¿Qué sentimos?

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Capítulo 11

Abril 4

Ya habíamos escapado un tiempo de los zombis y de los mutantes sé que no debería sorprenderme su habilidad pero es realmente bueno, era de noche estábamos durmiendo a la intemperie por que no habíamos logrado encontrar, auto o casa en la cual refugiarnos lo cual me mantenía más alerta de cualquier ruido... la única luz con la que contaba además de la luna era una linterna a baterías que habíamos encontrado en una casa y que aun tenia.

Suspire sintiendo el frío de la noche, ondear mi cabellera al viento, para observarle dormir un rato observar perfectamente cada facción de su rostro desde las largas pestañas azulinas, hasta los labios rosas que se encontraban un poco agrietados, acaricie su cabello, rebelde y sucio, pero aun suave. . . estoy seguro que limpio debe ser un azul hermoso como el de sus ojos.

-nngg. . .ah –Escuche lo cual me dejo sorprendido, mire hacia todos lados estoy seguro que ese no eran los quejidos de un zombi. . . ¿está?. . . no. . .no es posible –mmmhh. . . ah...ah –Gimió otra vez ¡Está teniendo un sueño húmedo! –

-Rayos –Murmure. . . ¿por qué? En primera estábamos en un completo caos ¿Quién sueña con eso cuando puedes ser devorado al día siguiente?. . . demonios. . . de qué le reclamo si yo también he tenido esos sueños, me pregunto. . . ¿quién es? El que invade tus sueños y te hace gemir –

-Rayos –Murmure... ¿Por qué? ¡¿Por qué tenía que hacer eso?! Y me preguntaba ¿Con quién soñabas? Sé que no soy yo... ¿Pero quién era aquella que invadía tus sueños? y te hacia gemir –

Nuevamente le observe, como su cuerpo tenia ligeros temblores, sus labios carnosos y agrietados soltando ligeros quejidos, su cabello revuelto, todo de él era perfecto, es este afecto que cada vez crece más, me pregunto. . . será por el producto de este caos y destrucción, será el simple deseo de no sentirme solo lo que me hace apreciarte. . . o algo mucho más intenso, que se me es difícil de soportar. . . pero deseo tanto impactarte contra una de las paredes y besarte hasta robar el ultimo racimo de tu aliento.

-¡Ah! –De repente se despertó, completamente sudado, no quiero mirar hacia abajo, o ya mire. . .no, no hay nada, levante la mirada un tanto intrigado. . .creo que muy pocos despiertan así luego de esa clases de sueños –

-¿Ocurre algo? –Pregunte –

-S...solo una pesadilla –Respondió, ¡¿eso es una pesadilla?! ¡Que serán tus parálisis del sueño!–... ¿No hice sonidos raros? ¿No dije el nombre de nadie? –Me pregunto –

-Bueno, además de gemir y estremecerte no –Contesté –Me pregunto con quién estabas soñando, por que, el que, ya lo sé, eso no me parecía una pesadilla, sinceramente.

-Eso no es de tu incumbencia –Profirió rojo hasta las orejas, se ve adorable ¿eh? ¿Un hombre pareciéndome adorable?. . .bueno ya he visto zombis qué de raro tiene que un hombre me parezca adorable –Además son simples pesadillas, un sentimiento que jamás debió existir, maldito cerebro que se pudre lentamente.

-Como quieras –Respondí, me observo un momento para suspirar, su cuerpo tenia ligeros temblores, la noche era fría y los árboles a nuestro alrededor solo aumentaba ese frío, me levante para sentarme a su lado a abrazarlo, su cuerpo se tensó completamente –

-¡¿Qué crees que haces?! –Exclamo, nuevamente rojo y completamente tenso –

-¿Lavar que no ves? Te abrazo, hace frío estas temblando, solo te ayudo a mantener calor corporal no vaya a ser que te de hipotermia por no estar lo suficientemente abrigado –Contesté, aunque creo también era una mera excusa para abrazarlo y mantener su cuerpo cerca del mío –

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