Capítulo 21

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CAMILA

**

— Así que, ¿cuáles son los planes para tu cumpleaños? — Preguntó Dinah, acostándose en mi cama—. ¿Fiesta, cena con tus padres, sexo con Lauren?

— ¡Dinah!

— No me digas que no esperas que te dé un buen birthday sex.

— Supongo que es lo que se acostumbra, ¿no? Pero Lauren no es normal, seguramente se le ocurrirá que vayamos a mirar pavos al supermercado porque sabe que me da escalofríos verlos, o tal vez me lleve a algún sitio como a patinar sobre hielo así se puede reír de mi toda la noche... La verdad es que no sé qué tiene planeado, si es que tiene algo.

— Haces como si olvidaras lo detallista que es Lauren y lo que hizo el año pasado. Dios, Mila, si alguien me enviara una carta cada hora hasta completar dieciséis y describiese las razones por las que agradece que yo esté cumpliendo un año más, me caso con esa persona sin pensarlo.

Irónicamente, Lauren y yo ya vamos a casarnos, pensé.

— Me tuvo durante dieciséis horas abriendo y cerrando la puerta porque apenas había pasado una hora, ya estaba llegando otra carta.

— Fue romántico— comentó con voz risueña.

— Y eso que no las leíste— repuse, sonriendo al recordar lo que me había puesto en cada una de las cartas.

Probablemente pensarían que habían sido románticas y cursis, pero en realidad decían cosas como "agradezco que cumplas un año más de vida porque no tenía ganas de ir a un funeral esta semana". Todos esos mensajes me hacían reír porque esa era la manera de Lauren de mostrarme lo mucho que yo significaba para ella, y le agradecía que dentro de nuestra no-tan-normal relación, ella le agregara algo más parecido a nosotras.

*

— Es hora de levantarse, cumpleañera— susurró Lauren en mi oído, dejando besos cerca de este y bajando hasta mi mejilla y luego hacia mis párpados.

— Cinco minutos más— balbuceé, tratando de voltearme para volver a dormir, pero ella estaba encima de mí.

— No me obligues a...— me amenazó, pero la interrumpí moviendo la mano y volviendo a dormir. Sentí como se movió encima de mí y comenzó a hacerme cosquillas mientras yo trataba de detenerla, riendo y despertándome al instante—. Feliz cumpleaños, Camz— me dijo, cuando finalmente detuvo la tortura.

— Gracias— respondí sonriendo.

¿Y cómo no hacerlo si despertaba en mi cumpleaños con Lauren Jauregui sentada encima de mí, mirándome con tanto amor que parecía no tener fin?

— Levántate, tenemos un largo día por delante. — Besó mi frente y se bajó de la cama, para luego ofrecerme su mano, ayudándome a levantarme.

Caminó por toda la habitación en busca de algo, hasta que encontró un globo de helio con forma de banana que tenía escrito Happy Birthday, el cual recibí sonriendo y murmuré un 'gracias' antes de dejar un beso sonoro en su mejilla y desaparecer dentro del baño.

Cepillaba mis dientes, mientras veía mi reflejo en el espejo. Hoy cumplía diecisiete años y si bien no había cambiado mucho de la noche a la mañana, si podía notar que mis facciones estaban más definidas y maduras que hace algunos años, pero ese no era mi mayor cambio. Miraba mis ojos y notaba un brillo especial en ellos, no tenía ningún rastro de cansancio ni de ojeras. El mayor cambio era que, en ese momento, estaba feliz con mi vida, con lo que tenía, con las personas con las que la compartía. Me sonreí a mí misma, viendo a aquella chica que alguna vez fue tímida, esa chica que no levantaba la mano en clase por miedo a hablar, esa chica que se había convertido en una adolescente segura de sí misma y capaz de expresar sus ideas sin miedo a ser juzgada.

gone; camrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora