Samantha Sullivan, quiere escalar poco a poco en RICHARDSON FINANCIAL y hacer su carrera profesional, antes de que su secreto se descubra.
Sin embargo, nunca espero que en su primer día se iba a encontrar al hombre con quien tuvo una aventura u...
El día había llegado, al fin era el evento de aniversario. Ese día se los dejaron libre para que llegaran a tiempo.
— ¿Sam estas segura que puedo ir?
— Por supuesto— respondió mientras secaba su cabello con el secador.
-¿Me veo rara?- cuestiono modelando su vestido.
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— Te ves increíble. Solo trenza tú cabello ¿Recuerdas esa trenza que te hiciste para ir al antro?- anna asintió -Usa esa y te veras perfecta.
— Esta bien. Luke no tarda en llegar— informo mientras se trenzaba el cabello.
No pudo evitar sonreír ante la mención del ojo azul, había pasado los 15 días más fantásticos del año a su lado. Luke Kramer, era su amigo de la infancia junto con Anna. Pero Luke, aparte de ser su mejor amigo, fue su primer novio con quien tuvo todas sus primeras veces (amor, besos, caricias, relaciones sexuales). Terminaron porque se sentían más cómodos siendo amigos que novios, y aun así tenían sus encuentros sexuales hasta que alguno de los dos estuviera en una relación.
Actualmente, había aceptado la propuesta de Luke. Ambos venían de un amor no correspondido y del corazón roto e iban a intentarlo. Durante esos 15 días habían salido a sus lugares favoritos en New York, y claro, el sexo no había faltado. Sin duda alguna, Luke Kramer era el mejor novio y amante que había tenido. Era un experto en el sexo y eso amaba de él, y también que la tratara como si fuese de cristal; sin duda un novio maravilloso.
— ¿Estas fantaseando con Luke, verdad?
— ...No se de que me hablas— dijo sonrojada y desviando la mirada.
— Sí claro— rió y termino de arreglarse.
Escucharon el timbre; Anna se dirigió a la puerta y abrió — Buena noche, Luke. Pasa.
— Te ves muy guapa, Anna— le beso las mejillas y le entrego una ramillete de rosas blancas.
— Gracias. Lo mismo digo— dijo sonriendo.
— ¿Le estas coqueteando a mi novio, Anna?— cuestiono la rubia.
— Preciosa— dijo viendo a su novia con ese sensual vestido. Siempre había querido a Samantha, con ella tuvo todas sus primeras experiencias.
Se sonrojo por lo sugerente de la mirada — Deja de mirarme así.
— No puedo evitarlo— la estrujó entre sus brazos y toco la espalda desnuda.
Un hormigueo invadió la zona que Luke toco y se sonrojo. Luke beso sensualmente a su novia — aghhh Vamos, tranquiliza tus manos.
— ¡Ya vayan se a un hotel!— grito Anna desde la cocina.
Ambos rieron y se soltaron — Te ves hermosa. Robaras las miradas esta noche.
— ¿En serio?
— Sí... Además— se aproximo y le susurro al oído — No puedo esperar para quitarte este vestido.
