ATAQUE DIXON ;Carl Grimes

Capítulo 7

°Narra Alicia°

Mi pierna ya esta cada vez mejor, pero al contrario, Carl no. Hablando de el ha estado actuando muy raro últimamente. Se que ya es raro por naturaleza pero ahora es diferente y mucho mas frío. Ha estado muy distraído, tanto que ya casi lo mordía un caminante pero fui mas rápida y le salve la vida de nuevo, el comenzó a gritarme y decirme que no me necesitaba. No se que trae entre manos pero sea lo que sea lo voy a descubrir.

-Hola Alicia -llego Natalia y rodé los ojos, lo que menos necesitaba era verla, aunque podría sacarle información.

-Hola Nat -force una sonrisa.

-¿Qué has hecho?

-Nada importante, ¿y tu?

-Carl ha estado distante conmigo -valla que cambio de tema.

-Lo ha estado con todos así que acostúmbrate -le dije seria.

-Si pero se supone que somos novios.

-Pero el ha esta... espera ¿¡Qué?! -abrí los ojos como platos. Todo iba bien hasta que dijo la ultima palabra.

-Bueno, no me lo ha pedido pero actuábamos como unos -encogió los hombros.

-Que bien -dije desinteresada.

-¿Sabes qué le sucede?

-Es lo que iba a preguntarte -me cruce de brazos.

-Supongo que ninguna de las dos sabemos el motivo -se levanto y se fue sin despedirse. Suspire y vi a Carl que se escabullía hacia la puerta principal, fruncí el ceño, supongo que no debería entrometerme.

Deberías de hacerlo, vamos.

Pero no me incumbe.

La curiosidad gana.

La curiosidad mata al gato.

Suspire una vez mas y me fui tras el.
Abrí la puerta tratando de que no se escuchara ni un mínimo sonido y la volví a cerrar. Logre visualizarlo, iba hacia la parte de atrás de la casa mientras volteaba a todos lados para asegurarse de que nadie lo estaba siguiendo así que me escondí detrás de los arbustos mientras lo seguía con la mirada hasta perderlo de vista. Me posicione detrás de la pared-esquina para espiarlo y lo que hizo me dejo desconcertada, estaba cavando un hoyo en la tierra donde habían flores marchitadas y puso un arma en él para después volver a tapar el hoyo y coloco encima una maceta para evitar sospechas. Fruncí el ceño y me limite a pensar posibles hechos de lo que ocurría.

-¿Alicia? -mierda, me ha descubierto.

-¡Hola Carl! ¡Cuanto tiempo! -le dije mientras levantaba los brazos exageradamente y el solo me miraba extraño mientras levantaba su ceja derecha.

-¿Qué haces aquí?

-Vine a avisarte que... que... -vamos Alicia piensa en una excusa -que... amm ¿sabes? Se me acaba de olvidar, así que... adiós -dije y me fui corriendo hacia la casa antes de que me alcanzara. Valla pero que estúpida excusa.

Fui a la habitación en el que mi padre y yo dormimos y me recosté en la cama. Estaba tan relajada que me sobresalto al momento de que escucho el rechino de un zapato al pisar la madera del suelo, me levante rápidamente y tome el cuchillo que estaba en un cajón de la lampara, durante un minuto completo no se escucharon mas ruidos, supongo que fue mi imaginación. Guarde el cuchillo en su lugar y me volví a acostar, cerré los ojos y se volvieron a escuchar esos molestos ruidos.

-¿Quién esta ahí? -no hubo respuesta -Si esto es una jodida broma no es para nada gracioso -camine hacia el ropero de la habitación sigilosamente.

-3...2...1...¡ya! -abrí el ropero y no había absolutamente nada. Estaba a punto de voltearme cuando una mano en la cintura y otra en mi boca me detienen.

-Shhh no querrás que nadie nos escuche, ¿o si? -Reconocería esa voz y esas palabras perfectamente. -¿Me recuerdas?

Comencé a moverme hasta que me safe de su agarre, corrí todo lo que pude hacia la puerta y gire la perilla pero era inútil porque estaba atrancada con seguro.

-¿Crees que escapar de mi seria tan fácil? - Comenzó a reír de una manera sínica y me tense. Escuche un sonido metálico proveniente de el y cuando voltee estaba quitándose los pantalones.

-Esto lo vas a disfrutar -Dijo y me correteo por toda la habitación. Lo único que se me ocurrió fue gritar. Tome aire y deje salir todo.

-¡Ayúdenme por favor! -Al gritar, se escucho un golpe en la puerta a lo que Shane abrió demasiado los ojos y sonrió.

-Esto no es el final niña traviesa -dijo y se fue por la ventana. Abrieron la puerta de una patada y yo me encontraba en shock. Por favor no otra vez.

-Alicia, ¿que sucede? -Pregunto Carl preocupado.

-Sha... Shane - Estaba temblando del miedo.

-¿Shane? ¿Qué mierda te hizo? -se veía preocupado.

-El... me... me... - No termine de hablar y Carl me cubrió con sus brazos en una forma de abrazo y comenzó a mecernos lentamente, era un gran y cálido abrazo que sin duda necesitaba. Minutos después se separo y limpio mis lagrimas que no había percatado.

-Dime, ¿Qué te hizo Shane? -su mirada era muy pacifica y llena de preocupación que lo hacia verse tierno.

-No logro hacerme nada, pero si no hubiera gritado hubiera hecho cosas que... no quiero ni imaginar. - Me miro con pena y me abrazo cortamente para después verlo rojo de la furia y salio del pequeño cuarto.
Lo único que se me ocurrió hacer es recostarme en la cama en posición fetal y llorar hasta quedarme dormida.

-
Desperté en la misma posición, deseando que todo fuera un sueño y poder despertar al medio de la noche por esta horrible pesadilla, poder irme al cuarto de mis padres y dormir entre ellos dos mientras me repiten que todo fue parte de mi imaginación, pero desgraciadamente no lo era, no lo fue, y nunca lo sera, y lo odio.
Recuerdo cuando decía que quería estudiar medicina o psicología porque me gustaba ayudar a la gente, y me sigue gustando, pero todas esas esperanzas de tener un trabajo y formar una familia se esfumaron al momento de que las bestias dominaran lo que antes se hacia llamar NUESTRO mundo.

-¡No quiero que lastimes a nadie mas! -escuche gritar a Carl afuera.

-¿De qué hablas? -dijo Shane como si fuera inocente. Me fui hacia la ventana para fijarme que sucedía y estaban ellos dos peleando mientras Carl tenia un pie en la maseta que, como había visto, en ese mismo lugar había enterrado un arma.

-Primero mi padre, después mi madre y ahora Alicia, ¿¡No puedes solamente dejarlos!?

-Alicia y yo tenemos una historia juntos así que no te entrometas si no quieres salir lastimado. -dijo Shane y se volteo para alejarse lentamente del lugar. Carl no lo dudo y desenterró la pistola y le apunto a Shane, ¿le dispararía por detrás?, lagrimas comenzaron a salir de sus ojos mientras quitaba lentamente el seguro.

Miraba horrorizada la escena, pero sinceramente el se merecía eso.

¿Enserio le iba a disparar?