Capítulo catorce

5.2K 309 64
                                    


Alisé la falda del vestido que llevaba puesto mientras me miraba en el gran espejo de la habitación de Alison. Arrugué la nariz, poco convencida de mi nuevo atuendo, y moví los dedos de los pies contra la suave moqueta de su habitación, respirando hondo y pensando en la manera de decirle a Alison que este tampoco me convencía.

Llevaba un vestido que me había dejado, y había tres más esperando en la cama, para que encontrara el que mejor me quedara, pero lo único que miraba era mi ropa, extendida en un sillón de terciopelo morado al lado de la cama.

—¡Estás guapísima! —gritó Alison cuando salió del baño. Soltó los zapatos en la alfombra y se acercó a cogerme de la mano y darme un vuelta— ¡Este, este!

—Creo que prefiero llevar mi ropa —confesé, haciendo una mueca, apenada por decírselo. La sonrisa de su rostro se esfumó y me miró con tristeza, tanta que me hizo sentir remordimiento y replantearme el ponerme uno de sus vestidos— Por si tenemos que salir huyendo...

Ella se rió entre dientes e hizo un gesto con la mano para restarle importancia, antes de coger los zapatos del suelo que había buscado explícitamente para mí.

—De acuerdo, pero sabes que puedes coger los vestidos que quieras—me guiñó un ojo y me quitó el sitio en el espejo para ponerse los pendientes.

Asentí, sonriendo levemente, y cogí la ropa para cambiarme a la vez que ella.

—Quería hablar contigo, ya sabes, desde el incidente no hemos tenido mucho tiempo...

—¿Cuál de todos? —bromeé, levantando la vista del broche de mis pantalones.

—De todos, en verdad —se rió de vuelta, mirándome a través del espejo— Lo primero de todo, quiero que sepas que yo no soy, ni seré, un obstáculo en tu relación con Dylan, es sólo que últimamente somos algo más cercanos. Son cosas personales —suspiró y se dio la vuelta, acercándose a mí y acariciándome el pelo con ternura mientras hablaba— Me encantaría poder explicarte más, pero él es muy discreto con su vida privada.

—Él y yo no estamos técnicamente en una relación, es complicado —musité, evitando su mirada mientras me terminaba de vestir.

—Paciencia... —se mordió el labio y negó— ¿Y ese chico tan guapo que vino a buscarte?

Enarqué una ceja mientras cogía los botines del suelo y negué para después mirar a Alison con una mueca que demostraba que no tenía importancia.

—Problemas del pasado. 

—Ojalá tuviera ese problema —comentó Alison, mirándome con una sonrisa cómplice mientras se mordía el labio.

—Todo tuyo —dije, sonriendo brevemente cuando terminé con las botas, poniéndome de pie de un salto.

Alison levantó su dedo índice, indicándome que la esperara y entró en el baño de su habitación. Suspiré al recordar mi conversación con Derek y me llevé dos dedos a la frente, haciendo un poco de presión e intentando aliviar el dolor de cabeza que me producía pensar en él y todos los problemas que traía.

—Sabes que no puede hacerte nada —dijo Alison cuando entró de nuevo a la habitación para coger los zapatos, los cuales se puso rápida y ágilmente— Michael le pegaría muy fuerte... Y Tyler. Seguramente, todos, incluso Summer. Y Abbey lo machacaría antes que Thomas. Él es tan tierno, no le haría daño a una mosca.

Sonreí ampliamente al escucharla hablar de Thomas, éste era el momento perfecto para que le preguntara por el tema sin que estuviera fuera de contexto.

—¿Y la rubia que lo acompañaba?

—Supongo que será su novia —moví la mano con despreocupación, ahora el tema importante era Thomas— ¿Y qué pasa con Thomas?

silence » dylan o'brien (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora