Iba de camino a mi casa, estaba enfadada. Llegué y abrí la puerta con la mejor sonrisa que pude poner porque no quería que mi madre se preocupase.
-Buenos días, ¿qué haces aquí tan temprano?- me preguntó
-Mamá son las 12 y media.
-Ay bueno es verdad.
Después de esto siguió diciéndome cosas pero no la estaba escuchando. ¿Por qué había ido a mi casa? Necesitaba estar sola pero... No me podía ir, si acababa de llegar. Mi madre se estaba dando cuenta de que no la escuchaba y empecé a hacerlo para que no se enfadara.
-Ha llamado la madre de Lucas- me dijo.
-Que bien- la contesté en tono borde. Mi madre y la de Lucas se conocían pero no sabía que también hablaran por teléfono.
-Ha dicho que si te puedes acercar a su casa y hacerle un poco de compañía a Lucas. Este fin de semana está solo en casa y quiere mandar a una persona de confianza para comprobar que está bien. Ve y quédate un rato con él anda-me explicó.
Era la ocasión perfecta para irme de mi casa.
-Muy bien. A la hora de comer estoy aquí.
Salí de mi casa en dirección al centro comercial, quería distraerme un poco y...¿Qué hay mejor que la ropa?
Me metí en todas las tiendas, pero aún quedaba una hora para volver a casa y estaba claro que no iba a ir con Lucas. Llamé a Maddie:-Dime-me dijo con una voz grave.
-¿Te acabas de levantar?-pregunté.
-Nooo estoy haciendo ejercicio-dijo en tono sarcástico-¿Cuándo me has visto madrugar a mi?
-Vale vale. ¿Qué haces? Tengo muchas cosas que decirte y tú a mi. ¿Te vienes al centro comercial?
-Como ya sabes, no me he levantado de la cama y mi madre se está empezando a enfadar. Creo que está hablando con tu madre por teléfono. Espera que viene. Voy a hacerme la dormida ahora hablamos, chao-y colgó el teléfono.
A los 5 minutos tenía un mensaje de Maddie:
-Esta tarde mi madre va a tomar café en tu casa me lo cuentas allí vale?
-Vale pero que sepas que tú también tienes que contarme.
-Vale vale jajajaj
Volvía a mi casa cuando me choqué con Calum.
-Hola-me dijo.
-Hola-le contesté en tono seco.
Preferí irme por otro camino.
Cuando por fin llegué, estaba mi madre con un plato de macarrones en la mano.-Ya iba a empezar a comer. Por cierto, esta tarde tenemos visita asi que, recoge tu habitación.
Comimos y me puse a recoger mi habitación. No la recordaba tan desordenada y justo cuando me iba a sentar por que había terminado por fin, sonó el timbre.
-Buenas-dijo la madre de Maddie.
Rápidamente cogí a mi amiga y me la llevé a mi habitación.
-Espera espera-soltó mi madre de repente-queremos deciros una cosa.
Las miramos asustadas pero ellas no tenían pinta de enfadadas, menos mal.
-Id haciendo las maletas que en dos días tenemos reservada una habitación de hotel en Cádiz.
No me lo podía creer. Mi mejor amiga y yo juntas de vacaciones, aquí empezaría lo bueno.