Enamorado De Una Criatura Sobrenatural

Confrontación y Secretos

Isaac

Había sido muy extraño todo, Dylan simplemente se había desvanecido ante mí, y después despierta como si nada, enojado y me dice que me aleje, estaba realmente confundido. El profesor de Biología VII llegó justo después de que él saliera, ¿se lo habrá encontrado? Eso no tenía importancia, tenía que averiguar que fue lo que le pasó así que iría con la única chica que sabía.

- Charlotte, quiero hablar contigo- dije cuando el maestro de Biología VII dio por terminada la clase y todos salieron.

- Claro, de qué quieres hablar guapo- Charlotte se acercó a mí tanto que casi rosaban nuestros labios, pero me aleje pues mi corazón sólo le pertenecía a Dylan.

- Quiero que me expliques el porqué de tus palabras, ¿Qué quisiste decir con "Otro ataque de Dylan"?

- Créeme cariño, no vale la pena saber de ese perdedor, mejor preocúpate en otras personas, y para que te quede claro, otras personas, soy yo baby- dijo guiñándome un ojo.

Me acercó a ella, a tal punto de dejar nuestros labios a un milímetro de distancia- Me enfocare en lo que yo quiero, así que o me dices lo que quiero saber o no llegaras a tu nido, Súcubo- la miro de arriba abajo.

Charlotte tembló de pies a cabeza- ¿Cómo lo sabes? A... acaso eres un... un...- la interrumpí.

- ¿Un cazador? No querida, soy algo aún peor que un cazador, ellos tienen misericordia, yo no, digamos que, soy la pesadilla de todos ustedes, así que, ¿me dirás lo que quiero saber o te lo tengo que sacar a la fuerza?- saco las garras y se las paso por el cuello, como es de esperar, por mi combinación de Vampiro con Hombre Lobo, mis garras y colmillos eran más grandes y afilados.

- Nadie sabe lo que es Dylan, nunca vimos un humano así, sin aura, con un aroma muy raro, en cuarto año, a la edad de 5 años, comenzó todo, antes parecía un humano ordinario, pero conforme fue creciendo, menos servían los encantos de las Súcubos de mi nido, tampoco la parálisis de los Kanima, muchas criaturas, inclusive nuestra madre Lillith, sentíamos curiosidad, no sabemos de humanos que sean inmunes a nuestros "encantos" o mejor dicho, a nuestras habilidades.

- ¿Entonces, ninguna criatura ha podido dar con lo que es él?

- Ninguna.

- Dime, ¿Qué es eso de "ataque de Dylan"?- pregunté aún más intrigado, en este punto ya había guardado las garras.

- Así lo nombramos cuando en el mismo año, en quinto, se desvaneció de la nada, se quedó quieto veinte minutos, sin respirar, creímos que se había desmayado, pero cuando se acercó la maestra, dejaré en claro que ella era humana, él simplemente se levantó y la miro, dijo algo en latín antiguo y se fue. A los tres días encontraron a la familia de la maestra muerta en su casa, incendiada, se sabe que parte de su familia eran vampiros.

- Entonces, ¿Dylan lo predijo?- miro a la chica con algo de sorpresa.

- Creemos que si, al día siguiente del acontecimiento sus padres lo dieron de baja y lo cambiaron de escuela y así fue pasando hasta que decidieron que era mejor que él estudiara en casa, hasta el año pasado, que entró aquí a la Preparatoria, más inteligente y más avanzado que los humanos promedio.

- Entonces, él es un adivino, ¿Cómo no se dieron cuenta?

- Porqué Dylan no es un adivino, ellos tienen el aura de todos los colores y huelen a alquitrán, él no la tiene y su olor es a naturaleza, a veces a prado, otras a costa, muchas a montaña y muy pocas veces a bosque.