Los besos del mañana...

Destino o casualidad.

Jonathan estaba entre la multitud no podía ver nada, gritaba el nombre de Jackson y Emily pero por la música le era imposible que se escuchará su voz, él iba caminando despacio tanteando a las personas para no caerse, en un descuidar ya se había tropezado con un chico, el chico que estaba encima de él le comenzó a correr la espuma de la cara.

_ Ya te me empiezas a ser conocido, a ver si dejas de tirarte arriba mio. Dijo Marcos con una enorme sonrisa en su rostro.

_Dejame en paz, ahora soy yo él que esta de mal humor. Dijo Jonathan enojado.

_ Ya todos sabemos que eres gay, porque no me lo confirmas a mi.

_ Levantate, hasta hace unos días me odiabas y ahora queres estar encima mio, que demonios te ocurre. La voz de Jonathan sonaba furiosa.

_ Nunca en mi vida vi una mirada tan pura. Dijo Marcos.

_Si es una broma de fin de año, no quiero participar, ahora por favor levantate. Le volvió a insistir jonathan.

_ Contestame algo jonathan, ¿por qué sonabas nervioso hoy? Cuando me acerqué a hablarte.

_Queres saber el ¿por qué?, bueno fue porque queria caerte bien para poder entrar en tu estúpido grupo.

Jackson empujó a marcos y agarró de la mano a jonathan y se lo llevó para adentro dónde la espuma no había llegado. Algo extraño estaba ocurriendo en la cabeza de jona, el no podía creer que él chico más bonito y popular de la escuela le había hablado e incluso lo tuvo frente a frente y pudo sentir su respiración sobre sus labios.

_Euu ¿en qué estás pensando? Le pregunto Jackson.

_ Perdón, es que me duele la cabeza.

_Escuche algo que dijeron los populares y te estaba buscando a vos jona y a Emily, pero sólo te encontré a ti, lo cuál me parece raro, en fin.

_ Lo que tengas que decir ya no me importa, quiero irme a mi casa, estoy un poco cansado. Dijo Jonathan sin ánimo alguno.

_ Bueno antes que te vayas ayuda ha buscar a Emily, hace rato que no la veo.

La fiesta estaba terminando y ya todos se estaban yéndose , la casa era un caos, y Emily se veía fatal, no sólo había tomado, sino que mezcló todas las bebidas que encontró en su camino. Los chicos la ayudaron a subir a su pieza y se quedaron limpiando, hicieron todo lo posible para que esa casa brillará como nunca. Jonathan seguía pensando en todo lo que había vivido esa noche, esperaba encontrar razones lógicas, pero nada era lógico y todo parecía inventado. Cuando terminaron de acomodar, que fue toda la noche, fueron junto a Emily y reposaron sus cabezas sobre ella, entrando en un coma profundo, ya que no daban más del sueño.

Al día siguiente se habían encontrado en todas las redes sociales que la fiesta había sido grandiosa y que esperaban otra, sus nombres eran primicias en las redes, ninguno festejo ya que sus cabezas se encontraban en mundos paralelos, el único que dio una salto de alegría fue Jackson y comenzó a vomitar sobre todo lo que tenia a su alrededor.

_ Otra vez yo no limpio. Dijo jonathan.

_Creo que te toca a vos limpiar ahora Emily. Dijo Jackson.

_ ¿Esa es la pizza de mi heladera?. Preguntó Emily.

_ Si estaba rica. Respondió Jackson.

_ Gracias por convidar. Dijo Emily con cara seria.

_ Ustedes dos son un asco . Les dijo jonathan.