-Capítulo 15-

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El me abrazó y yo me acurruqué en su pecho. Lo había convencido de quedarse conmigo era como si me temiera, como si temiera quedarse solo conmigo.

Después de haber bajado de la rueda de la fortuna, nos fuimos a casa, durante el viaje a mi apartamento no hubo palabra alguna, aún seguía callado. Llegamos y detuvo el auto, me miró y luego me dió el oso, yo lo miré y mi...re el oso, dentro de mi sentí mi corazón acelerarse, y después le insistí que se quedara esa noche conmigo, porque no queria estar sola.

Luego de tanto ruego el accedió y ahí estábamos los dos, acostados en mi enorme sofá, solo mirándonos a los ojos en silencio, hacía frío porque había empezado a llover, pero yo me sentía bien entre sus brazos... como amaba estar así con él.

- ¿Por qué estuviste tan alejado de mi hoy? – le pregunté y el no respondió, luego de unos segundos lo hizo.

- No queria estorbarte en tu cita.. – susurró apenas audible pero lo oí.

- Vos jamás serás un estorbo para mí. – le dije y el me miré y sonrió.

- Sabes hoy lo hiciste muy bien, te portaste como toda una señorita, es lógico que conquistarías a cualquiera.

– A cualquiera pero no a vos, pensé. - Eso se lo debo a mi maestro, que me ha enseñado a ser más femenina – dije.

- ¿Y no le agradeces?

-Obvio que sí, jamás voy a dejar de estar tan agradecida con él, a estado conmigo cuando más he necesitado a alguien, me ha hecho reir, y me ha apoyado.

- Es porque me gusta serlo... - dijo y yo callé por unos minutos.

- Perdóname – logré decir al fin.

- ¿Por qué? – susurró cerca de mis labios.

- Durante estos años te juzgue mal, siempre pensé que eras un egoísta y orgulloso; que solo pensaba en si mismo, pero ahora me doy cuenta que nunca te di la oportunidad de ser mi amigo, y no sabes como lo siento. Has estado conmigo ahora y me has hecho feliz.

- El me miró por unos instantes en silencio y luego besó mi frente.

- No tengo nada que perdonarte, jamás me porté bien contigo siempre te traté mal y... también te juzgué mal – susurró y acarició mi mejilla, yo cerré mis ojos.

- Me encanta cuando haces eso. – dije .

- ¿Qué? – preguntó.

- Cuando estas así de cerca y me acaricias, me hace sentir protejida. – sonreí, y con los ojos cerrados, pasé mi mano por su cara tocando primero su cabello, luego sus cejas, sus ojos, su nariz, sus mejilla y por último sus labios, pasé saliba por mis labios.

Cómo deseaba besarlo, con los ojos cerrados podía ver su cara, porque estaba muy metida en mi cabeza, lentamente y con delicadeza acaricié sus labios como algo que se ve tan delicioso y deseable pero no se puede tener, luego me quedé dormida.

Lunes al medio día, y ahí estaba yo en mi trabajo. El fin de semana estuve estudiando porque tenía que entregar un proyecto de historia hoy, con suerte tendría la mejor calificación. Bueno... ¿Qué puedo decir? Soy una chica bonita poseída por una nerd jaja, espero pasar con buenas calificaciones este semestre para desmostrarle todos que se puede ser bonita y a la vez inteligente.

El sábado en la mañana desperté y Julián no estaba, me sentí mal. Aunque toda la noche dormí como un ángel en sus brazos, pero no lo lograba entender a él, ¿Por qué siempre escapaba cada vez que pasaba algo asi entre nosotros?, El domingo me llamó, quería saber cómo estaba y aprovechó para excusarse porque se había ido tan temprano: dijo que había quedado con Francisco para hacer un trabajo de física, entonces por eso se había ido.

FALL//ORIAN//ADAPTADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora