15. La Vuelta

559 39 4
                                    

Al dia siguiente despertamos por causa de la luz brillante que atravesaba la ventana. Un olor a croissants caliente llegaba a nuestra habitacion, por lo que decidi seguirlo.

-Buenos dias Angela- Dije con tono agradable.

-Buenos dias, ¿Que tal anoche?- Pregunto ella curiosa sirviendome una taza de cafe y acercandome el plato de croissants.

-Super bein, Calum es muy cariñoso y realmente no se que mas podria pedir, el lo ha hecho todo y mas por mi, y no se si me comporto a su altura- Respondi algo decepcionada.

-No digas eso se nota a simple vista que te quiere, haceis una buena pareja y creo que le das felicidad y cariño, eso es lo que basta.- Comento Angela haciendo que mi cara esbozara una sonrisa.

-Bueno igual si, a esta edad nunca le di importancia a este tipo de cosas, me centraba en mis estudios y mis amigas, pero conocerlo a el me ha cambiado sin duda la vida por completo.

Probe los croissants y realmente estaban buenisimos y para que mentir, me habia despertado con un hambre.

-Mmmm... esta buenisimo.- Respondi a Angela, cuando Calum entro en la sala.

-¿Quien yo? Bueno igual eso ya lo sabia.- Contesto el abrazando mi cintura y dandome los buenos dias con un beso que siempre se agradece.

-Egocentrico- Susurro Angela.

-¿Disculpa?-

-Bueno creo que tengo que ir a comprar cosas que falta, luego nos vemos.- Se despidio y se fue.

No me quedaba otra opcion que reirme, realmente la escena era graciosisima, Calum cruzado de brazos fulminando a su prima con la mirada, yo sentado comiendo como si no hubiera mañana, y Angela intentado salir de casa lo antes posible.

-Buenos dias preciosa ¿Como has dormido?-

-Bien teniendo en cuenta que no parabas de moverte- Respondi con gesto enfado a lo que este se rio.

Subí a nuestro cuarto y me cambie, me puse unos shorts vaqueros de talle alto con una camiseta  blanca y negra remetida por el pantalon con unas converses blancas, cuando baje Calum estaba listo en la puerta hoy iriamos a dar una vuelta. Al final la vuelta se hizo un poco larga, visitamos el museo del Louvre, el arco del triunfo, la catedral de Notre Dame... pero lo mejor fue la parte de las compras. Paseamos por todas las tiendas de la avenida de los campos Eliseos, no falto ni una tienda en la que entrar.

-Calum, creo que necesito otro armario jajaja- 

-Jajaja, las mujeres y la ropa- Replico el.

La tarde fue tranquila de vez en cuando se iban acercando fans y pedian fotos y autografos, el problema era que Calum y el frances no se llevan muy bien, yo actuaba de traductora, pero no me importaba todas eran super amables.

Llegamos a casa e hicimos algo de cena.

-Calum, te quiero- Dije sin pensarlo un segundo. El me miro un sonriendo respondio.

-Yo tambien-

Cuando pasaron 2 semanas Calum y yo nos encontrabamos en el aeropuerto de Paris, deseando volver sin habernos ido todavia.


MI IDOLO, MI NIÑERODonde viven las historias. Descúbrelo ahora