Christian Grey un joven rebelde de 17 años introducido en el mundo del BDSM por una amiga de su mama que le hace creer que el amor no existe, conoce a Anastasia Steele de 24 años cuando unos tipos intentan abusar de ella y cuando sus miradas se cruz...
Si alguien me preguntara como me siento en este momento creo que no podría expresarlo con palabra... Ver a Anastasia después de ocho meses y ver que dentro de ella crece mi hijo es algo inexplicable, no me canso de mirar lo hermosa que esta y como ha cambiado su cuerpo con el embarazo haciendo que se ve mas sexy, "Por Dios" de solo ver sus nalgas y sus pechos estoy duro.
- Si me sigues mirando me vas a gastar,- dice mientras prepara una pasta en la cocina.
- Es que te ves hermosa Anastasia.- le digo y ella niega.
- No digas mentiras,- me reprocha,- Estoy como una ballena,- hace un puchero, me paro de la silla de la isla de la cocina, camino hacia ella y la abrazo por la espalda.
- Me encanta como te ves,- paso la mano por su abultado vientre,- Mi hijo a hecho maravillas en tu cuerpo,- voltea la cara y sus labios quedan a solo centímetros de mi,- Te Amo,- susurro antes de besarla con ternura...
Después de comer una deliciosa pasta, Anastasia me llevo a su lugar favorito y que según ella la mantenía cerca de mi todo este tiempo, esta acomodada entre mis piernas, su cabeza recostada en mi pecho y yo acaricio su vientre ya que mi hijo no deja de moverse, segun Ana esta contento de tenerme cerca, estamos disfrutando de un hermoso atardecer a orillas de la playa y se siente tan bien tenerla entre mis brazos como tanto lo desee estos meses.
- Es hermoso verdad?- me dice.
- Mucho,- beso su pelo, ella me mira, acaricia mi mejilla y me pierdo en lo profundo de su mirada.
- Lamento todo el sufrimiento que te cause cuando me fui sin despedirme,- díce entrecortada,- Cuando nos denunciaron ya tenia sospechas de que podría estar embarazada y me aterre cuando tu padre me amenazo con hundirme en la carcel,- saber que mi padre hizo eso le enoja mucho y en realidad no se si algun dia pueda perdonarlo,- Solo pensé en el bebe, tenía que protegernos, no podía ni imaginar que me lo quitaran cuando naciera para que cumpliera mi condena.
- Nena yo te entiendo perfectamente y no te niego que al principio me hice muchas preguntas de porque te fuiste y te confieso que no todas las respuestas fueron positivas, pero algo me decía que pronto volveríamos a estar juntos,- ella sonríe,- Cuando Elliot me dijo donde estabas no lo pensé dos veces en venir a buscarte, pero cuando leí tu carta supe inmediatamente la verdadera razón y me reproche mil veces el no haberla leído desde el principio, veo una lágrima rodar por su mejilla y la limpio,- Sabes que es lo mejor de todo esto?
- Que?- susurra, entrelazo nuestras manos y beso sus nudillos.
- Que de ahora en adelante vamos a estar juntos los tres y no habrá fuerza humana que nos separes,- le digo.- Ustedes son mi familia ahora y voy a luchar para que estén siempre bien.
- Christian te amo tanto,- dice acercando su labio a los mios y besandome con ternura...
Aunque Ana insistió que no era necesario, la convencí de que pasaramos la noche en un hotel aquí en la playa, reserve un todo incluido y después de cenar pescado a la plancha con vegetales en el restaurant del hotel subimos a nuestra habitacion.
Es una suite muy bonita y espaciosa, pero mas bonita es la mujer que tengo delante de mi y que ansio mas que nunca hacer mía, camino con ella hacia la salita de la habitación y me sorprendo con lo veo, un pastel de cumpleaños y globos.
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