Las apariencias engañan (Cameron Dallas y tú)

Capitulo 21: "Movie"

[Narra Cameron]
-¿Cómo te enteraste de que William no estaba? - dijo ya mientras caminábamos por las frías calles. Ella decidió que no quería ir en moto, así que si quería traerla conmigo, la única forma era aceptar su petición e ir andando.
-Cariño, es mi mejor amigo. Me cuenta casi todo y me dijo que esta noche iba a salir con Megan. -Dije mientras metía mis manos en los bolsillos de mis vaqueros. El aire movía su pelo y una ráfaga de aire me inundó las fosas de su dulce aroma a melocotón dulzón y flores. Me hipnotizo por completo. Llevaba el pelo largo y húmedo por la ducha que había tomado antes de salir. Llevaba un sweater gris y un vaquero ancho. Iba vestida cómodamente.
-No creo que le guste la idea de ir salgas con su hermana mayor...- dijo de mala gana. Sonreí.
-Vueles a pensar que me estoy insinuando.-Dijo irritada, me hacia gracia la facilidad con la que se le podía hacer enfadar.
-Bueno, vamos a ver...- frene en seco delante de ella mirándola. Ella camino un poco mas y se dio la vuelta levantando una ceja. -No podemos seguir tratándonos así, por lo menos no mientras estemos caminando juntos. Vine a por ti para demostrarte que no soy el gilipollas que crees que soy. Pero se me hace difícil si no me ayudas y pones de tu parte. -dije ya de mala gana, ella movió su mandíbula en signo de fastidio mientras miraba hacia arriba para otro lado.
- Nunca dije que iba a cooperar con nada, casi vine obligada.- dijo cruzándose de brazos, suspire. Ya estaba bastante irritado, pero si quería por lo menos establecer una conversación estable con ella, necesitaba calmarme, me acerque a ella esquivando una persona que venía de frente.
- ¿Que te parece si vamos a ver una película? -Dije ya a solo unos centímetros de ella. Quería tocarle la mejilla, pero estaba seguro de que no le gustaría. Así que opte por permanecer en mi sitio. Ella seguía luchando contra sí misma sin saber que contestar.
-Solo si elijo yo la película. -dijo todavía seria, sonreí de lado.
-Cariño elige lo que quieras, hoy seré todo you. -dije divertido. Ella movió los ojos en circulo.
-Y deja de decirme cariño. Me irritas. -dijo levantando una ceja, acepte ya que no me quedaba otra que elegir.
-Vamos gruñona. -dije mientras comenzábamos a caminar, si mi memoria no me fallaba, a pocas cuadras debía de haber un cine, caminamos hablando de vez en cuando de cosas sin sentido. Ella todavía seguía cortada y tímida... Y sobretodo muy fría. Maldita sea...Esto seria mas difícil de lo que pensé.
-Quiero esta.- dijo señalando una de las carteleras del cine, donde se veía una mujer riendo con un arma atrás de un hombre que estaba contra la pared y las manos levantadas.
-Bien...- dije irónico al ver la cartelera. Gracias a dios era comedia. Saque las entradas y fuimos hacia la sala. Obviamente son olvidar las palomitas que tanto amaba, las palomitas dulces. Como sabia que la película no me iba a gustar me puse a comer las palomitas tan queridas por mi estomago.
La película comenzó, no preste ni la mínima atención en la película ya que su risa me deleitaba, era completamente perfecta y contagiosa. Ella parecía completamente sumergida en la película. Un disparo sonó y ella volvió a reír junto a algunas risas mas de la sala. Sonreí al ver como ella se reía, era la primera vez que la veía reír tanto.
[Narra ___(TN)]
-Al parecer te gusto....-Dijo Cameron mientras caminábamos de vuelta para mi casa, la película me había dado un muy buen humor. Aunque saber que tenía que tener a conversación con Cameron me ponía mas que nerviosa.
-¡Me encantó! Nunca me reí tanto viendo una película. -dije divertida. El sonrió ampliamente.
-¿Punto a mi favor? - dijo mirándome sin sacar la sonrisa, negué con la cabeza.
-¡Elegi yo la película! -dije en forma de queja.
-Si...pero yo invite.
-Si pero yo ni siquiera la miraste...
-Lo lamento... Había una persona al lado mío que no dejaba ver la película gracias a sus risas y carcajadas. -Sentí como mis mejillas se tornaron rosadas. Había reído muy fuerte... Y ni me había dado cuenta de que el me había estado mirando. Una risa salió de sus adentros.
-Cariño, no te sonrojes. Tu sonrisa es perfecta. -dije en la puerta de mi casa.
-que no me digas cariño...-dije mirándolo.
- Y yo te dije que cooperes...-sonreí negando con la cabeza, camine hasta la puerta para abrir. Pero su brazo me lo impidió. Me di media vuelta para mirarlo.
-¿Acaso no te vas a despedir? Todavía no te demostré nada, pero prometo hacerlo. -dijo sonriendo y dejando ver unos perfectos dientes blancos. Se acercó a mi mejilla para dejar un beso. Su perfume invadió todos mis sentidos. Se separó de mi para dirigirse a la moto que estaba aparcada enfrente de mi puerta y cuando se subió me guiño el ojo y arranco a toda velocidad.