17, Sad

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Quería esconderme bajo tierra para no volver a ver la luz, quería encerrarme en un pozo sin fondo, pero él quería tirarse conmigo. No podía aguantar ya más nada.

Porque no era nada lindo tener la habilidad de apagarle el sol a cualquiera, me estaba incendiando sin fuego, me estaba quemando sin calor y mis cenizas se esparcían sin viento.

Tenía gritos guardados que nadie escuchaba, gritos que rompían toda aquella ventana de mi alma, ventanas que se partían en estacas de vidrio, miles de apuñaladas en un segundo.

El corazón se me desarmaba. Y ya no sabía si dar el último paso para saltar, estaba en el borde del abismo.

Una parte de mi decía que terminara antes de acabar peor, era una salida fácil y tenía la puerta frente a mí, pero un susurro repetía que no lo hiciera, que me había esforzado en vano.
Y me quedé varada en la duda, detrás mío, los materiales para construir un puente, pero delante de mí estaba el bosque mortal y peligroso.

¿De verdad valía la pena seguir? Si por más que lo hiciera terminaría igual a que si me tiraba, y el susurro se volvía una voz clara respirando detrás de mi cuello, me pedía intentar.

Y decía que al menos moriría en el intento.

Posó su mano en mi hombro y me dijo que estaba conmigo. Y aveces no podía creer cómo Heart lo hacía, cómo lograba susurrarme algo en medio del desastre, y yo sin entender cómo lograba escucharlo.

Aún recuerdo el momento exacto en que apagó el incendio en sus brazos.

Flores sin pétalos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora