CAMPUS

Capítulo 3

He preparado la bolsa con dos botellas de agua y unos bocadillos. Rin y Toshio están en un equipo de voleibol así que nos meterán una paliza si Yuki y yo nos ponemos juntos en un equipo.

Cuando hemos llegado, Rin parecía estar contándole algo importante a Toshio ya que cuando nos miró llegar se sorprendió. No nos atrevimos a preguntarle, no queríamos meternos en sus asuntos.

-¡Hola!- dijimos Yuki y yo con una gran sonrisa.

-Eh?... Ah... Hola- dijo Toshio fingiendo no habernos visto.- Pues ya que estamos todos, ¿cómo vamos a hacer los equipos?

-Yo pienso que como estáis en un equipo no deberíais poneros juntos, nos pegaríais una paliza.- dije de forma objetiva.

-Tienes razón pues...- Yuki interrumpió inmediatamente a Toshio.

-¡YO CON RIN!

-Vale, vale...- Toshio parecía abrumado, y normal con toda la energía que desprende Yuki.

Cuando ha pasó una hora, Toshio decidió ir al baño a hacer sus necesidades, y mientras, Yuki y Rin se pusieron a pasar la pelota.

En un movimiento muy brusco, Yuki se torció el tobillo, y no podía andar. Como yo no podía llevarla, Rin cogió a Yuki y fuimos a urgencias.

Cuando ya llegamos allí nos percatamos de que no le dijimos nada a Toshio. Yo fui corriendo a buscarle y deje a Yuki y a Rin solos.

Cuando llegué, Toshio estaba preocupado buscandonos. Cuando me vio, la cara se le alegró.

-Al fin... ¿Dónde estábais?

-Yuki se torció el tobillo y la llevamos a urgencias, y se nos olvidó decirte nada.

-Pues menos mal que estás bien.- se acercó a mí y me abrazó.

Toshio me ha acompañado hasta mi residencia. Cuando estaba a punto de entrar, le dije a Toshio:

-¿Por qué eres tan amable conmigo?

-Eh... ¿Qué?... Pues... Eh...- ¡lo puse nervioso! Estaba completamente sonrojado.- Es que... Desde el primer momento en el que te vi... Me transmitiste una buena sensación, eres como... Mi hermano.

¡¿Qué?! ¡¿Su hermano?! Me acababa de llamar su hermano. No me lo creía, por un momento en el que tenía una conversación más seria con el me dice eso.

-Ah... Vale... Gracias- soné borde pero en ese momento estaba molesto, no me lo creía.-Bueno... Adiós.

-E... ¡Espera!- me cogió del brazo.-Siento mucho si te ha molestado algo de lo que he dicho. ¿Me... Me perdonas?

Me quedé en el sitio, no me creía lo que estaba pasando. Desde lo que pasó en el lago, no sentía esta sensación tan fuerte por el.

Comenzó a hacercarse a mi y entonces...

Me besó en la mejilla.

Durante unos segundos no nos dirigimos la palabra. Estábamos completamente callados hasta que abrió la boca y dijo:

-Bueno, pues adiós, Haku- me sonrió.