Entre la Guerra y el amor

Entre sabanas de seda

Waylon se sentía adolorido cuando abrió sus ojos.

La mejilla le ardía y punzaba, la hinchazón se notaba bastante morada, tocando casi los tonos negros.

Se movió tratando de acomodarse, esperaba encontrar un calabozo o algún lugar lleno de cadáveres.

En cambio se vio en una lujosa habitación, decorada con hermosos colores rojos y negros.

Muebles de madera, enormes cuadros y largas cortinas.

Trato de levantarse pero el mismo mareo por el golpe lo detuvo y solo pudo sentarse.

Vio entonces sus nuevas vestimentas.

Un camisón de encaje color rojo con encaje negro, que se ajustaba a su cuerpo.

Comenzó a revisar el resto de su cuerpo, descubriendo que había sido afeitado.

Se sintió asqueado ante la idea, y nervioso.

Si le habían hecho eso que más habían podido hacerle.

Escucho entonces la puerta abrirse, y vio a un extraño hombre moreno entrar con una bandeja con comida.

-vaya...la novia ha despertado...-

Waylon asustado apretó las cobijas bajo su mano.

-tranquila bonita....no voy a matarte....aunque debo admitir que te vez deliciosa.-

-por...-

-porque estás aquí...bueno le gustaste a Gluskin, supongo que serás su novia....-

-pero soy un hombre...-

El sujeto dejo la bandeja sobre un tocador, y acerco una silla para sentarse frente a Waylon, mirándolo directo a los ojos.

-te daré un único consejo chico, de ser tú me portaría como una linda y hermosa jovencita....Gluskin puede cuídate y amarte mientras no se enoje....tu eres joven y no creo que quieras terminar colgando de tu cuello verdad....-

Waylon asintió ante la mirada de ese tipo.

-bien...si quieres vivir esto es lo que harás, vas a ser educado, evita hacer preguntas o hablar de más...mmm puede que debamos ocultar ese morado de tu rostro...-

-porque me ayudas....-

-eso no importa mientras puedas vivir o si-

-creo que...si....dime que más puedo hacer...-

-Gluskin busca una esposa, y al parecer algo de ti le ha gustado....trata de ser así, una esposa preocupada por su marido...dile que lo quieres, y claro evita que te de asco besarlo...la última chica termino en la chimenea por no querer besarlo-

Waylon tembló y comenzó a llorar del miedo.

Aquel hombre le limpio la lágrima rápidamente.

-shh shh...si te escuchan llorando te ira mal....y a mí porque creerán que te he hecho algo....-

Waylon solo asintió, pero siguió hipando por el miedo.

-vamos a arreglarte, comerás algo y mientras te explicare las reglas....-

-gracias...por cierto su nombre...-

-soy Frank, Frank Manera...-

-soy Waylon...-

-bien Waylon, come tu sopa antes que alguien más venga y no puedas ni alimentarte-

Waylon tomo el plato de sopa y comenzó a comerlo, era un plato delicioso pero cada cucharada eran bastantes duras de tragar.