Always hurts.

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     Sus alientos aún se mezclaban producto de la cercanía, manteniendo sus frentes en contacto, como si el tiempo no existiera, todo a su alrededor en ese segundo dejó de existir.

-Por favor di algo- Dijo Harry con tono bajo, al oír esas palabras Louis se separó completamente del rizado, volviendo su vista a sus manos, sin poder mirarlo de frente.

-Harry... esto no es real- El castaño no creía lo que acababa de ocurrir, lo había besado, su primer beso, y tampoco creía que podría sentirse así, enredado entre miles de sensaciones que no podía describir, lo sentía ajeno, sentía que esos sentimientos no le pertenecían, que no merecía ser tratado con la delicadeza y ternura con la que lo hacía el ruloso.

-Claro que es real, pasó Lou, y realmente cada palabra y acto que nació de mí es verdad- Harry se paró del sillón donde se encontraba, posicionándose de pie frente al ojiazul. –Eres precioso, y lo digo enserio, no sé cómo guardas tanto dolor y aun así te mantienes en pie, ojalá pudieras verte como yo lo hago- Sus palabras eran sinceridad, y solo quería que el castaño respondiera algo a lo que él decía, que lo dejara entrar en su vida, sin las miles de sombras que lo atrapaban.

Los ojos de Louis se volvieron de golpe hacia el rizado, lo miraban con resentimiento, y no era lo que Harry esperaba, esperaba que la situación mejorara y al parecer todo sería peor.

-¡Acaso estas burlándote de mí! Te conté algo importante para que hagas esto, confié en ti, yo no quería que pasara...- El ojiazul también decía la verdad, le parecía imposible que la situación hubiera terminado en un beso que posiblemente para el más popular no tendría valor.

-¡¿Por qué sigues pensando lo mismo de mí?! No soy ningún idiota Louis, me gustas, te quiero conocer y no me dejas hacerlo, pareciera que tú mismo deseas a las personas lejos de ti- El tono del ruloso había subido, y observaba atento como el castaño se acercaba a la puerta para irse de su casa, antes de abrirla y marcharse se giró hacia Harry, mirándolo con enojo.

-Me lo acabas de confirmar, eres más idiota de lo que pensaba, ojalá esta historia no termine en los pasillos de la escuela y te conviertas en las personas que más odio, no volveré a ser el hazmerreír de nadie- Louis abrió la puerta y salió casi corriendo de la casa del ojiverde, dando un portazo tras él.

Harry sabía que se había equivocado, que lo que dijo lo dijo sin pensar, provocando que aquel beso se convirtiera en un malentendido y no en el inicio de algo que él por primera vez sentía real, a pesar de todas las veces que había sido ignorado y rechazado, no se alejaría del ojiazul, porque aunque aún no lo sabían se necesitaban mutuamente.

Louis llegó a su casa, con la respiración agitada y su corazón queriendo escapar de su pecho, abrió la puerta e ignorando los gritos de Jay subió las escaleras, encerrándose en su habitación. Sin saber qué hacer se acostó en el suelo cerrando fuertemente los ojos, la imagen de los labios del rizado tomando los suyos, su respiración al unísono y esa calidez en el pecho en el segundo que sintió la cercanía del ojiverde, lo estaba atormentando, sabía que no era verdad, sabía que el rizado solo jugaría con él, no había otra opción, el no era el tipo de persona que le gustaba a otras y algo que siempre escuchaba de aquella voz molesta en su cabeza, "estás solo". No deseaba pensar así que solo cerró los ojos más fuerte, quedándose dormido.

-Mensajes entre Louis y Harry-

(miércoles, dos días después de lo ocurrido en casa de Harry, 3:15 a.m)

Harry: Louis, lo siento... sé que dije cosas que no debía, no te enojes así :(

Louis: No estoy enojado, solo aprendí que tus promesas no se cumple.

"Standing With An Army." (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora