Sus labios eran suaves, su lengua entró en mi cavidad bucal sin ningún problema o pudor. Jugaba con la mía como todo un experto, el dulzor de la bebida se hizo presente.
Ambos nos estábamos prácticamente comiendo, parecíamos hambrientos. Me sepraré lentamente con la respiración agitada.
-No.- Dije, pero sonó débil, él me miró para luego agarrarme de la mano.- Para.- Dije enserio mientras el pasaba el cubo de palomitas al otro asiento, pero con una dejadez de tranquilidad, que lo hacía mucho mas atractivo. Trague duro y me levanté, me hizo levantarme enfrente de él. - Siéntate.- dijo palpeando una mano con su regazo, negué con la cabeza intentando volver a mi asiento, pero tiró suavemente de mi mano haciendo que perdiera el equilibrio y caí prácticamente encima de él. Volvió a capturar mis labios, con un movimiento hizo que mis piernas quedaran a cada lado de su cintura, pasó su mano por mi espalda llegando a mi nuca haciendo presión para profundizar el beso. Mientras su otra mano descansaba un poco más abajo de mi falda del instituto. Esto estaba mal, pero lo estaba disfrutando, sentir los labios de Cameron con los míos era una explosión en mis hormonas, bajó la mano por mi espalda, pasándola por mi muslo y por debajo de la falda, tocó mi trasero. Enredé mis dedos en su suave pelo castaño, nuestros rostros se movían de un lado hacia otro, tranquilos. Pero profundos. Mordió mi labio inferior para tirar un poco de el, se quedó a solo centímetros, mirándome en la oscuridad del cine. Sentí su mano que antes descansaba en mi muslo, moverse hacia dentro lentamente, acariciando mi parte interna del muslo, rápidamente agarré su muñeca parando su accionar. Sabía lo que iba a hacer. El sonrió. Acercándose lentamente a mis labios.- Dejate llevar.- dijo en susurro arriba de mis labios, para luego besarlos otra vez, relajé el agarre de su muñeca pasándola por su pecho y dejándola en su hombro, él decidió proceder a su accionar, pasó su dedo indice por mi feminidad lentamente, haciendo que todas mis hormonas se activaran, estaba por protestar pero aumentó la velocidad del beso haciendo que todas mis ideas desaparezcan, comenzó a mover sus dedos lentamente en forma de caricia en esa zona, haciendo que me volviera loca, un pequeño y casi inaudible gemido salió de mis labios, el hizo presión con un dedo. Subió lentamente la mano llegando al borde de la falda.- ¿Puedo?- dijo suavemente, estaba embriagada por sus caricias, sus labios, y su perfecto aroma varonil. Volví a besarlo, al parecer lo tomó como un sí, ya que metió su mano por debajo de mi ropa, sentí sus dedos moverse arriba de mi ropa interior, que ahora se encontraba húmeda.
-Por favor no.- dije en un débil suspiro separándome de sus labios, él pasó sus besos a mi cuello, mientras movía ágilmente sus dedos. Tiré mi cabeza para atrás, en un pedido de auxilio a mi cordura, pasé mis dedos por su cuello volviendo a enredar mis dedos en su pelo. Con un dedo corrió mi ropa interior hacia un lado, e introdujo otro de ellos. Maldita sea...mi respiración se cortó por completo, escuché una pequeña risa proveniente de él. - Eres un maldito.- dije en susurro.
-Me lo agradecerás.- dijo para luego besar mi mandíbula, metió un segundo dedo, cerré mis ojos. El placer me estaba invadiendo, no podía pararlo. Mi cuerpo no quería reaccionar a lo que decía mi cerebro.
- Estamos en un ci...-mis palabras fueron interrumpidas cuando introdujo un tercer dedo, y comenzó a moverlos con agilidad y experiencia, sentía que mi cabeza daba mil vueltas. Él mordió el lóbulo de mi oreja, no podía creer que esto estuviera ocurriendo en una sala de cine, la película para mi había dejado de existir. Cameron aumentó la velocidad de sus dedos, me aferré a su cuerpo. No podía controlar mi respiración, sentí que todo desaparecía, menos el y yo. Todo se volvía negro, la sangré corrió por mis venas como fuego, cerré mis manos en un puño, mi cuerpo tembló levemente y antes de que un grito saliera de mi boca Cameron me calló con un beso lento, escondí mi cara en el cuello de Cameron, no pude creer que me hubiera echo llegar al orgasmo con solo tres dedos. - Te odio.- dije apenas pude retomar el aliento, el rió y sacando los dedos para luego con la otra mano agarrar mi mentón y darme un simple beso en los labios. Las luces del cine se prendieron anunciando que la película había acabado hace varios minutos. La pantalla se apagó. Lo miré, él me miraba con una sonrisa arrogante.
-¿Lo disfrutaste cariño?- dijo suave y tranquilo, me levanté con ira. Sentí mis mejillas arder de la verguenza. Sentí mis piernas como si fueran gelatina gracias a su 'maravillosa acción', se levantó atrás mio como si nada hubiese pasado. Caminé echa una furia saliendo de la sala, él me seguía con esa sonrisa de arrogante, era un gilipollas. Me había dejado manipular.
![](https://img.wattpad.com/cover/18390554-288-k472359.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Las apariencias engañan (Cameron Dallas y tú)
FanficEs la primera fanfic que subo así que... ¡Disfrutad!