Clinging to something|| Liam Dunbar

08; «We are family»

Me queje en voz alta y acaricie torpemente el costado de mi cabeza, mi mente estaba en un brillante y puro blanco.

Que no duro demasiado.

Asustada busque a mi alrededor alguna señal de vida, y decepcionada me limite a ponerme de pie.

Liam no estaba, ni Stiles, ni siquiera algún desconocido, empuñe el arco en mi puño y totalmente enfadada camine alejándome del vacío campus.

Todo estaba oscuro y en total silencio, eso me ponía a la defensiva y solo podía preguntarme

¿que pasó?

aunque tenia algunas ideas de lo que probablemente sucedió, no sabía la verdad.

Pero el incesante dolor del costado de mi cabeza era una gran pista de que posiblemente solo caí.

Y gracias a mi caída no sabia si Liam estaba vivo.

Y gracias a no tener un maldito reloj no sabia ni cuanto había pasado.

Maldije en un murmuro todo lo que había pasado y me dirigí hacia el estacionamiento sin la mínima idea de que hacer, mi ceño estaba totalmente fruncido y la frustración me ganaba.

Golpeé el auto mas cercano, y luego salte asustada al escuchar como la maleta se abría de  inmediato.

Mis posibilidades eran:

-correr

-Mirar

...

-y seguir corriendo.

Lo mas sano era correr y encontrar una manera de llegar a la bestia, pero ya que no había rastro de nadie solo observe levemente el interior para cerrar.

Pero dos pares de zapatillas me detuvieron.

Guardadas en la esquina, con una perfección admirable, totalmente blancas.

Excepto la suela.

Asombrada mire la sangre y solo pensé en quien sería el auto.

Hasta que lo reconocí.

"—Voy a estrellar el bonito auto que mis padres me obsequiaron en mi cumpleaños, pero salvare a mis amigos—"

—Mason...—Susurré totalmente arrepentida de saberlo.

—¡Kelly!—Exclamo Scott y cuando llego a mi lado me arrebató la zapatilla, a mi otro lado llegó Liam y quedo analizando la situación

Un balbuceo me distrajo.

—¿Que se supone que hacen con mi auto?—Pregunto Mason confundido, cuando mi mirada cayó en el no supe como mantenerla así que solo la baje.

—Eres tú—Murmuré lo suficiente algo para que escuchara.

—¿Qué?, ¿Que pasó Kelly?

La simple idea de matarlo me carcomía la mente, la sola idea de pensar que Liam no me perdonaría.

Y peor.

Mataría a un inocente.

—¿De que habla, Liam?—Exigió saber esta vez esperando que su mejor amigo le respondiera, pero Liam pareció derrumbarse, lo sabia, lo sentía.

–¡Corey no! 

Y de unos segundos a otros.

Mason desapareció.

—¿Que vamos a hacer?—Susurro Liam y su quebrada voz me encogió.

—Matarlo.—Añadí y luego toque mi garganta y saboree la amargura que las palabras me dejaron.

—¡No podemos matarlo!—Respondió Liam y con su mirada pidió ayuda en Scott, el alpha solo la bajo y apoyo.

—No podemos.

—Entonces, esperar a que la bestia recuerde, perderlo y que todos mueran. Incluyéndonos.—Comente con una amarga risa, aunque la situación no me causaba gracia, ni a nadie.

—No se que tipo de información te dio Gerard. Pero siempre tenemos la opción de salvarlo—Informó Scott y solo escucharlo me repudiaba.

–Lastima que Alison no tuvo la oportunidad.

Los ojos de Scott perdieron su brillo y concentración, y a la vez se llenaron de lagrimas.

—¡¿Que quieren de mí?!, ¡¿Que quieres de mí?!—Grito a la vez que golpeaba la maleta y me sobresaltó, en su frente se marcaba una gran vena—¡De repente apareces y solo nos enteramos que eres Argent, hablas de Alison como si la conocieras de siempre!, ¿quien eres?.

—Soy una Argent, probablemente no siempre estuve, pero al lado de Alison nunca falte—Sentí las lagrimas atravesar mi rostro—Y si no hubiera renunciado a mi destino de cazadora quizás la hubiera salvado, quizás mi hermana seguiría aquí.

Seque mis mejillas y mire con un profundo odio a ambos hombres lobos, no me importo su asombro ni siquiera la culpabilidad que tenían.

—y pienso vengarla... Partiendo por matar a la Bestia, que es lo que nos corresponde.

...

  — Kelly, debemos irnos— Interrumpió Alison mientras me empujaba con su mano, a mi espalda quedaban ambos ataúdes y una inmensa tristeza me inundaba, mis padres habían muerto y Chris con su semblante serio solo me ponía mas nerviosa.

  —No quiero— Me negué y paré quedándome clavada en el pasto, Alison volteo y su cabello se desarmó por la leve brisa, sus labios se apretaron en señal de molestia.

  — Kelly, tienes que venir con nosotros— Para ese momento mis lagrimas ya se estaban derramando y tener a una Alison determinada con solo 10 años me causaba incomodidad.

— No quiero dejarlos— Lloriquee

— Kelly, ellos nunca nos dejaran. tenemos que irnos antes que anochezca— Informó Chris y se alejó dandonos espacio.

— Estoy sola— Murmuré sin mover ningún pie y a la vez secando mis lagrimas, Alison frente a mi me tiro del codo para apretarme entre su brazos en un fuerte abrazo.

  — No lo estas, Seremos Hermanas kelly, despues de todo al tio Robet le gustaría eso—Me reconforto la azabache mientras me daba una leve sonrisa.—Los vamos a extrañar.

Ambas nos acercamos hacia su padre y este apretó mi hombro en señal de reconforta miento.

—Somos familia Kelly... Y superaremos esto juntos.

La señora Victoria nos observaba con disimulo desde la camioneta, di un último vistazo hacia atrás y asentí.

—Somos Argent.