Un hermano malicioso

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*Susan*

He venido a quedarme con Arthur puesto que el desconsuelo y la tristesa no me deja me siento horriblemente mal y la imagen de Andru con Rebeca sigue constante en mi mente no me deja dormir, Arthur no me deja sola y se lo agradesco, también le he confesado que estoy embarazada, al parecer le dio alegria a noticia, se ha ido a trabajar en algo extra en las mañana en las tardes regresa y cosina trayéndome flores, me esta encantado estar con el pero dentro de mi cabeza no puedo dejar de pensar en mi querido Andru, debe estar ahora preocupado por mi, o de seguro simplemente esta tan ocupado en la oficina que no se ha dado cuenta que me ido de casa, es lo mas probable, me abruma la tristeza, y aun peor es estar en la casa en la que pase tantos percanses y tristezas, me quedaba sola llenándome de recuerdos felices, constantemente me recostaba en la cama recordando como Arthur y yo hacíamos el amor. Un día de esos en los que me recoste y cerré los ojos recordando las caricias cuando de pronto comencé a sentirlas literalmente, sentí las manos de Arthur, me sonroje al instante y creí que todo era parte de mi imaginación pero al abrir los ojos y verlo encima de mi cuerpo besandolo y acariciandolo sus dedos estaban fríos, sus ojos llenos de luz y sus labios se veían tan provocativos y ese aroma que tenia era a colonia masculina que hacia que me estremesiera y callera rendida,sin embargo, estaba nerviosa Arthur lo noto de inmediato y me dijo que seria cuidadoso para no lastimar a mi bebé me quede sin habla y solo pude cerrar los ojos ante las caricias y los deslices delicados de sus yemas frías sobre mi piel, sentí que las prendas se deslizaban por mi espalda y los labios frivoles rosaban con la piel tibia de mi espalda dado pequeños besos que me estremesían ciegamente, sentía que me apretaba las piernas dibujando lineas imaginarias en estas, me estaba enamorando al hacer esto, me llegaron a a la cabeza miles de formas en las que podía reacer mi vida con Arthur, despues de todo el era el hombre al quien siempre ame mas que a mi propia vida ya no era necesario que el me embarazara, pero dentro de todo esto siempre hay que pensar con la cabeza, Andru era un hombre de dinero y si en verdad queria a mi bebé tarde o temprano vendria a buscarlo y entonces que le dire a mi hijo que preferí a Arthur solo por un mal entendido con su padre ¿Mi bebé me perdonaría algún día por ocultarle que es hijo de otro hombre y no de Arthur?, entre mis preguntas continuaba sintiendo las bellas caricias de Arthur cuando entre ellas un golpe fuerte y estruendoso logro sacarme de mis pensamientos, deje de sentir las caricias de Arthur, vi que se levanto de la cama pidiendome que me quedara quieta que enseguida volvia.

Al abrir la puerta escuche claramente la voz de Andru, se escuchaba desesperado y parecía desvelado, le suplicaba a Arthur que lo ayudase a encontrarme me puse una bata aun estando semi desnuda y me pare en el marco de la puerta a espaldas de Andru, cuando Arthur lo vio tan desesperado suspiro y le dijo que le ayudaria, Andru agradesio casi de rodillas y despues de que Arthur lo regaño lo hizo voltear a sus espaldas donde me encontraba parada recargada en el marco, con la bata puesta enseñando mi pierna hasta el muslo en cuanto este me vio me acerque a el y acaricie su rostro me abrazo y comenzó a llorar desconsoladamente en mi pecho pidiendome disculpas yo solo pude abrazarlo y decirle que todo estaba bien después de un par de horas llorando y quedarse dormido entre mis piernas recostado en mi vientre suspirando de tranquilidad, al estar asi con el Arthur quedaba en la ventana del cuarto mirando al cielo cuando yo interrumpí el silencio diciendole "¿Por que?" cuando el me escucho me sonrio me beso con cuidado de no despertar a Andru y me dijo al oido "no importa que te desposes con el tu siempre seras mía como yo tuyo" al decir esto no entendí a lo que se refería y creo que jamas lo entendere solo se que cuando escuche esto me puse en la posición de amante, recoste a Andru en la cama dejandolo con mi bata ensima y en ropa interior me sente en el escritorio que tenia en el cuarto comenzandolo a besar con un poco de temor a que Andru se despertase, despues de eso le agradeci y lo abrace me quede unos minutos ahí con el, despues de eso pasaron las horas me vestí y comencé a cosinar para mis dos hombres mientras ambos dormían, uno en el sofá y el otro en la cama, al tener la comida lista y servida, los desperte a ambos con un dulce beso, al cual ambos se despertaron con gusto y alegria comenzando a comer y arreglando negocios entre ambos, decidiendo que los dos vivirian conmigo sin pasarse de su propio papel Arthur de hermano y Andru de esposo, se desidio vivir en casa de Andru donde habia mejores comodidades para mi me desconserto un poco la noticia pero me lleno de alegria como nunca me había sentido




El otro lado del espejoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora