Cuarta Parte

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Sasuke

-Deja de decir tonterías, y lárgate

-Quiero hacerte compañía, me siento sólo --su mano tomó mi antebrazo y me jalo hacia a él.

Dejándonos frente a frente, pude ver que sus ojos celestes se habían oscurecido, pero esto era una mala idea.

Como me cagá que invadan mi espacio personal.

-¿Que crees que haces?

-¿Que tiene de malo sostenerte?

-Deja de contestar con una pregunta...

Sus ojos celestes me miraban de una forma que no puedo explicar, de alguna forma intensa. 

Esto es malo, que tal sí lo que me dijo esta tarde es real y ahora mismo quiere violarme.

Maldita sea... ser violado y por tu mejor amigo que ironía. Rápidamente sus manos bajaron velozmente a mi parte íntima, por supuesto mi cuerpo respondió ante su acción y esquive aquel roce de sus dedos en mi miembro. Pero fue difícil ya que todo su cuerpo estaba sobre el mío y bueno a decir verdad a pesar de Que tiene un semejante de altura basico, tiene una fuerza increíble. Sostuvo mis brazos hacia la parte posterior de mi cuerpo, fue inevitable reprenderlo ya que sus labios atraparon a los míos con un beso tierno y dulce.

Pero que estas pensando Sasuke Uchiha, el chico frío que rechaza propuestas de amor esta sintiendo estímulos indecentes con un hombre. Frenalo...

-¡Sueltame!

-Sasuke... mi Sasuke

-En serio estas haciendo que pierda mi paciencia... --dije, sentí que una gota sudor bajo por mi pómulo izquierdo.

-Sólo dejate llevar Uchiha --me sorprendí ante lo que había dicho.

Pero que demonios le pasa... mi cuerpo comenzó a secretar sudor frío, realmente va en serio con esto. Lo observe detenidamente, analizando todo lo que estaba pasando. A ver mi amigo es adicto al sexo y hace unas horas que me lo confesó.

Su sonrisa fue demasiado latente ósea que a simple vista disfrutaba de mi vulnerabilidad y sustento hacia a él. La irá se esparcido por todo mi cuerpo sentía la bilis subir por mi esofago y un nudo de coraje en mi garganta.

Su facción facial se percató de mi estado de humor y el muy idiota dibujó en su rostro una sonrisa de satisfacción, como si estuviera con divirtiéndose conmigo a los juegos sexuales, pero él rubio estaba hundido en sus pensamientos  y más estúpido. De repente me empujo contra la pared, mi espalda impacto contra ella.

Mierda tenía fuerza, como es posible que me pueda golpear con toda esta fuerza si en el dojo siempre soy yo quien lo derriba. Maldita sea no puedo moverme, todo su cuerpo estaba sobre el mio... esto no me gusta

-Esto ya no es gracioso --frunci el ceño, estaba cabreado. Es más la forma en la que están tomando las cosas me tiene un poco perplejo.

-...

-Sueltame cabronazo

Sus mejillas estaban totalmente rojas, sus ojos celestes estaban apagados. Sonreía pero sin ninguna factibilidad de conciencia posible y de que realmente era el dobe que se fue a dormir hace unas cuantas horas.
Sus manos se metieron debajo de mi camisa blanca. Estaban frías, por supuesto mi columna vertebral fue víctima de la caricia ya que una corriente de frío viajó sobre ella. Pero que demonios hace... comenzó a a bajar.

-¡Hey Dobe! Que...h-haces --mierda, esto esta mal.

Mis mejillas estaban realmente calientes por la acción del rubio... Soltó una risita burlona, se remojo sus labios con su lengua y volvió a besarme, pero sus movimientos eran un poco más bruscos que lo anterior, sus manos viajaron esta vez hasta mi nuca ya que me resistía al beso, me impacto con otra sus labios y su lengua entró con facilidad. Los movimientos de su músculo dentro de mi boca eran lentos y suaves.

¡Lo mataré! Maldita sea...maldita  sea...maldita sea.

Se alejó de mi y su mano se detuvo en mi miembro. Suerte que llevaba mi boxer. Joder, me estoy cachondeando...esto esta mal. Es más es su puta adicción la que esta haciendo esto y no él. Pero que es lo que estoy  pensando no importa como este la situación esto termina ahora.

-JURO QUE SI HACES ALGO MAS NO TE PERDONARE... --grite a más no poder.

Sus ojos celestes me observaron fijamente mantuve aquella mirada.
Ni se inmutó. Ahora que hago...terminará por joderme. Su rodilla rozó mi miembro, apretó con fuerza e hizo una fricción de arriba hacia abajo.

-N-Naruto...N-No lo hagas --sentía mía mejillas enrojecidas.

-Pero si te gusta, es más hasta le he despertado --sonrió.

Sosteniendo mi miembro con una de sus manos. Su dedo índice comenzó a manipular mi glande pero a través de la ropa. Me estremecí en la pared ante en contacto penoso que hizo. Esto me esta comenzando a fastidiar y a molestar.

-Ah --de mis labios salió aquel gemido. Me mal dije internamente por aquel afán tan vergonzoso. El muy estúpido soltó una risita burlona. Quería golpearlo, noquearlo y hacerle sufrir. Pero mi cuerpo estaba enfocado en sus caricias extrañas que estimulaban todo mi ser. Sus brazos rodearon mi cintura

¿Eh?

-Y quiero seguir provocándole hasta que te quedes inválido --volvió a besarme.

-¡N-Naruto! ¡Para! ¡Demonios!


Fin de la cuarta parte ;)

*Se acerca el salseo extremo, espero y tengan preparado sus pañuelos para lo que viene 7u7

NINFÓMANO ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora