Capítulo 1. La noticia

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Me levanté esta mañana, con el presentimiento de que algo muy malo iba a pasar. Me presento, soy Alice Becker, tengo 15 años, soy, bueno, de una estatura normal para mi edad, medio rubia, y con los ojos de color verde manzana. Y tengo una hermana,Natalie, un año mayor, que es todo lo contrario a mi, ella es alta, morena, con los ojos azules, y bueno, una fresita total. Ama el rosa, absolutamente todo lo que tiene es de color rosa, y de verdad, me causa náuseas. Cuándo baje a desayunar y encontré a Natalie llorando como si el mundo se hubiera acabado, supé que algo muy malo estaba pasando.

-Niñas, papa y yo, debemos daros la noticia de que vamos a estar viajando muchisimo este año, y por ese motivo, vais a iros a un internado en Boston, haced las maletas, os llevaremos alli esta tarde - Dijó mi madre

-Lo hacemos por vuestro bien, para que no paseis mucho tiempo solas, os queremos mucho - Nos dijó mi padre.

Y en fin, aqui estoy ahora, acabando de hacer las maletas. No puedo creer que nos hagan esto, solas nos las apañamos perfectamente, llevamos quedandonos solas en casa desde hace bastante, no es nada nuevo. Aunque en realidad, podría haber sido peor, podría haber sido un internado en otro país, almenos Boston esta cerca de Nueva York, donde vivimos. Cuando termino de meter todas mis cosas en las dos maletas grandes. Me visto con unos leggins negros, un crop top de flores, y unas Nike Air Max de color blanco. Me maquillo con delineador y rimmel y cepillo mi pelo liso. Bajo las maletas y espero junto a mis padres a la lenta de mi hermana, la cual estará arreglándose como si se fuera de boda. Cuando baja por la escalera, literalmente, me sangran los ojos. Lleva cuatro maletas, de color rosa. Y va vestida con una falda de color rosa chicle, con volantes ; una camiseta blanca, y una chaqueta de color rosa también. Unas sandalias, adivinad, rosas y los labios tambien del mismo color.
-Natalie, ¿no crees que llevas demasiadas cosas? - Pregunta mi madre, mirandola atonita

-¿Y no crees que llevas demasiado rosa? - Bromea mi padre

-Porfavor, necesito toda mi ropa conmigo, y no papa, nunca es demasiado rosa - Contesta Natalie.

Subimos las maletas al coche, las cuales casi no caben por culpa de la fresita que tengo como hermana. Después de aproximadamente una hora y media o asi, llegamos a un edificio viejo, con grandes jardines y mucha vegetación. El coche entra por un camino de piedras hasta llegar hasta la entrada principal, donde nos espera una señora, con aspecto muy formal, de unos 50 o 60 años.
-Señoritas Becker, bienvenidas a Berkley - Dijo ella muy amablemente.

-Señora Lewis, me alegro muchísimo de volver a verla, gracias por aceptar a las niñas a tan pocos días del inicio de curso - Dice mi madre

-Es un placer ayudar a antiguas alumnas, usted fue una de mis mejores Sarah - Dijo la señora Lewis.

-Niñas, esta es Rowina Lewis, la directora del centro, fué maestra mia cuando estudié aqui - Nos dijo mi madre.

-Querida, debemos irnos, niñas, portaros bien, os queremos muchísimo, nos vemos pronto - Dijo mi padre.

Después de despedirnos de ellos, subieron en el coche y se marcharón.
La señora Lewis mandó llevar nuestras maletas a nuestras respectivas habitaciones. Obviamente no estariamos juntas, porque yo iba a hacer segundo año, y Natalie, tercero. Nos enseñó las instalaciones, el edificio donde estaban las clases. Y después, diferentes edificios donde estaban las habitaciones de los alumnos. También habia un campo de baloncesto, de fútbol, piscinas, y en fin, un montón de cosas. Cuando llegué a mi habitación, la 3132. No habia nadie, ni tampoco ropa en los armarios, por lo que supuse que aun no habían llegado mis dos compañeras de habitación, ya que había tres camas. Me instale en una de ellas, y comencé a guardar toda mi ropa en el diminuto armario del que disponia. Entre al baño, la verdad estaba bastante bien, tenia tres armaritos, así que guardé mis cosas en uno de ellos. Cuando lo tuvé todo guardado me tumbé en la cama y me dediqué a hablar con mis amigas de Nueva York, que solo preguntaban cómo había ocurrido todo. Y hasta ahora, que son las siete y media de la tarde, y sigo totalmente sola en la habitación. Como si el mundo me escuchara, la puerta se abre, y por ella entra una chica pelirroja, con aspecto airoso, y una sonrisa en la cara.

-Hola, soy Emily, encantada - Dice ella mientras coje la cama de enmedio y pone sus dos maletas encima.

-Hola, yo soy Alice, pero puedes llamarme Ali, encantada - Digo yo

-Veo que no eres la típica clase de chicas que hay en este instituto, aquí son todas muy fresitas - Dice ella.

-Si, yo tengo una hermana así, pero no, eso de tanto rosa me causa náuseas - Le digo yo

-Si, a mí también, bueno bienvenida, la otra chica se llama Clarisse, y tampoco es una chica fresa, tranquila - Dice ella.

Las dos reimos y charlamos mientras ella guarda sus cosas, ella es de Michigan, y tiene mi misma edad. Cuando son las 9, salimos de la habitación, y vamos a cenar a la cafetería. Todo, absolutamente todo, son niños y niñas fresas, de verdad, este internado va a ser un aunténtico infierno. Nos sentamos en una mesa en la que hay dos chicas y cinco chicos. Ellos tampoco tienen pinta de ser fresas, seguramente serán los únicos en todo el instituto que no lo son.
-Chicos, os presento a Alice, Alice, ellos son Matt, Lucas, Trevor, Cintya, Col y Lexie - Dice Emily mientras nos sentamos.

-¿No serás una fresita no? - Dice Lexie

-Antes me muero - Le respondo.

Todos rien y luego se presentan un poco individualmente. Matt es super amigable, estoy segura que seremos grandes amigos ; Lucas es el gracioso, de verdad esta muy descelebrado ; Trevor es el mujeriego, el más ligón, pero también el mas atrayente de todos los chicos ; Después esta Col, que es un poco badboy, aunque en realidad es muy simpático. Y por último estan Cintya y Lexie, mejores amigas desde los 5 años, y sus padres las enviaron aqui juntas el año pasado. En la cafetería hay un gran escandalo formado por toda la gente que allí se encuentra, pero de repente, todo el mundo calla y miran hacia la puerta. Por ella entran un grupo de personas. Delante del todo, la rubia mas oxigenada y fresita que he visto en mi vida, y el chico mas sexy del mundo entero. Aunque el me cause náuseas ya que tiene la actitud de "Soy el mas arrogante del mundo y lo sé, todo el instituto esta a mis pies" Es el típico chico guapo, con buen cuerpo y popular que se cree el centro del universo y no lo es. Aunque remarco lo de que es tremendamente sexy. Fija su vista en todas las chicas que ve por el camino, lo que encima le da un aspecto de mujeriego asqueroso. Cuando fija su vista en mi, pone una cara extraña porque yo no me quedo mirandolo fijamente babeando comp las demás, si no que ruedo los ojos y le ignoro. No llevo ni un dia aqui, y ya me quiero suicidar. Mi hermana se ha unido a un grupo de fresitas extremas, y charlan todas felices mientras hablan sobre el rosa y se pintan las uñas.

-Alice, esos son Tyler y Summer Smith, los hermanos mas populares de todo el instituto. Todas las chicas babean con Tyler y todos los chicos quieren tirarse a Summer, son la envidia del mundo, aunque son, bueno como, todos los demás- Dice Lexie mientras mira a un chico que hay al lado de ese tal Tyler.

-¿Y el chico que esta a su lado? - Preguntó yo

-Pues seguramente, el único de ese grupo que no es fresita, Connor Havins, el mejor amigo de Tyler, y el amor platónico de Lexie - Dice Emily mientras toca mi brazo para llamar mi atención.

-Nunca les mires directamente a la cara, intenta no mantener contacto visual con ellos y nunca les niegues nada, aqui son los reyes, ellos mandan sobre todos - Dice Cintya.

Un Infierno Llamado BerkleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora