Mi ángel.

¿Qué me está pasando?

Desperté con mis ojos hinchados por haber llorado, me levante y literalmente estaba hecha un desastre, escogí mi ropa qué era una blusa muy simple negra, un short, y unos botines negros con tacón; me metí a la ducha y al salir me cambié para después bajar a desayunar.

Esta vez no encontré a Jack, lo cual se me hizo raro, en la mesa estaba mi desayuno y una nota "Shar (Cómo Jack me llamaba) tuve qué irme temprano ya qué debo pasar a la biblioteca, disfruta tu desayuno, te quiero."

Mientras comía, estuve pensando en el chico de ayer, si, Nathan, tal vez podría darle una oportunidad de salir.. No, Shar, ¿qué piensas? Ese chico tiene pinta de rompe corazones informó mi mente quitándome esos pensamientos y haciéndome levantar por mi bolso e ir directo a la universidad.

Encontré a Keren esperándome en la entrada a la uni, con una cara de pocos amigos.

-¡Mujer, cómo tardas, apresura tu paso! -Solté una risita para luego hacerla reír.

-Lo siento Keren -Dije mientras llegaba hasta ella y caminábamos al aula.

-Oye Shar, ¿Qué pasó con el chico de ayer?, fue divertido verte caer. -Dijo divertida mientras me miraba.

- ¡Ni lo menciones! -Dije riendo.

-Pues creo qué lo invocamos.

No sabía a qué se refería hasta qué vi a un Nathan caminando hacia mi.

-Hey Sharon, ¿qué tal tu día? -Dijo sonriendo.

-Va bien, gracias. -Admití devolviéndole la sonrisa.

- ¿Pensaste lo qué pregunté ayer?, sólo te fuiste sin decir nada.

-Está bien, saldré contigo. -Dije sonriendo  y olvidando todo lo qué mi mente me advertía -Pero no pienses qué es una cita.

-Claro, dame tu dirección y paso por ti a las 8 pm de mañana. -Le di la dirección y me despedí de él para ingresar al aula.

Keren se adelantó al aula desde qué Nathan llegó, dejándome sola con él.

Habían pasado las primeras tres clases, y ahora nos encontrábamos en la cafetería, después de pedir nuestro almuerzo nos sentamos en una mesa con otras dos chicas: Danielle y Lina.
Dani es muy sencilla, es un poco alta, cabello rubio y no tan largo, en cuanto a su personalidad ella es muy alegre y te hace sentir cómoda cuándo dialogas con ella.
Lina es muy linda, es de tez no tan pálida, y ella es tímida al contrario de Danielle.

Después de almorzar dieron el timbre, e ingresamos al aula..

Mientras el profesor daba la clase sentí voces hablándome, me quedé viendo a un punto fijo mientras las escuchaba a la vez lejos y a la vez tan cerca, estaba perdida pensando y tratando de descifrar qué me decían, ¡¿Qué diablos me sucede?! Pensé mientras las voces se iban alejando.

-Shar.. -Escuchaba una voz susurrándome -Shar.. -Dijo un poco más fuerte mientras me daba un leve codazo devolvi3ndome a la realidad, voltee a mi lado, era Keren mientras qué con su vista me advertía qué alguien esperaba mi respuesta.

-Señorita Smith ¿Puedo seguir con mi clase? -Dijo el profesor viéndome fijamente.

-Lo siento, puede continuar.. -Contesté apenada.

Terminaron las clases y Keren me invitó a su casa a pasar la noche a lo que acepté. 
Llegamos a su casa y al entrar vi a una señora algo mayor pero linda, sencilla y muy sonriente, por lo qué supuse qué era la madre de Keren.
Le miré sonriendo mientras Keren y yo llegábamos y poníamos las cosas qué pasamos a comprar en el súper para pasar la noche..

-Bienvenida, tú debes ser Sharon, yo soy Clarissa, madre de Keren -Dijo con una sonrisa qué mostraba su perfecta dentadura.

-Si, soy Sharon, es un gusto señora -Respondí sonriendo.

-Está bien, puedes hablarme de tu, todavía no estoy tan vieja. -Dijo, a lo cual asentí riendo junto con ella.

-Mamá, subiremos a mi cuarto, y veremos unas cuantas películas. -Dijo Keren divertida.

-No te preocupes Ker, las películas están en el cajón. -Admitió Clarissa.

Subimos a su cuarto, y en realidad era muy lindo qué me causo algo de ternura, pero así era Keren, tan linda qué causaba mucha ternura.

Pusimos películas, nos pintamos las uñas una a la otra y después de conversar hasta altas horas de la madrugada caímos en los brazos de Morfeo.