RUTINA

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Odio el amanecer impertinente que asoma por el cuadrado exacto de la ventana.

Odio la tediosa obligación del despertar, que me arranca del tibio tacto de las sábanas.

Odio las horas venideras, que no me cuesta imaginar, antes de salir de casa.

Odio el bullicio de los clientes, el miedo de los secadores, las conversaciones triviales sobre los mismos temas recurrentes.

Odio los lapsos sin clientes, el silencio hostil de las sillas vacías y el aspecto decadente de los espejos ante la ausencia de caras nuevas.

Odio los minutos últimos de la jornada, que siempre se demora implacablemente.

Odio el itinerario de regreso, tan idéntico, y el número inequívoco de pasos que calculo de memoria.

Pero lo que más odio de todo, lo que más más más, es tener que odiar cada día las mismas cosas.

Bueno mis queridos lectores y lectoras... deseo fervientemente que os sea de vuestro agrado.... ¿quien no ha odiado algo de esta odiosa lista? ;-)

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Cretinos, monstruos y fantasmas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora