Silent shouts...

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Louis a cada minuto que pasaba reconocía en sí mismo el cambio que provocó Harry en él, sentirse feliz y el poder decir que se amaba a una persona era algo que jamás imaginó, amar para él era un concepto distorsionado que se rompió cuando solo era un niño, nunca recibió la protección de su madre y eso le significó sentirse solo y sin el cariño necesario que debía sentir un niño, su madre lo amaba pero nunca supo ni tuvo el valor de defenderlo destruyendo la única imagen heroica que su hijo tenía de ella. Por eso esa necesidad de decir la frase te amo era algo extraño pero que lo llenaba y lo hacía sentir seguro, entregándole toda la protección que siempre deseo, y no refiriéndose a una protección física sino una que importa mucho más, ahora sus sentimientos y emociones estaban protegidos, había alguien que estaba dispuesto a cuidar cada una de esas heridas aún expuestas en él y eso aunque le cueste reconocerlo era lo que siempre buscó, su corazón agrietado siempre anheló ese algo o alguien que lo ayudara a reconstruir su propio ser.

Pero la vida sigue sin ser un cuento y los demonios arraigados en una persona son muy difíciles de ahuyentar, aún estaba la imagen distorsionada que el castaño tenia de si, el maldito espejismo que lo hacía ver en el espejo a otra persona, a un Louis gordo y con todas las imperfecciones que su mente le hacía ver, necesitaba ayuda, pero el solo no sería capaz de parar el sentimiento satisfactorio de sentirse vacío físicamente, ni sería capaz de reconocer que el amor no es solo decirlo sino que también demostrarlo aunque no se sienta así, emocionalmente se sentía acompañado y tranquilo, los flashes de su pasado eran cada vez menos frecuentes, pero su cuerpo se estaba deteriorando, sus ansias de estar a la altura de su novio le roían sus pensamientos una y otra vez. No comer le significaba un sinfín de malestares, dolores de cabeza constantes, frío incontrolable, debilidad, y un aceleramiento anormal de su corazón, a decir verdad eso le asustaba un poco, su corazón de un tiempo a esta parte latía más rápido de lo que él pudiera recordar, además el dolor de garganta se le había vuelto insostenible y habían día es los que simplemente no podía hablar, esto se debía a que durante el último mes comía todos los día con el rizado y su única forma de "solucionar su problema" era provocándose el vómito.

Louis salía del baño de la escuela luego de haber devuelto todo lo de su almuerzo y a decir verdad se sentía mal y apenas podía respirar con regularidad, al levantar la vista hacia los lavabos su novio lo miraba con una mezcla extraña de tristeza y enojo.

-Prometiste que ya no lo hacías Lou- El ojiazul tenía un pitido insoportable en sus oídos y lo único que quería era alejarse de ahí para poder sentarse en algún lugar a descansar, por lo que ignorando a Harry se enjuagó la boca y salió al paso que su cuerpo le permitía en esos momentos.

-¡Hey Louis, espera!- Habló el rizado, alcanzando por el hombro al castaño.

-No estoy de humor para recriminaciones Hazz- El tono cansado Louis dejó entrever que realmente no estaba enojado, sino que simplemente no tenía ganas de pelear.

-No quiero hacerlo pero me preocupo por ti, no sé qué hacer cuando esto pasa, me siento inútil porque no se la verdadera razón por la que lo haces, incluso pensé que ya no lo hacías, lo prometiste- Estaba triste y eso era algo que cualquiera podía, obviamente le preocupaba la situación de Louis pero no la comprendía y eso no ayudaba en lo absoluto.

-Estoy bien ¿ok? Fue un error lo siento Hazz es simplemente que hay veces que no puedo controlar mis impulsos, no lo volveré a hacer- Y dicho eso el castaño apuró un poco el paso y se alejó del rizado.

Había dicho una mentira y lo sabía, realmente le dolía mentirle a su novio pero no podía permitir que lo descubriera, si eso pasaba no lo entendería y lo haría comer a hasta ser más cerdo de lo que ya era, de hecho nadie entendía que él tenía que adelgazar, así que no le quedaba de otra que esconder su secreto lo más que pudiera. Pero Louis se equivocaba poco a poco su cuerpo lo delataría, caminó alejándose de Harry aunque sabía que este aún caminaba detrás de él, su cabeza le daba vueltas y el dolor punzante que sentía en la base de esta no ayudaba para nada, a cada paso que daba el mareo que sentía se hacía cada vez más intenso y llegó el punto en que todo se escuchaba lejano como si estuviera bajo el agua, su visión estaba perdida y su caminar se volvía errático, dio solo un paso más y la negrura lo embargó.

"Standing With An Army." (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora