Enamorado De Una Criatura Sobrenatural

Normalidad, Revelación inesperada y Unión

Dylan

Vi a Andrew parado viendo con odio a Isaac.

- Andrew, ¿Qué haces aquí?

- Protegiéndote Dylan, éste no tiene intenciones de que recuerdes, ven conmigo, yo puedo ayudarte.

Por un segundo dudé, pero una luz me envolvió y me elevé en el aire y de repente todo era claro, recordaba absolutamente todo, mi noche perdido, la memoria borrada, mi encuentro con Isaac, nuestra primera vez, la llegada de Andrew, mi cumpleaños con la batalla en la bodega y finalmente la daga en mi espalda. La luz dejó de brillar y escuche la voz de Merlín.

- «Nunca te alejes de Isaac, estas predestinado a estar junto a él. Siempre será necesario para ti y tú para él. Ámense como lo hice yo con Arturo»

Y como todo empezó, termino.

- Dylan, Dylan, ¿Me escuchas?- la voz de Isaac sonaba distante pero con cada llamado regresaba a mí.

- Estoy... estoy bien Isaac, ya estoy bien.

- Ven, siéntate- dijo agarrándome del brazo y sentándome en la cama de musgo.

- ¿Dónde... dónde está tu anillo?- pregunté al ver su mano y no ver el anillo.

Isaac sonrió- ¿Así que ya recordaste todo? Y por el anillo no te preocupes, está en tu casa- agarró mi mano y la apretó.

- Vámonos a casa, quiero dormir mucho- dije quejándome- es más hay que quedarnos aquí- al terminar de decir eso, cerré los ojos y me dejé llevar, sentí cómo hacía crecer más musgo para la cama y sentí los brazos de Isaac a mi alrededor acostándome a su lado.

No sé cuánto dormí, pero ahí seguía con Isaac, no podía quitarme de la cabeza las palabras de Merlín.

- ¿Ya estás despierto?- preguntó mientras me abrazaba.

- Sí, ¿Tú no dormiste?

- No, tuve que cuidarte, no dejaré que mi pareja esté en peligro. Además de que Andrew siguió aquí un tiempo.

- Tranquilo Isaac, todo estará bien, ya estamos unidos para siempre, recuerda eso y por él, no te preocupes.

- Siempre- terminé acercándome a sus labios para depositar un beso casto.

Andrew

No podía creer que Dylan recuperara la memoria y se quedara con Isaac. Lo amaba, de verdad se amaban.

- Puedo oler tus celos desde kilómetros- me dijo un vampiro saliendo de entre los árboles, aun no lograba salir del estúpido bosque.

- ¿Quién y qué eres?- dije alterado.

- Tranquilo, soy amigo, cómo dirían los Druidas con los que estás, soy Raúl y soy amigo y protector de Dylan, supongo que por eso tu olor de celos, por él.

- ¿Raúl? Espera, tú estás en la manada de Isaac.

- Así es.

- ¿Hombre lobo?

- No, Vampiro- dijo guiñándome un ojo- ¿se puede saber por qué los celos?

- Por esos dos- dije molesto- Dylan, desde que conoció a Isaac, me olvido, me dejo en segundo plano, eso es molesto, es... es inaudito.

- Espera, ¿estás celoso de su relación o de que literalmente te abandonó y olvido? O es que ¿Tú lo amabas y él conoció a Isaac? ¿O cómo está el asunto?

- Todo, estoy celoso de su relación y molesto de que me olvido, me encabrona que haya conocido a Isaac y me haya olvidado, lo amaba o más bien lo amo. Pero bueno, él estaba predestinado a Isaac y viceversa.