Vacaciones Familiares

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*Marianne*

Hola soy Marianne tengo 14 años vivo con mis padres en la Ciudad de México mi vida es linda y lujosa en muchos sentidos ya que mi padre es un gran empresario y mi madre una medico prestigiosa mi meta al crecer es ser tal como ellos este verano papá se ha tomado unas vacaciones para ir a la playa en Veracruz estoy entusiasmada he empacado toda la ropa que necesito y esta tarde mamá me llevara a comprar un traje de baño, llevare mi diario y mi camara para documentar todo lo que pase, mi papá llegara a las 3, ha sonado el telefono se trata de mi mejor amiga Juliana le he contado todo lo que hare en mis vacaciones.

Pronto llego la hora de ir a comprar el traje de baño, visitamos algunas tiendas y mire muchos pero al final me he decidido por un traje azul con flores blancas que es de una sola pieza por que aun no tengo un cuerpo como el de mi madre, pero no me importa, no me interesa que los chicos me miren, regresamos a casa donde ya papá nos esperaba lo salude eforica como siempre dandole un abrazo y un beso en la mejilla me despedí de mi niñera Lulu para salir rumbo al aeropuerto, al subir al avion comencé a escuchar musica y de imediato quede dormida en el brazo izquierdo de mi papá y mi madre en el derecho, al llegar papá me cargo en su espalda mientras tomabamos un taxi para llegar al hotel al llegar a dicho lugar lo que vi me hizo bajar de la espalda de mi padre rápidamente  era mi querido amigo Cristian era el hijo mayor de un empleado de mi papi, corri a abrazarlo el era un chico alto castaño de ojos oscuros y piel blanca le parecia bastante atractivo a mi mejor amiga Juliana pero para mi era solo un amigo bueno eso creia yo, me gustaba estar con el comiamos juntos desde pequeños y siempre jugábamos.

Después de saludar a los padres de Cristian mis padres y yo nos fuimos a nuestra habitación era enorme y muy hermosa ya que mi papí era un cliente regular en aquel hotel, pronto al cambiarme de ropa y mirarme al espejo junto a mamá Cristian llego a tocar la puerta pidiendole a mi padre que si podia ir a la playa con el, apesar de que Cris le caia bien a mi papá pero solo cuando estaba lejos de mi, sin embargo, mi mamá siempre lograba persuadirlo.

-Señor Andru ¿puede ir Izumy a nadar?-

Mi padre solo hizo una mueca mirandome y luego mirando molesto a Cristian, cuando mi mami se le acerco al oido y le susurro algo abrazandolo de antebrazo, a lo cual solo mi papá la miro de los pies a la cabeza y le sonrío dando el permiso para que me fuera.

Al irme corrimos por la playa y tropesamos callendo yo sobre el comenzando a reir carcajadas, al mirarlo a los ojos a Cristian me senti sonrojada y apenada solo pude levantarme y mirar a otra parte.

-Mmmm... este que tal si si vamos a nadar por por alla-

-Jajaja claro esta bien vaya-

Al dar el atardecer y ver a mis padres para ir a cenar aun no se me quitaba esa sensación de aceleramiento drástico en el pulso y ese rubor de mis mejillas aun no se iba, la primera en notarlo fue mamá y mientras mi papá se rasuraba en el baño ella aun en toalla ambas me cepillaba el cabello me dijo.

-Veo que Cristian te ha alterado de cierta manera especial-

-¿Especial? es que no se... no quiero que papá sepa-

- Lo entiendo mi nena dime no le dire nada a papá lo prometo-

-Esta tarde pase todo el día con el y pues he sentido el pulso acelerado me siento apenada al estar con el y me siento incomoda si alguien mas esta con nosotros por alguna razón no puedo dejar de verlo y no me saco de la cabeza su voz-

-Esta bien mi niña sera nuestro secreto no se lo diremos a nadie-

Después de que mi papá y nosotras estuvimos listas nos fuimos al restaurante del hotel este era algo lujoso lindo en el fondo había un mural de colores echo con pintura era de un bosque era bello y lindo, los platos de porcelana con un bello adornado de color oro la comida se veía deliciosa comi hasta no poder mas y después de la cena caminamos hacia la playa a plena noche me quite los zapatos y recogiendo mi vestido para mojarlos un poco con el olaje mientras mis papás  caminaban tomados de sus manos, despues me llamaron para sentarme a un lado de ellos a mirar las estrellas mientras platicamos, pronto mis parpados me comenzaron a pesar y me recoste en el regazo de mi padre comenzando a conciliar el sueño mientras mi mamá acariciaba mi cabeza, pronto quede profundamente dormida escuchando el hermoso oleaje y los sonidos naturales del mar.  

El otro lado del espejoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora