Un Infierno Llamado Berkley

Capítulo 26 Por los pelos

Madre mía, ahora mismo creo no haber estado tan jodida nunca, esto es una mierda.
¿Se puede saber que narices hace un maldito loco con una pistola cojiendo por el cuello a una chica?

-Hey, suéltala idiota, ahora mismo - Tyler se acerca, haciendo que el tío deje de apuntar a la chica y lo haga con mi novio.

-¿O si no que? - Me pongo al lado de él - No voy a soltarla hasta que esta zorra acepte acostarse conmigo y me haga una buena mamada.

Siento mi sangre hervir... No pienso dejar que esta chica pase lo que yo... Bueno, que no quiero lo pase mal y punto.

Me acerco hasta dónde esta Tyler y miro a ese idiota.

-Tu, maldito machista hijo de puta, suéltala ahora mismo, si no quiere tener sexo contigo te jodes y buscas otra chica, pero no hagas eso jodido hijo de puta.

-Maldita perra asquerosa - Es lo único que oigo antes de sentir un dolor grande en mi barriga y empezar a ver un poco borroso.

[•••]

Despierto en una habitación de hospital, parece que se ha convertido en costumbre estar en estas malditas salas.

Puedo sentir como una mano coje la mía y no deja de decirme cosas. Es extraño, estoy despierta y oigo lo que pasa a mi alrededor, pero no soy capaz de abrir los ojos.

-Escúchame muñeca, todo esto es una mierda, una gran mierda, no sabes lo jodidamente culpable que me siento, y la maldita falta que me haces, has sido mi primer amor, y te necesito a mi lado, se qué ahora si me estas oyendo vas a pensar que soy un maldito cursi, pero es la verdad, te quiero Alice Becker, te quiero más de lo que nunca pude imaginar, así que te tienes que poner bien ¿me oyes? Te tienes que poner bien porqué necesito volver a tenerte a mi lado.

Quiero abrir los ojos y besarlo, decirle que yo también le quiero y besarlo, pero no puedo, mi cuerpo no reacciona.

El suspira y deja un pequeño beso en mi frente antes de salir de la habitación.

Al día siguiente ya puedo abrir los ojos, y lo primero que veo cuando los abro son los preciosos ojos de mi novio mirándome con una maldita sonrisa que hace que me den ganas de levantarme de esta mierda de cama y besarlo hasta morir.

-Hey, ¿como estás? - Me da un beso en la mejilla y yo lo miro totalmente enternencida.

-A parte de que he tenido una bala en mi estómago, supongo que estoy bien - El me mira divertido antes de reír un poco.

-¿Supongo que querrás saber qué pasó después verdad? - Yo asiento y el toma asiento a mi lado.

-Veras, Matt se lanzó encima de el, le quitó el arma y por poco lo mata a golpes, obviamente después de eso finalizamos con la fiesta y actualmente tu casa esta como nueva, supongo, han pasado dos días desde entonces, al parecer perdiste mucha sangre y por eso has estado dos días en coma.

Yo asiento intentando comprenderlo todo, hasta que finalmente suspiro y sonrío tristemente.

-Supongo que mi fiesta no fué tan bien como yo esperaba - El niega rápidamente con una sornisa dulce.

-De eso nada dulce Alice, tu fiesta ha pasado a la historia, cientos de revistas y programas de cotilleos han hablado de ella y la hab catalogado de la mejor fiesta en la que han estado nunca, así que por nada del mundo pienses eso porqué cariño, ha sido la mejor fiesta en la que he estado nunca.

Yo sonrío mas y después seguimos hablando durante algunas horas hasta que el doctor viene.

-Buenas tardes señorita Becker ¿como se encuentra?

-Estoy bien doctor, a parte de que me han disparado, supongo que estoy perfecta - El sonríe un poco y toma asiento cerca de mí.

-Cuándo la operamos pudimos ver que usted tiene una herida en su abdomen que aún está curándose - Yo asiento - ¿ha tenido algun problema con esa herida?

-Vera doctor, me cayó un foco de los de los escenarios encima porqué una loca chica de mi internado no me soporta porqué soy mejor que ella en todo y aquel día decidió tirarme encima aquello para intentar matarme supongo - Veo como Tyler ríe un poco y yo lo fulmino con la mirada.

-¿Cuánto hace exactamente de eso? - Yo empiezo a contar los días exactos, llegando a la conclusión de que hará alrededor de unos diez días.

-Tal vez una semana y media, puede que un poco más.

El abre los ojos sorprendido y me mira antes de volver a hablar.

-Señorita Becker, por lo que veo su vida es una locura, pero ha tenido dos accidentes de gran gravedad en dos semanas, le pido que intente dejar la vida loca adolescente a un lado y se recupere de sus heridas correctamente - Yo asiento y el se pone a escribir algo en su libreta.

-Bien, aquí tiene los antibióticos que deberá tomar durante el próximo mes y las pomadas que quiero que se ponga en ambas heridas, cuídese señorita Becker - Le tiende el papel a Tyler - Puede irse en el momento que quiera.

[•••]

- Muñeca, quiero que sepas que todavía tengo que darte mi regalo de cumpleaños.

-Tyler, te dijé que no hacía falta que me regalarás nada - Andamos por la calle de camino a la casa cojidos de la mano.

-Me da igual, fué tu cumpleaños y como buen novio te he hecho un regalo.

-¿Y que es? Si se puede saber - El me sonríe dulcemente.

-Deberás esperar para llegar a casa y verlo.

Yo asiento no muy convencida y seguimos andando por las calles de Malibú hasta que al fin llegamos a mi casa.

Mis amigas me reciben con un fuerte abrazo, y todos los chicos también.

-Te hemos comprado pizza, helado y regalices de colores - Miro con corazones en los ojos a mi mejor amiga, que tan sólo rie y me guía hasta la cocina, dónde hay una maravillosa mesa llena de comida solo para mí.

No hay duda, tengo a los mejores malditos amigos del mundo