Bitch In Troubles {2}

13.

Llego corriendo al hospital donde se encuentra Brianna, pregunto en recepción por ella y me dicen que acaba de entrar al quirófano. Sin importarme corro hacia allá, unas personas que trabajan allí me impiden entrar pero yo sigo tratando hasta que me calmo.

-Está bien, está bien.

Me dirijo a la sala de espera que está casi vacía y me siento en una silla a esperar.

“Por favor que esté bien”.  Me repito a mi mismo continuamente.

Todo esto es mi maldita culpa, si no la hubiese tratado de tal manera ella no estaría en ese quirófano y yo no estuviese aquí llorando. Hubiésemos tenido sexo y todo estaría de maravilla.

¿Por qué no he aproveché mi tiempo con ella? La he extrañado tanto estos días, necesitaba de su apoyo en mi examen, de su increíble carisma, de su espectacular cuerpo... La necesito.

Por favor, que esté bien.

La amo demasiado, todavía la amo. No estoy cansado de ella, ¿por qué dije esa estupidez el otro día?

El estar aquí sufriendo por ella me hace darme cuenta de no quiero una vida sin ella. No soy el mismo sin su amor.

Ya son las tres de la mañana y sigo aquí esperando. He llamado a mis padres y ya vienen en camino. Ojalá Brianna pudiera tener a personas así en su vida.

–¡Scott! -Volteo. Es mi madre. Viene hacia a mi junto con mi padre. Ella me recibe con un gran abrazo el cual no puedo soltar. –Todo estará bien. -Dice susurrándome al oído. No dejo de abrazarla. Incluso,  broto algunas lágrimas.

–¿Qué fue lo que pasó? -Pregunta mi papá.

Río un poco nervioso.

–Yo había terminado con Brianna y...

–¿Qué? -Grita mi madre.

–Calmate mamá.

–Eres estúpido Scott, ¿cómo pudiste terminar con ella?

Ruedo los ojos exasperado.

–Cariño, -interviene mi padre.- dejalo terminar.

–Bueno... -Sigo con mi relato.- Termine con ella, y esta noche me la había encontrado en un bar, estuvimos hablando y fuimos a su apartamento, -Obvio la parte del trío.-
empezamos a discutir y ella cogió las llaves del auto y se fue. Yo estuve llamándola pero no contestaba y... -La voz se me quiebra un poco. Mí padre me da una palmada en la espalda.- Luego me llamaron y me dijeron que tuvo un accidente.

Quedamos en silencio y dejamos que nuestros pensamientos nos invadan.

–¿La familia de Brianna Grayson?

–¿Si? -Respondo al instante.

–Sus padres, ¿son ustedes? -Señala a mis padres.

–No. -Respondo.- Sus padres fallecieron.

–¿Ustedes quienes son?

–Soy su no... Su prometido.

–Brianna está en buenas condiciones, solo tuvo unos leves golpes por el impacto, pero nada grave. Le podremos dar de alta hoy en la tarde. Si quiere puede entrar a mirarla.

Miro a mis padres nervioso y ellos me hacen una señal de que vaya.

Voy con el doctor hacia la habitación, él me deja sólo. Titubeo antes de entrar. Cuando lo hago, la miro, allí está.

–Brianna. -Digo soltando un aire que no sabía que tenía contenido.