MY DOWNFALL || J.b

Capítulo 2

Justin por favor, ya te lo ruego. ¡Haz el favor de salir! - La cara desesperada de Daniel, me causaba gracia pero a la vez él estaba que se subía por las paredes.- No es lo mismo sin ti, por dios...

Daniel es mi mejor amigo des de que empezamos la ESO juntos. Éramos como dos gotas de agua, exactamente igual. Hacía Daniel sentía un aprecio y respeto grandioso, pero cuando se le metía algo entre ceja y ceja era el hombre más insoportable de la tierra.

Está bien, pero antes iré a ver a Sofí.- Le dije mientras daba otro sorbo a mi cerveza.- Pero que no se te haga costumbre.

¡Esto realmente es un milagro! - Río mientras palmeaba mi muslo con alegría.- Sofía es una chica de puta madre, y lo que más quiere es que disfrutes también de tu vida Justin, no estás amarrado a ella.

¡Pero ella está amarrada a una cama!- Dije desesperado.- Y no puedo evitar sentirme algo culpable, por no poder hacer nada al respecto.

Justin el que este postrada a una cama, es por ahora. Le encontraron el tratamiento tarde, pero está mejorando y todos lo estamos notando.- Daniel era optimista, pero a veces había que ser realista.- Habrá un día en el que por mucha enfermedad que ella sufra, a ti te gustara otra chica, y a ella igual. Sólo os tenéis un cariño muy grande, pero ya ninguno quiere al otro.- En todo esto Daniel estaba teniendo toda la razón.- Ella valora mucho todo el apoyo que le estás brindando.

Lo sé, todo. - Suspiré.- Pero me siento mal, saliendo y ella sin poder hacer nada.

Todo pasa hermano, de todo se sale.- Palmeo mi espalda y desapareció por la puerta.

Después de estar una hora con Sofía, empecé a prepararme para salir con Daniel y unos amigos más.

Llevó más de un mes sin tocar el suelo de un club, y quizás como dijo Daniel era hora. Mire por última vez mi reflejo en el espejo y agarre las llaves para caminar hacia mi coche. Tenía que ir a por Daniel antes de ir al club.

Son las 02:37 de la mañana y me encuentro con un cubata en mi mano izquierda y un cigarrillo a la mano derecha. Daniel había cogido un reservado para nosotros y nos encontramos arriba en un palco de la discoteca.

¿Vienes a dar una vuelta? - Me pregunto Jack, le acepte la propuesta y fui detrás de él. Jack era un moreno de mirada azul que cautivaba a cualquier chica sólo con parpadear, pero algún que otro rumor había llegado a mis oídos y era que su miembro varonil no era muy imponente.- Mira aquella morena.

Busque con la mirada a donde él se dirigía como una chica de bonitas piernas y melena larga contoneaba su culo de lado a lado y arriba abajo con un vestido de seda color rosa palo.

Esa chica tiene que estar exquisita.- Me murmuro Jack en el odio.- Mi instinto nunca falla.

Continuamos mirando como se movía al compás de su amiga castaña, esperando ver si su belleza estaba en todo su cuerpo y no de cintura para abajo. De un momento a otro se giro poniendo su trasero en la pelvis de su amiga mientras se restregaban y bailaban entre carcajadas.

Entonces aquella mirada azul se clavo en mí y su sonrisa se expandió, Megan.

Megan camino hacía mi con una sonrisa completamente indefensa y encantadora, su mirada tenía un color celeste, y su pecho subía y bajaba a un ritmo cardíaco.

Hola Justin.- Me sonríe mientras besa mi mejilla. - ¿Que tal estas?

Todo bien, divirtiéndome un rato.- Trague saliva.- Ya veo que somos dos quienes lo estamos haciendo.

Todos necesitamos desatarnos un poco. ¿No crees?- Apoyo su mano en mi hombro masajeando lo delicadamente.

Estas preciosa Megan.- Los labios de ella se elevaron poco a poco mostrándome una sonrisa dulce. Sé que Megan podía sacar mucho partido de su cuerpo, y en sí mismo de ella.

Gracias, vente conmigo.- Agarro mi brazo y me arrastro con ella entre la multitud, dejando atrás a Jack y a su amiga. Me plantó en medio de la pista y con nuestros dedos entrelazados empezó a mover sus caderas mientras mi brazo estaba alto junto con el suyo, ayudándola a facilitar sus movimientos.

La música y las risas que salían por los labios de Megan estaban haciendo que esta noche fuera muy placentera. Megan tenía un don para mover su culo, y era agradable de ver.

¿Con quién viniste?- Me pregunto en el oído rodeando sus brazos alrededor de mi cuello.

Con unos amigos.- Ella asintió lentamente buscando algo con la mirada.

Me presentarás alguno de ellos.- Alcé unas de mis cejas. ¿Estaba bromeando? Lo siento pero si Megan no era mía, no sería de nadie.

No cariño, hoy no es la noche.- La acerque aún más a mi.- Quizás sea la nuestra.

AQUÍ EL CAPÍTULO 2, ESPERO QUE LES GUSTE.

xoxo.