Cuentos al estilo Ladybug.

Marinette se queda en el mundo de las maravillas.

Interrumpimos esta historia para un breve anincio: Si ven errores ortográficos me avisan por favor :)
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Cheshire tomo a Marinette y salió corriendo del lugar lo mas lejos qué pudo para alejarse de la reina, en ese instante escucharon un muy fuerte "¡Perderás la cabeza!" Lo que altero a Marinette y la preocupó, pues estaba segura que era por Cheshire .
-Cheshire...- cuando dijo su nombre el la sostuvo con más fuerza.
-¡No dejare que te lastimen Marinette! No... no me lo perdonaría nunca!
Marinette se empezó a agitar y obligo a Cheshire a parar
-¡Cheshire! ¡Escúchame!- El gato la puso enfrente suyo con la mirada intensa.
-No.... ¡Tu escuchame! ¡Marinette no puedo dejar que te atrapen!- dicho esto la abrazo con fuerza lo que al inicio la lastimo un poco.
-¡Cheshire cálmate!
-¡No puedo! ¡Te quiero! Y ¡NO QUIERO PERDERTE! ¡No dejare que mi padre te toque! ¡Ni el, ni la reina Chloe, ni nadie!-dicho esto la beso.
Marinette no le daba crédito a sus oídos, pero el rubor que sentía en sus mejillas le hicieron darse cuenta de que no lo había imaginado. Cuando se separaron, Cheshire se apoyo en su hombro mientras temblaba, en verdad estaba asustado.
En ese instante escucharon como se rompía una rama y al voltear vieron a una mujer de rubios cabellos y ojos verdes con mascara y vestido de pavo real.
Cheshire la miro y al no reconocer la se puso a la defensiva.
-Tranquilo, no les haré daño, quiero ayudar.
-¿Y como lo haras?- dijo Marinette pidiendo que la mujer fuera sincera.
-Tengan, esta es la llave de la puerta de salida, váyase y no vuelvan a Infratierra.
-¿Como la obtuvo?
-Eso no importa, váyase por su bien, por favor.
Marinette se quedó pensativa y se percato de algo -¿Pero que pasara con los demas? Los que me ayudaron... ¿Estarán bien?
-Ellos lo estaran, pronto las reinas caerán ya esta casi listo nuestro golpe de estado, pero no perteneces aquí mi niña, debes irte ahora.
-Bien, vamos  Marinette debemos irnos, te llevare a la puerta.
Cheshire tomo la mano de Marinette y se la llevo camino a las puertas y no volvió hablar en el camino, cuando Marinette se preguntó el por que una duda le invadió la mente.
-Cheshire... Nos volveremos a ver... ¿Verdad?- el gato paro en seco, tanto que le costo no decir palabra alguna y ella le dijo la pregunta tan directamente.
-Marinette... Mi princesa- jalo la mano de la peliazul y le beso la frente, después la empujo a la puerta ahora abierta y la cerro.
-¡NO! ¡Cheshire! ¡Espera! ¡No!
Detrás de la puerta, escucho como el chico cerraba con la llave y se alejaba. Marinette empezó a golpear la puerta.
-¡CHESHIRE!
-Sabes, desde que te vi y dijiste que yo era mas divertido que mi hermano me sentí feliz dé conocerte... Gracias por todo Marinette.
-¡NO! ¡GATO TONTO NO!
Al otro lado, el chico escucho los sollozos de la peliazul y lucho contra sus ganas de abrir la puerta.
-Nos volveremos a ver...- entonces Cheshire se alejo corriendo y se unió a los demás de Infratierra en el golpe de estado en contra de las reinas.
Se dice por ahí que ganaron y las reinas perdieron todo su maquillaje.
Mientras Marinette lloraba detrás de la puerta cerrada y sentía que perdía el conocimiento.

Cuando Marinette despertó, estaba en una habitación desconocida para ella y con su amiga al lado hablando con una mucama sobre lo genial que había sido que la rescataran del pozo.
-¡Marinette! ¡Semejante susto niña!
-Alya... ¿Que me paso? Me duele la cabeza.
-¡Fue súper dramático! ¡Te perdí de vista por horas y luego cuando te vi de nuevo estabas inconsciente en la casa de estos tipos y yo sin saber que decirle a tus papás!
-¿Inconsciente?
-Por ¡3 días! ¿Que tienen con el numero tres eh? Tres dias, tres años, tres deseos, no lo entiendo.
Mientras su amiga discutía con sigo misma el por que del numero tres, un maullido se escucho en el pasillo, maullido que ella conocía bien y se incorporo en la cama donde estaba.
-¿Nathaniel?
En ese momento apareció un par de hermanos uno vestido de blanco y otro vestido de negro, el cual tenia en sus brazos al minino pelirrojo, algo mas que destacaba era que eran rubios y de ojos verdes, el de negro era un poco menos alto pero ambos eran muy bien parecidos.
Cuando lo vio mas de cerca, Marinette tuvo un borroso y fugaz pensamiento de un gato negro y sin poder evitarlo dijo la palabra "Cheshire".
-Parece que ya te hablaron de nosotros, pero nos presentaremos de todos modos, yo soy Adrien Agreste y este serio chico vestido de nieve es mi hermano Felix Agreste, somos los Condes de Cheshire. Tu eres Marinette, nos lo dijo tu amiga, pero ¿puedo saber tu nombre completo?
-Soy- Soy Marinette Dupain Cheng, un gusto.
En cuanto la vio el gato salto sobre su regazo y se acomodo.
-Es un gato muy leal, me condujo hasta ti cuando caíste al pozo, pero puedo preguntar ¿que hacía una chica como tu, tan encantadora, dentro de un pozo viejo?
-Yo ya no lo se, creo que perseguía a una conejita blanca.
El chico se le quedo mirando y poco después empezó a reír, lo que la hizo sentir algo tonta.
-No... No no me río de ti, es que yo ya decía que un conejo se llevaba mis cosas jaja, perdona.
-Supongo que querrás ir a ver a tu familia y decirles que estarás bien.
Felix acerto, Marinette quería ver a sus padres, después de que ya se sintiera mejor se fue de la casa de los dos hermanos, prometiendo regresar después para un almuerzo donde les agradecería de forma debida a sus salvadores.
Pero no fue solo un almuerzo, con el paso del tiempo las visitas fueron recurrentes entre los hermanos y la peliazul, sobre todo de Adrien. Cuando el tiempo avanzó Adrien y Marinette se dieron cuenta de que el mundo estaba plagado de maravillas, y juntos las descubrirían todas.
Siempre siguiendo el rastro de un pequeño conejo blanco.

Marinette en el país de las maravillas.
continuara...