Pasó casi un mes de la última vez que vi a Nate y digamos que ni lo vi porque estaba drogada.
La idea perfecta para superar tu fracaso amoroso mas reciente es yendo a otra ciudad para ir a un festival musical todo un fin de semana con tus mejores amigas. Pero no es del todo buena si el culpable de ese fracaso amoroso viene a tan solo dos carros de distancia junto con su bola de amigos idiotas.
Cuando mi amiga Sophia llegó a casa con todo su equipaje mostrándome entradas y una sonrisa radiante no me pude negar. No fue hasta que llegué al carro totalmente lista mentalmente a pasar un excelente fin de semana cuando las tres idiotas mas idiotas del mundo me dijeron "solo hay una mala noticia, Nate también vendrá". Pero muy tarde pues ya íbamos directo a Kansas City.
Tardamos tres horas en el camino porque nos dio hambre y ganas de hacer pipí pero fuera de eso a las 5:00 de la tarde ya estábamos subiendo a nuestra habitación de hotel, la cual quedaba justo a un lado de la de los chicos. En si venían con nosotras Derek Luh (un pendejo), Sammy (el que me cae mejor que todos y tiene onda con Sophia), Dillon (mi favorito) y por supuesto, el inigualable Skate Maloley (un fumador rompe corazones).
-A todo esto ¿quién consiguió las entradas? -Les pregunte mientras estábamos acomodando nuestras cosas. Tomé mi celular para avisarle a mis padres que había llegado con vida.
-Fue Sammy, tiene algunas influencias con los músicos del festival y yo...solo nos invitó. -Dijo Sophia como si nada.
La miramos cómplices.
-¿Acaso te gusta Sammy? -Preguntó fingiendo desinterés Rachel.
-¡NO! -Respondió ofendida. Kate se levantó de la cama y se encogió de hombros.
-¿Entonces no te molesta si lo uso a el para darle celos a Luh?
-Ni se te ocurra, perra. -La señaló con el dedo y todas nos echamos a reír.
~
-No puedo creer que vaya a hacer esto. -Me susurré a mi misma una hora después de llegar a la ciudad cubriendo mi cara con las manos. Mis amigas rieron a excepción de Rachel que trataba de no arruinarme con las tijeras. No sé cómo pasó que después de unas hamburguesas con papas fritas y cerveza decidieron hacerme un nuevo look. De un segundo a otro mi cabello estaba por los hombros y no pude evitar soltar un sollozo dramático.
-¿Qué me hicieron demonios? -Les pregunté quitándome una lagrima falsa y volvieron a reír. Me levanté de la silla y me miré en el espejo, no me quedaba mal pero tal parecía que el cabello corto me había reducido dos o tres años.
-Pareces angelito. -Me dijo enternecida Kate y después retomó su compostura para decirnos que ya se nos estaba haciendo tarde para arreglarnos e ir con los chicos. El festival iniciaba mañana por la mañana pero nuestra fiesta iniciaba hoy.
Cuando me puse la falda y el top, cuando me maquillé y peiné mi cabello ahora al hombro y no a la cintura, en cada momento aparecía el nombre de Nate en mi mente y su rostro al verme así. Traté de aparentar que me veía feliz, bonita y así de una vez por todas creérmelo yo misma.
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La cara de Nate al verme salir de la habitación así, después de tanto tiempo sin vernos fue épica y me prometí no olvidarla jamas. De verdad puedo jurar que entendí el mensaje que me dio su cara "dios mío , aún no te supero"
