Secrets Trilogy: CURSE (#2)

Capítulo 16

-Esperó y ya estés lista ya llevas más de dos horas ahí  metida -escuché como hablaba el monje desde el otro lado de la puerta. Ciertamente ya había terminado de cambiarme pero me había quedado recostada en la cama aún intentando recordar algo pero lo único que había logrado era tener un fuerte dolor de cabeza. Abrí la puerta encontrándome con el rostro enojado del monje, le dí un leve vistazo y salí del cuarto, sin ver si me seguía.

Salí de la casa sin importarme de comer antes, esperando a que el monje saliera, vi a mi alrededor recordando a aquella extraña chica que me había encontrado en el bosque. Vi de reojo como el monje llegaba a mi lado, iba a comenzar a caminar pero el monje me tomó de la mano deteniéndome, volteé a verlo pero solo negó con la cabeza.

Se acercó más a mi y puso su mano en mi frente, aún sosteniéndome con la otra, al sentir su tacto frío en mi frente inmediatamente me puse un poco tensa esperando cuál sería su reacción pero lo único que izó fue cerrar los ojos y pronunciar unas extrañas palabras. Comencé a sentir como mis piernas temblaban intentando sostenerme, cada vez la vista se me hacía más borrosa. Sabía que todo lo que me estaba pasando era por culpa del monje traté de zafarme pero su agarré se intensificó impidiéndole, no entendía cuál era la angustia que sentía en ese momento pero necesitaba soltarme, después de unos segundos de forcejear decidí transformarme totalmente en demonio, cuando al fin lo logré en monje me soltó haciendo que esa angustia que sentía desapareciera lo miré unos segundos y pude ver perfectamente como una sonrisa se formaba en su rostro, haciendo que me percatara que las alas que antes tenía desaparecieran.

-Harás lo que te pida -escuché como hablaba, sintiendo como escalofrío recorría mi cuerpo pero sin saber porque asentí a lo que decía -entonces vayámonos -comenzó a caminar y sin dudar lo seguí, queriendo quedarme y que me explicará que es lo que había sucedido, pero mi necesidad de hacer todo lo que él me pedía era más grande que mi curiosidad y sin más caminé detrás de él.

Caminos un buen rato en silencio asta que llegamos a un pequeño prado, voltee hacia el monje esperando cual iba hacer su reacción pero el solo se limito a hacerme una seña indicándome que me quedara ahí, asentí en respuesta y vi como se marchaba y desaparecía por un barranco un poco curiosa quise acercarme a ver hacia donde iba eso pero el monje me dijo que me quedara aquí así que eso hice.

No había pasado ni un minuto cuando vi como el monje era lanzado fuera de aquel barranco inmediatamente corrí hacia el para ver como se encontraba, pero el me ignoro totalmente y se levanto dirigiéndose hacia allá de nuevo pero antes de llegar otras tres personas mas salieron del barranco, por lo que podía ver en sus ojos estaban totalmente furiosos tanto que ninguno se había percatado de mi presencia.

Los mire un poco sorprendida ya que ahí estaba la chica que me había encontrado el día anterior, los mire expectantes, esperando cual seria la reacción del monje, pero estos solo se retaban con la mirada.

-Quiero presentares a alguien  - se dio vuelta y meten dio la mano, automáticamente me acerque a el mientras el posaba su mano en mis hombros, lo mire un momento esperando que me dijera que hacer pero el volvió su mirada a aquel trió que estaba en frente, imitándolo los mire pero el rostro de ellos había cambiado totalmente, ahora su mirada estaba puesta en mi, solo que no me miraban con odio como lo hacían con el monje sino mas bien con sorpresa e incluso podría decir con nostalgia a la vez.

-Selene.... - susurro el único chico que se encontraba enfrente, fruncí el seño al escuchar ese nombre de nuevo, mire al monje buscando respuesta pero este solo negaba con la cabeza mientras sonreía.

-¿Quien es ella? -susurre hacia el monje pero el solo se adelanto unos pasos ignorándome totalmente.

-¿Por que siguen insistiendo con esa chica? entiendan, ella ya murió -siseo con una sonrisa en sus labios.