Capítulo 19

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Las dos primeras semanas después del reencuentro entre la pareja había sido feliz, siempre que podían estaban juntas, entre los conciertos de ella, los estudios de la otra se las iban arreglando para hacer escapadas de alguna noche y vivir un amor como adolescentes que se sentían cuando estaban la una cerca de la otra. Los problemas antes causados habían pasado a segundo plano, nada más les importaba que la felicidad de la otra persona que tenían a su lado. Se amaban y eso se podía ver. Y después de esas dos primeras semanas vinieron otras dos en las que tampoco se habían separado, estaban más juntas que nunca, todo demasiado idílico, vivían la una para la otra, eran inseparables y eso era algo bueno que se podía ver a simple vista. Les encantaba ser el centro de atención de todas las miradas; pero solo a veces. Desde que se exponían mucho más los periodistas las habían dejado de perseguir de una forma buena. Solo alguna vez se les acercaban pero para hacerle preguntas a Gaga sobre su tour o fechas o si está grabando algún que otro videoclip o quizá trabajando en algún CD o probando sonidos pero nada referente a ellas dos, por suerte de ambas.


Habían pasado dos meses desde el reencuentro que habían tenido a principios de mayo, estaban en julio en un pequeño parón que estaba teniendo la famosa cantante para mirar a donde podían ir de vacaciones y la verdad que pudiendo ir a tantos sitios no lo tenían nada claro por lo cual decidieron algo muy sencillo, una casa en la playa una semana.

Nada más llegar a la casa de la playa Sandra se quedó con la boca abierta por lo grande que era, era toda blanca con un gran porque en la entrada y dos columnas y un jardín. Dentro de esta habían dos escaleras que subían al piso de arriba y en la habitación principal había una gran cama, con un vestidor, baño propio y una terraza muy grande con vistas a la playa y también desde allí se dio cuenta que había una piscina y un jacuzzi. Alguien la abrazó por la cintura y sin más se giró sobre sus pies para mirar a los ojos verdes de quien la estaba abrazando por la cintura.

-¿Te gusta?-ésta no contesto con palabras, sino que asintió para devorar la boca de Stefani. El calor en sus cuerpos iba subiendo poco a poco y notaban su entre pierna cada vez más mojada.

En la cama de esta gran casa lujosa decidieron entregarse la una a la otra demostrándose todo el cariño que se tenían y todo el amor que había. Después de la cama decidieron hacerlo en cada rincón de este lugar tan paradisíaco hasta que sus cuerpos no aguantaron más y se durmieron abrazadas la una a la otra entrando la noche a la luz de la luna.

Me enseñaste a querer sin fronteras (ficfan lesbi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora