Las apariencias engañan (Cameron Dallas y tú)

Capitulo 52: I'll take care of you

-¿yo? - dije mirándolo confundida, él sonrió inocentemente- Eres un pervertido Dallas-dije cruzándome de brazos- No pienso masturbarte- dije
-Cariño, aunque eso es decepcionante, no era lo que tenía en mente.- La vergüenza me invadió.
-Era lo que podría esperar de alguien como tú- dije de mala gana, él sonrió aún más, estiró su mano para acariciar mi mejilla mientras que estaba cómodamente sentado en el sillón.
-Me subestimas demasiado pequeña- dijo. Corrí mi cara, el apoyó el brazo en el respaldo del sillón- Lo que decía es que quiero conocerte más. - Levante una ceja mientras hacía una mueca, él volvió a hacer una carcajada. Su sonrisa era prácticamente perfecta, amaba sus labios.
-Después el pervertido soy yo- revoloteé los ojos- ¿Qué te parece si me cuentas un poco de ti?
-Mmmh... Me gusta leer, bailar y cocinar-dije sonriendo- Listo, ya me conoces- el bufó molesto.
-A ver... Tienes que cooperar, sino la próxima vez que me llames a las tantas de la mañana no te ayudaré - dijo tranquilo, pero con firmeza, suspiro volviendo a su tono suave y aterciopelado- Hagamos esto... Yo te pregunto y tú me contestas- Fruncí el ceño.
-Claro que no- dije
-Si hay algo que no quieres contestar, solo di "no quiero contestar eso" y listo- dijo levantando las cejas, asentí algo insegura.
-Bien a ver...- dijo mirando al techo pensativo- ¿te sientes atraída hacia mi? - dijo mirándome algo egocéntrico, reí.
-No quiero contestar a eso - dije sonriendo sin mostrar los dientes.
-¡Oye! Tampoco la uses en todas, la podrás usar 2 veces nada más. Pero bueno...igual eso significa que te sientes muy atraída hacia mí- dijo burlón, volvió a pensar para luego dirigirme una mirada. -¿Por qué te gusta leer? - dijo
-¿Esa es tu pregunta? Es demasiado tonta...- dije como si fuera obvio
-Solo limítate a responder- dijo indiferente, suspiré
- Me gusta porque...te vas a otro lugar- Cameron me miraba serio y atento, así que decidí proseguir.- A veces...¿no sientes como que quieres ir a otro lugar? ¿O huir? Bueno... Las novelas te dan esa sensación, ese escape; esa forma de olvidarte de todo y de tener otra vida, la vida del personaje.- dije. Él sonrió sin mostrar los dientes- Siguiente.
-¿Por qué William te trata tan mal?- dijo para luego mirarme expectante, inhalé una bocanada de aire.
-Supongo que porque me parezco a ni madre, no lo sé... Tal vez porque en el pasado no lo hice muy bien u me las está haciendo pagar- dije
Su mirada estaba completamente conectada con la mía. Eran escasos los centímetros que estaban entre nuestros cuerpos, ya que el sillón no era del todo largo, estaba sentada en forma de indio, mirándolo.
-¿Qué le hiciste a William? - dijo suave, me removí un poco antes de contestar a esa pregunta.
- Lo molesté, lo humillé, no fui muy buena hermana. - dije para luego quedar en silencio- hasta que tuve 'un mal de amores' y todo cambió -dije mientras un nudo en el estómago empezaba a aparecer.
-¿Cuál fue tu mal de amores? - dijo lentamente, miré para otro lado intentado conectarme con sus ojos cristalinos, sabía que debía pasar esta pregunta, pero realmente no quería, así que decidí abrirme.

[Narra Cameron]
Mi mirada se centró en ella, realmente me interesaba lo que ella decía. Hasta que se dispuso a hablar, pero esta vez sin mirarme.
-Me enamore de un chico 2 años mayor que yo- dijo mirando sus manos mientras jugaba con estas. - El me usó, le di todo lo que pude y más, me di lo que más apreciaba de mí, lo más importante. Algo que nadie podrá reclamar jamás, le di mi virginidad. Y después me humillo delante de todos mis compañeros- vi sus ojos cristalizarse- era una estúpida que quería pertenecer....
-Y por eso ahora te comportas como una nerd, para que nadie te haga daño- dije afirmando, ella me miró, sonriendo con pena, sentí mi cuerpo estremecerse, acerqué mi rostro al de ella lentamente. Capturando su labio inferior con suavidad, sentía la necesidad de protegerla, era el mismo sentimiento que había tenido el día que Susan la humillo en el instituto. Ella siguió mi beso con lentitud e intensidad. Deshizo el lazo que sus piernas formaban, pasé mi mano a sus muslos traseros, para acercarla a mí y subirla a mis piernas. Sin deshacer el beso, sentí una fría lágrima caer por su mejilla, me separe de ella mirándola a los ojos. Sequé la lágrima de su mejilla.
-Yo te protegeré, nadie te hará daño nunca más- dije acomodando un mechón de su cabello detrás de la oreja.- Y si no, se las tendrá que ver conmigo- sonrío acercándose a mis labios nuevamente.