Cigarette || Nate Maloley EDITANDO

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-Entonces dime ¿Como aprendiste el español? -Nate dejo por fin su comida para hablar conmigo, no solía explicar mucho acerca de esto para evitar comentarios después, las personas en la secundaria solemos ser muy ignorantes y por eso aborrezco hablar de mi ascendencia o mi capacidad para hablar otro idioma que no es el ingles.

-Mi madre me hablaba mucho en español cuando era niña y solíamos ir a México siempre, dejamos de ir por el trabajo de mi padre y porque el en realidad odia todo eso, no por racismo si no porque mi madre siempre encuentra la forma de atacarnos por medio de su nacionalidad, ella es muy grosera cuando quiere. -Reí junto con Nate mientras pedía la cuenta.

-Tu madre es escalofriante. -Me dijo y yo asentí rápidamente. -¿Tienes hermanos? -Negué con la cabeza, justo cuando iba a preguntarle algo sobre su familia el mesero llego con la cuenta, Nathan saco unos billetes y los dejo en la mesa. Se levantó, lo imite y salimos del restaurante. Su mano se entrelazo con la mía, un gesto que consiguió cambiarme el color de las mejillas pero por fortuna, el ni se inmuto de lo que había causado en mi, me abrió la puerta del copiloto, rodeo y subió el del otro lado, el auto empezó a andar en cuestión de segundos.

-¿Sabes que ha ocurrido con Derek y Kate? -Pregunté al recordar los lloriqueos de mi amiga en todo el día y me entro la curiosidad aun sabiendo que Nate no era el tipo de chico que habla sobre sus amigos o de cualquier cosa en general.

-En realidad no se, pero deberías advertirle a tu amiga que Derek no es de una sola chica. -Su atención estaba puesta al frente y en el volante. Asentí aunque el no pudiera verme.

-¿Y así son todos? Me refiero a tu grupo de amigos ¿Así son todos tan cretinos con las chicas? -Ni siquiera me percaté del significado que expresaban mis palabras hasta que salieron de mi boca, pero aun así no me retracte porque quería escuchar su respuesta. Sus ojos se posaron en mí, detuvo el auto en la acera de la calle próxima a mi casa y yo tímida ante su mirada seria baje mi vista hacia mis manos encima de mi falda del uniforme.

-¿A que te refieres? Por que me estas dando a entender que yo he sido un cabron contigo. -Su ceño estaba fruncido expresado confusión o quizás molestia.

-No, es que solo, mierda...-La verdad es que no tenia idea de que decir, en mi mente todo estaba claro, solo quería saber si Nate estaba saliendo solo conmigo o con un montón de chicas mas pero las palabras no me salían, me avergonzaba sonar mas patética ahora.

-Dime, quiero saber lo que piensas de mi. -Insistió con voz firme, casi enojada. Respire repetidas veces antes de hablarle.

-¿Soy solo yo o hay mas chicas? Ya sabes, ¿Somos amigos con beneficio y tu puedes ir y tirarte a las que quieras mientras yo pienso que soy la única? -No sabia a que venían mis dudas sobre Nate pero al igual que con Derek a este chico se le notaba a leguas su lado fuckboy y yo no estaba dispuesta a soportar ese tipo de relación basura. Nathan pareció procesar después de unos segundos lo que le acaba de decir, se tomo el puente de la nariz y río amargamente negando con la cabeza repetidas veces como si no pudiera creer esta lado tan ingenuo mío.

-Hace apenas unas semanas que comenzamos a hablar bien y ya piensas que yo realmente soy uno de esos idiotas que aparte de drogarse como la mierda van y se cojen a cualquier chica que se les pase por enfrente, nena si me lo hubieras dicho desde el principio me hubiera ahorrado el darte tanta importancia.

Lo ultimo que dijo definitivamente me dolió, me mordí el labio para evitar dos cosas 1) comenzar a hablar como una histérica 2) soltar las lagrimas de coraje. Abrí la puerta del auto y mientras salía me colgué la pesada mochila en el hombro, Nate no me detuvo y me basto para golpear la puerta provocando que esta se cerrase, sin mirarlo por ultima vez comencé a andar hacia mi casa.

No me arrepentía de haberle preguntado aquello en primer lugar porque siempre tuve ganas de planteárselo antes de que todo se saliera de control y me viera la cara, porque definitivamente no quería enamorarme de un cretino como el y por el amor de dios, me había dado cuenta a tiempo.

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Diablos, soy un desastre para escribir peleas de pareja. Pero la verdad ya tenia ganas de ver el mundo arder en esta fanfic,