Black Side

3. El comienzo.

3

Ponyville, 2016

—Arg, es una larga historia... —la rubia dijo con evidente disgusto.

—Lo siento... yo... no sé... que me pasó —titubeo la pelinegra.                                                                          

     Twirly se sentó en el césped, su mirada se perdió mirando al cielo. Venían 2 pegasos volando, eran Paint Flower una pegaso blanca, melena color amarillo y y otra pony.

—¡Cuidado allí abajo amigas! —dijo la pegaso blanca, mientras aterrizaba en tierra.

Paint Flower abrazó a Twirly, sin percatarse de su cara pálida.

—¡Vengan conmigo les mostraré algo! —decía en un tono emocionado.

Paint Flower no parecía presenciar la macabra escena del lugar, así que siguió convenciendo a las demás.

—Lo siento, no puedo ir, créeme pareces no darte cuenta...  —decía  la pelinegra mientras agachaba la cabeza intentado ocultar sus lagrimas.

—Porfis si, ándale... ¡Será divertido! —exclamó la insistente pony.

—¡Por favor! ¡Di qué si! —insistió la otra yegua.

     Debido a la insistencia de las ponys, Twirly no soportó la situación levantándose así y alzando la voz.

— ¡Dije que no! y por si no lo has notado, mira atrás tuyo... —irritada,  con un tono de voz firme, señalando con su casco hacia atrás.

Quedando totalmente muda, la yegua blanca observó lentamente hacia atrás.

     Al momento de voltear, miró a Sunny Breezie, ahí toda llena de sangre y lastimada luciendo como un frío cadáver. Paint se exaltó del susto al igual que su compañera pegaso.

—¿¡Qué demonios le pasó a Sunny Breezie!? —dijo con los ojos desorbitados, totalmente asustada.

—Arhg, es lo mismo que yo me pregunto —respondió Wolf desganada, alternando miradas entre el cuerpo de la yegua y Paint.

     Como si no fueran suficientes ponys en escena, se cuela Colorfull Song, otra pegaso rosada con melena multicolor.

— ¿Qué es lo qué pasa aquí? Alguien explíquenme... —fijamente miraba el cuerpo—. Quien ha sido capaz de hacer una atrocidad así... ¿Quién ha sido? ¡Debo llamar a la directora!

     Desesperadamente Twirly se acercó hacia ella y le tapa la boca con un casco, evidentemente muy irritada ante todo el espectáculo.

—¡Cállate y no hagas más preguntas! ¡Estoy cansada! —respondió en un tono amenazante.

     La yegua rosada pareció entender y solo guardo prudente silencio. En ese momento sonó la campana para entrar a clases. Todas alternaban miradas entre sí sin saber como actuar, o que hacer.

—Bien... es hora de entrar a clases... Pero, que hacemos con ella ¿Estará aún con vida? —preguntó Love Fashion, rompiendo el silencio.

Tanto Paint flower, Wolf Paw y Colorfull se quedaron desconcertadas por no saber que hacer.

—Ustedes váyanse, yo la llevaré a la enfermería —colocaba con cuidado a Sunny en su lomo, la observaba con tristeza.

     Fueron todas a clases muy desconcertadas. Después a la hora de la salida, Twirly  simplemente corrió lo más que pudo hacia su casa. 

—¿¡Qué demonios!? —los cabellos de Bright se exaltaron del susto cuando abrió la puerta.

—Lo siento mamá, tengo prisa nos vemos en la cena —corrió con rápidez y cerro la puerta trás de si.

     Twirly se recostó en su cama, reflexionando en completo silencio.

—¿Por qué hice eso? —dijo mientras se miraba a si misma a través de un espejo.

—Aunque me sentí bien al hacerlo, se supone que no debería —por sus mejillas recorrían un par de lágrimas.

— Tranquilízate cariño, ésto eres tú, ésto es algo que siempre quisiste hacer ¿O no? —una voz resonaba dentro de ella, como si alguien le hablara desde muy en el fondo.

—¿Quién eres tú? 

—Lo que importa aquí no es quien soy, sino como te sentiste querida —respondió en un torno burlón.

—A decir verdad, aunque no recordé lo que hice, el verla tirada ahí sufriendo... Fué un sentimiento lleno de placer — Se respondió a sí misma, cambiando levemente de expresión, sonriendo de lado.

—¿Lo ves? ¿Por qué no vas allá y terminas tú trabajo? —la voz la incitaba, en un tono burlesco.

—Tienes razón —se limpió las lágrimas y sonrió son cinismo—. Pero como debería hacerlo... En este instante soy yo misma...—decía aun observándose al espejo.

—¡Ha! eso es fácil, solo deja que me apodere de ti cariño —la voz sonaba ahora con más seguridad.

     En ese momento Twirly asintió con la cabeza, con una expresión de seriedad y sabiendo las consecuencias no le importaban, ella quería sentir ese placer de nuevo.

     Una sombra negra cubrió el cuerpo de Twirly. Sus ojos volvieron a ese color carmesí, la piel oscura y el cabello negro se hicieron presentes. Mirándose de nuevo al espejo sonrió. 

— ¡Sunny Breezie! —gritó la pony con una voz macabra.

Twirly caminó lentamente por las escaleras y una gran sonrisa se depositó en su rostro, empezó a planear como seria su venganza, por tantos años de dolor.

Entre las sombras alguien la observaba. Unos ojos rojizos brillaban desde las penumbras.

El comienzo

Capítulo 3