Advertencia: Camila Gip
¿Soñaste hasta el punto de confundirlo con la realidad?
Un amor imposible..
"Portada echa por BOSSofMyMIND"
Esta historia esta escrita por mi.
-¿Entonces me dirás lo que quiero saber o dejo que mi amiga juegue contigo?-. Pregunte mientras jugaba con el cuchillo en mi mano.
-¡No te diré nada maldita perra!-. Grito pero Ally lo golpeo.
-Mira... Me estoy cansando de jugar-. Dijo Camila jugando con su navaja.
-¿Para que quieres saber en donde tienen cautivos a toda a esa gente? Te estas metiendo en donde no debes y vas a terminar muy mal-. Dijo para escupir sangre.
-No lo creo... Te diré porque... Tú tienes dos hijas o eso es lo que investigo Lucy... ¿Que pasaría si un día una de tus hijas sale a dar una vuelta? Y de la nada salen hombres y la secuestran... Abusan de ella, la hacen esclava y es golpeada brutalmente... Dime... ¿Tu no buscarías venganza y ayudarías a esas personas que solo fueron usadas?-. Le pregunte tomando la silla y sentándome en ella.
-Pero mis hijas están bien... Yo jamás las perdería de vista-. Dijo y negué con la cabeza.
-Que lástima que tus hijas no sepan que tipo de clase de persona eres tú-. Dijo Dinah escupiéndole.
-En fin... Llevamos aquí más de dos horas y esto me esta cansando... ¿Dejarte vivir o matarte?... Mmm difícil-. Dijo Camila mientras caminaba alrededor de él.
-Ire a tomar aire fresco... Ver sus caras repugnantes me enferma-. Dije mientras me levantaba.
Salí de aquel almacén donde solo quedaba solo uno de ellos, no estaba dispuesta a dejarlos con vida, se merecen morir por todo lo que han echó.
Saqué un cigarrillo de mi chaqueta y lo prendi, después llegaron a mis oídos los sonidos de los gritos y los golpes que le daban mis amigas.
No estaba muy orgullosa de lo que hacia pero... Na me da igual, me recargue en la pared viendo el cielo, estaba un poco cansada, este mes fue muy duro de verdad, tomando en cuenta que... No me he alimentado.
Yo pensaba que solo era un lobo común, nadie me aviso que tenia que beber sangre... Se supone que eso es de vampiros y esas cosas.
Perotúnoerescualquierlobo..
Rodé los ojos al escuchar su voz, ya me estaba acostumbrando a ella, total ella viviría conmigo para siempre.
Sonreí cuando deje de oír sus gritos, parecen nenas pidiendo perdón, con un perdón no arreglan nada.
-Aquí estas-. Dijo Camila llegando a mi lado.
-¿A donde más iría?-. Dije con sarcasmo mientras ella me quitaba el cigarrillo.
-No lo se... Eres como un fantasma que huye en las noches-. Dijo y reí mientras tomaba mi rostro entre sus manos.
Camila tenia manchado el rostro de sangre, deslice mi lengua por mis labios al oler la sangre, ella me apretó a su cuerpo fuertemente.
-¿Cuanto tiempo?-. Pregunto mientas besaba mi cuello.
-Dos semanas-. Susurré apretando su trasero.
-¿Porque?-. Dijo cuando se separo y rompió mi blusa.
-No quiero matar a gente inocente... Y no beberé la sangre de esos imbéciles-. Dije cuando bajo y comenzó a besar mi abdomen.
-Bueno... Puedes Alimentarte de mi-. Dijo levantándose de nuevo.
-Me gusta tu idea-. Dije divertida.
-Vamos al coche... Aquí todos te pueden ver y tu solo eres mía-. Dijo empujandome.
-Tranquila mujer posesiva-. Dije cuando me aventó al asiento trasero.
-Te pondrás bien en unos momentos-. Dijo mientras se bajaba el pantalón y su bóxer.
Sonreí atrayéndola a mi, besando sus carnosos labios, sus manos tocaban mi pecho que seguía cubierto, senti una de sus manos bajar y dirigirse a mi entre pierna.
-Mmmm-. Gemi al sentir su mano adentrarse en mi ropa interior.
-Eres tan adictiva-. Dijo besando mi cuello.
-Deja de jugar-. Dije mordiendo su cuello.
-Lo que usted me pida-. Dijo y rasgo mi ropa interior.
-¡Mierda!-. Grite cuando se adentro en mi.
Comenzó a embestir rápidamente, podía escuchar claramente el sonido de nuestros cuerpos al chocar, agarre fuertemente el asiento mientras gemía.
Camila era demasiado agresiva en cuanto teníamos sexo, pero no me importaba me encantaba que fuera así.
-Eres... tan apretada-. Dijo alzando mis piernas para rodear su cintura.
Grite al sentir entrar más en mi, no se como diablos es una experta en esto, el coche comenzó a moverse por sus fuertes embestidas.
-Mas rápido Camila... Más... Si... Joder-. Dije alzandome un poco del asiento.
Camila sonrei con arrogancia, la tome por el cuello y la acerque para besarla y después morder su cuello mientras succionaba, lo cual provoco que ambas llegáramos al orgasmo.
Después de unos momentos nos vestimos, bueno... Tuvo que darme su chamarra e ir por un pantalón.
-Hola-. Dijo alguien y gire para ver quien era.
-¿Tu quien diablos eres?-. Pregunte viéndola de arriba abajo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Tu hermana... Marie-. Dijo ella sonriente.
-¿Que?-. Pregunté confundida.
-Nadie esta a salvo a partir de ahora... Cuidate que alguien te lastimara-. Dijo y después se perdió en el bosque.