Nuestra Promesa [Creek]

Cap. 6

El rubio comenzó su día como lo hacía normalmente; despertar, bañarse, vestirse, desayunar y tomar unos cuantos medicamentos. La única diferencia en su rutina fue que al salir de casa había alguien que se encontraba de pie esperándolo.
-¡Agh! ¿C-craig, que haces aquí?
El mayor se quitó los audífonos y echó su cabello hacia atrás al darse cuenta de la presencia de Tweek.
-Por fin sales, llevo horas aquí- suspiró- ¿nos vamos?
El menor asintió, bajó los escalones de la entrada con un saltito y los dos comenzaron a caminar.
-¿P-por qué decidiste esperarme hoy?
-Éste es el camino que tomó normalmente y al pasar por aquí recordé que tu casa estaba cerca entonces sólo se me ocurrió.
-Oh, entonces, gracias.
Sonrió,a lo que el otro se sonrojó al instante y desvió la mirada.
                           * * *
El azabache soltó un largo bostezo al mirar la ventana, el cielo estaba algo nublado y eso significaba que tal vez no podría ver las estrellas esa noche.
Un movimiento brusco en los arbustos llamó su atención, entre las hojas pudo ver como alguien asomó su cara. Era Tweek.
-¿Pasa algo, Tucker?- preguntó el profesor al ver como el mayor levantó la mano.
-No me siento muy bien, permítame ir a la enfermería a recostarme.
-Por supuesto, puede ir- todos comenzaron a quejarse-silencio, deberían aprender un poco del señor Tucker, él es un genio.
Salió y se dirigió rápidamente hacia el jardín del colegio.
Se puso a buscar entre los arbustos aquel nido de cabellos rubios pero no lo encontró por ningún lado.
-¡Agh! Estoy aquí arriba.
Miró hacia donde provenía la voz y se encontró con el menor subido en un árbol, sentado en una gran rama y temblando como era de costumbre.
-¿Qué haces ahí?
-E-eso no importa-la mirada acusadora de Tucker lo hizo ponerse nervioso- bien, quería saltarme las clases.
-Déjame decirte que se te da pésimo, pude verte desde la ventana de mi clase.
-¡Agh! Ya lo se, soy un fiasco para esto- comenzó a tirar de sus cabellos, en realidad hace mucho que no hacia eso.
El azabache suspiró, dio unos paso hacia atrás y corrió hacia el árbol, a penas saltó se aferró de la rama y subió.
-Debes dejar de arrancarte el pelo de esa manera, algún día vas a quedarte calvo- dijo en cuanto se sentó a lado del rubio.
-L-lo se.
Los dos se quedaron callados, cada quién admirando lo que les parecía interesante. Tweek tenía demasiadas preguntas que quería hacerle a su compañero, pero no quería arruinar ese momento de paz.
-¿Tomas todos los medicamentos que tu madre compra para ti?-preguntó de pronto el mayor.
-Ella me obliga, pero en realidad no tengo nada ¿verdad?.Tú sabes que sólo soy un poco distraído.
-No voy a negar que tienes algo, Tweek.
-¿Ahora eres tú también?-rió mientras sentía como las lágrimas amenazaban por salir- por esas estúpidas cosas mi memoria ya no está bien, por si no te diste cuenta casi pierdo todo recuerdo de ti.
-Pero no lo hiciste y por si tú no te diste cuenta ahora estamos sentados aquí saltándonos las clases.
El rubio comenzó a llorar de manera descontrolada. Quería cambiar su vida; odiaba que sus padres tirarán su dinero en medicamentos innecesarios, quería dejar de ser tan indefenso y a la vez tan idiota. Quería que Tucker no le tuviera lástima.
-¿T-tú te preocupas por mi?- preguntó en cuanto se calmó un poco.
-Mira- tomó la mano del menor y la colocó en su pecho- ¿crees que si no me preocupará por ti mi corazón latiría de ésta forma?
-Algunas veces también me pasa a mi- comentó aún en la misma posición- pero sólo cuando estoy contigo.
El azabache sonrió ante el comentario, se giró completamente hacia él y entrelazó sus dedos a con los del menor.
-Tweek- al escuchar su nombre, el otro se tensó al instante.
-¡Agh! ¿Qué pasa?
-Me gustas
-¿En serio?- el rubio sonrió- tú también me gustas, eres muy buen amigo
-No me refiero a eso tipo de gustar...
-¡Agh! ¿Entonces?
-Me refiero a esto
El mayor lo tomó del rostro y pegó sus labios con los de él, Tweek no supo como reaccionar ante tal acción así que sólo se quedó ahí sin moverse. El otro al darse cuenta se separó al instante.
-Craig...- dijo a penas en un susurro.
-¿Estuvo mal?
-¡Agh! Claro que estuvo mal, ahora ya te pegué todos los gérmenes que tengo- tiró de su cabello por la desesperación.
El azabache rió y bajó del árbol, se sacudió el suéter y miró a su compañero.
-Tweek Tweak, oficialmente puedo decirte que estoy enamorado de ti y por eso quiero pedirte una cosa.¿Saldrías conmigo?- preguntó mientras hacia una reverencia.
-E-está bien, Craig, saldré contigo.
-Espera,ni siquiera lo pensaste, ¿estás seguro?
-¡Agh! Claro, por fin podré estar a tu lado la mayoría del tiempo y nadie se meterá conmigo.- bajó del árbol y corrió a abrazar al mayor.
-Así es, Tweek, prometo que nadie se meterá contigo nunca más- hundió su cara en aquel nido de cabellos rubios- nadie.