando
El resto del viaje nadie hablo, yo me coloque los auriculares y me quede dormida. Me despertó mi madre una vez que llegamos, intente ayudar a Allison ofreciéndome para bajar su bolso, pero solo me miro y paso de largo, molesta camine golpeando un poco su hombro una vez que la pase.
- Bienvenida a casa- Comentó mi madre abriendo la puerta- Por favor, esta es tu casa también por lo que no te límites con las cosas. Has como que siempre has vivido acá- Le sonrió
- Gracias- Soltó solamente
- Ven te mostrare tu nuevo cuarto- Incomoda mi madre la llevó al que antes, era el cuarto para invitados.
Yo me quede abajo, no las seguiría como perrito faldero. Fui a la cocina y saque de la heladera una botella de agua, el viaje me había dado sed. Mi madre bajo al rato, al parecer no comería porque bajo sola.
En la mañana me encontre con ella en la cocina, estaba de espaldas a la puerta de entrada y por como olia el aire estaba haciendo el desayudo.
- Buenos días- Salude, pasando de ella hacía la cafetera que contenía café recién echo
- Bueno días- Me devolvió el saludo apenas audible
Me senté en la mesa y encendí el televisor. Rato despues llegó con unas tostadas y un pote de mermelada, dejó los cuchillos en la mesa y se dio vuelta para irse.
- ¿No comeras?- Pregunte sorprendida
- No, no acostumbro a desayunar- Contestó deteniéndose
- ¿Por qué hiciste esto entonces?- Señale las cosas en la mesa, bien acomodadas
- Solía hacerle el desayuno a mi padre- Suspiró callándose un rato- Si te molesta no lo hare mas- Comentó tiempo despues, subiendo las escaleras
Mi madre bajo apenas ella subió, pude escuchar su saludo matutino. Sorprendida paso por la mesa viendo las cosas, hizo lo mismo que yo y terminó también en la mesa en frente mio con una taza de café en sus manos
- No sabía que ahora hacías el desayuno- Bromeó agarrando una tostada
- No lo hice yo- Comenté terminando mi café y agarrando mi mochila.
No tenía clases hoy, pero debía juntarme con las chicas para terminar un trabajo grupal, y como éramos muy distraídas nos tomaría todo el dia. Salude a mi madre que seguía comiendo y me fui pasando la puerta. Seguramente el lunes tendria que ir con Allison, cayendo en cuenta ira a la misma escuela.
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Mi extraña prima *Editando*
RomanceCuando el padre de Alison muere le toca a ella ir a vivir con la única hermana viva, por ende con su tia y su hija de la misma edad de ella, Kelly. Hay cosas que llaman la atención de Kelly, con respecto a su prima. Lo primero es que no tenia conoci...