Me tiró el té encima en cuanto intenté hablar con ella y salió corriendo.
Mailenne me dijo que por favor no se lo tuviera en cuenta, que era buena chica y no sabía por qué había hecho eso.
Pareció asustada cuando me senté a su lado, pero es que no podía seguir viéndola así.
El caso es que el té estaba ardiendo. Y ella se dejó el bolso.
Se lo di a Mailenne, claro está. Y de paso, le pregunté por ella.Tampoco me contó mucho. Simplemente me dijo que la conocían desde que era pequeña y que iba a Coff & Books casi todos los días. Aunque llevaba un par de semanas desaparecida. Hasta anoche, donde al parecer la humillaron y ridiculizaron todos sus amigos, dejándola tirada en la calle.
De ahí que no fuera a la fiesta.Tampoco estaba muy equivocado.
Y bueno, no hay mucho más.
No me cae bien, pero tampoco es que hayamos tenido una buena presentación."Hola, soy Morgan y este es mi té hirviendo"
No fue así. Ni siquiera dijo nada. Sé su nombre porque Roger me lo dijo.
Empiezo a pensar que todas las mujeres me odiáis.