[ He's so high ]

[ Capitulo 027 ]

-Deja de culparte por favor, Damon –escuche como Alex le decía-

-No puedo, entiéndelo Alex, fue mi culpa, por eso ahora esta así –su voz estaba quebrada, estaba llorando-

-Velvet estará bien, tranquilízate, los doctores lo dijeron –Dave acariciaba un poco su espalda-

¿Doctores? Cruce la puerta y me quede atrás de ellos mirándolos a todos.

-Chicos estoy bien, no tienen por qué ponerse así, mírenme –les dije pero ninguno me escucho- ¡HEY! Aquí estoy... -su mirada seguía clavada en la camilla-

Di unos pasos hacia un lado y no pude creer lo que veian mis ojos: era yo. Llena de cables, con un aparato para poder respirar, vendas en mis brazos, en mis manos, estaba prácticamente muerta.

Voltee a ver a todos, estaban desconsolados, todos sin entender por qué paso esto: Alex y Dave me miraban como estaba toda destruida, mientras Damon y Graham, su mirada era perdida, mirando al vacio. ¿Realmente está pasando esto?

-Ellos te quieren bomboncito... -escuche una voz muy familiar afuera de la habitación-

-¿Papá? –Salí corriendo y ahí estaba, recargado en una pared con sus brazos cruzados-

No pude evitar correr y abrazarlo, me abrazaba como siempre lo había hecho: acariciaba mi cabello y apoyaba su barbilla en mi cabeza. Ambos estábamos llorando, su rostro era igual, tal y como lo recordaba.

-Me haces tanta falta pa... Lo sabes... -seque mis lágrimas-

- ¿Crees que yo no? Verte en todo esto me ha dejado destrozado –me respondió y agache mi cabeza-

-Tu sabes lo que siento, era la única alternativa que tenía... -lo mire y su frente se arrugo-

-Ven, quiero que los mires... -me llevo hasta la puerta- ¿los ves felices? ¿ves que están tranquilos por lo que hiciste? –me pregunto y negué con mi cabeza- Claro que no lo están, menos ellos dos –refiriéndose a Graham y Damon- Entiende que esta no es la alternativa, mira como terminé yo –sus palabras dolían, pero era más que verdad-

-Sabes mi problema, ya no puedo controlarlo papá, no puedo –el tomo mis manos y sonrió-

-Creo que fue lo único que sacaste de mi cariño –ambos reímos un poco- pero entiende que a veces todos tenemos problemas, pero tenemos que encontrar una manera para solucionarlas, y no hacer cosas como estas... Ambos hemos aprendido eso, yo puedo decir que me merecía esto, pero tú no... Aun te queda mucho por vivir, y quiero verte tal y como me lo prometiste: siendo una triunfadora-

-Pero ¿qué tengo que hacer papi? Ya no quiero hacer sufrir a nadie, menos a los chicos –voltee a verlos-

-Tu sabes que hacer, desde hace tiempo lo habíamos planeado ¿recuerdas?... Todo está listo allá, es tú decisison –me miro y toco mi mejilla- Sé qué harás lo correcto mi niña, eres muy fuerte y saldrás adelante-

-Te prometo que lo hare, tendré que pensarlo muy bien –le sonreí-

-Esa es mi pequeña Vel... Ahora regresa, que ellos te necesitan –me llevo a donde estaba mi cuerpo en la camilla-

-Pero no quiero dejarte... Necesito que estés conmigo –tome sus manos-

-Siempre esto contigo hija, siempre estoy a tu lado –me hizo que me acostara en la camilla y acaricio mi cabeza- Te amo bomboncito.

-También te amo pa... -se agacho dándome un beso en mi frente haciendo que me quedara dormida-

Abrí mis ojos soltando una gran bocanada de aire, los chicos se levantaron y me quitaron la máscara de oxígeno.

-Velvet, respira, tranquilízate... -Dave me hablaba- Alex fue por una enfermera, tranquila...-

Solo lo miraba algo confundida, voltee hacia mi izquierda y mi padre ya no estaba ahí, gire mi vista y la enfermera estaba entrando, me empezó a checar todos mis signos vitales, los cuatro mirándome algo más tranquilos. Estire mi mano hacia donde estaban, Damon tomo mi mano primero apretándola un poco, después los demás pusieron su mano también.

-Gracias...-pude susurrarles un poco-

-Estamos para ti mi niña, siempre lo estaremos –Damon respondió dándome una mirada más tranquila.

El doctor entro a la habitación y me hizo un chequeo algo rápido, aún seguía algo inconsciente, pero, aun así, sentía la despreocupación de todos, y que esto iba a cambiar muchas cosas en vida...