EN LA OSCURIDAD

Rugido Escalofriante

Ya pronto culminaría toda la búsqueda y sólo esperaba mi renacimiento, seguía los pasos a Johan por el antiguo continente, estaba en África, parque y reserva natural del Serengeti Tanzania, donde descansaba la gran montaña del Kilimanjaro, la cual tenía tres volcanes inactivos Mawenzi, Shira y Kibo, tres monstruos que despertarian algún día de su largo sueño, para devastar a la humanidad. Johan se encontraba en un grupo turistico, cuyo fin era atravesar la inmensa sabana de largos pastizales y bestias de diferentes especies, tamaños y estilos. Iban cruzando los pastizales en unas camionetas grandes y descubiertas, donde la brisa soplaba sobre los pasajeros, pero aun asi, el calor era infernal. Johan se encontraba en la segunda camioneta de las cinco que estaban de paseo por el parque natural, cada camioneta cargaba diez pasajeros a parte del chofer. Cada camioneta llevaba el tanque repleto de gasolina y un galón extra por si había problemas, cinco galones de agua y comida suficiente para cada pasajero por si pasaba alguna novedad, junto a una caja de primeros auxilios y medicos por cada una de las camionetas, cinco guías turísticos experimentados y radios de larga frecuencia, con fusiles de largo alcance con municiones letales y no letales y una pistola de bengalas.

En África aparte de que odian todo lo malo que se hace contra la humanidad, lo que más odian es que la humanidad se meta con la naturaleza, odiaban a los cazadores furtivos igual que Johan los odiaba. A largo paseo, las camionetas pararon, y se bajaron todos a comtemplar una manada de elefantes que estaban migrando durante días y que se posaron en las aguas frías del gran lago Victoria a refrescarse del intenso calor. Mientras los turistas tomaban fotos, Johan sabía que no venía de vacaciones, su instinto salvaje lo había llevado donde según los humanos comenzó la vida.

El joven brasileño se apartó del grupo para comenzar su búsqueda, se hayava por la garganta del Olduvai y a unos sesenta kilómetros del lago Manyara. Johan sabía que tenía que llegar donde todo empezó, sabía que lo que buscaba se hayaria en ese lugar, el gran cráter de Ngorongoro donde la historia de la humanidad según las creencias humanas comenzó, su corazón lo impulsó hacia ese lugar. Johan se encontraba caminando por las sabanas, cuando de repente escuchó un estruendoso sonido, un rugido escalofrante que aterraba al más valiente, se camufla entre las hierbas y desde lejos noto a un par hombres luchando contra un León, pero había algo diferente en este animal que asombró a Johan, este no era un león normal, su aspecto era diferente a cualquier león existentente, su melena era inmensa blanca como la punta de su cola, se asemejaba bastante a los ojos del guardian que aparecia en mis sueños, sus ojos completamente negros como la oscuridad, con una mirada amenazante y aterradora, sus garras parecían garfios y sus colmillos como cuchillos, más afilados que cualquier navaja, el resto de su pelaje era negro y su estatura era inmensa como la de un gran elefante, era algo asombroso.

Johan pensó que el gran león estaba atacando a los hombres, pero uno de estos saca un rifle con dardos tranquilizantes, eran cazadores furtivos pero nesecitaban al animal vivo. Disparan una gran cantidad de dardos al león, Johan vio esta ecsena y se enfureció sale en medio de ellos como si fuera un fantasma, pero era el, completamente lleno de furia y dice - larguensen de aquí y dejen esta tierra y a sus criaturas en paz, o los matare. Uno de ellos dice - que te crees malnacido. Saca un revólver y le apunta en la cabeza a Johan. Johan vuelve a decir - se los repetiré una vez mas, larguensen de aquí o los matare. El cazador se enoja y dispara, Johan lo esquiva y golpea el vientre del hombre, el otro reacciona y saca una pistola y dispara tres veces hacia Johan el se mueve y las esquiva salta y de una patada en la cabeza golpea a este contra una roca dejándolo incociente. Se acerca al que se estaba quejando del dolor en el abdomen que ya hacía en el suelo para acabarlo y este pide piedad diciendo - perdonanos la vida y dejanos ir y no volveremos aquí. Johan responde - larguensen antes de que me arrepienta y tome vidas. El hombre se puso en pie adolorido y toma a su compañero que se encontraba inconciente, Estos hombres escapan en una camioneta Jeep, alejandosen del lugar.