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Algunos dicen que se suicido, otros que la mataron, que se perdió o que simplemente sigue entre nosotros, solo que no la vemos, pero todas esas versiones son falsas. Yo realmente se lo que paso y  me arrepiento tanto.

Camila es preciosa, no necesita del maquillaje para demostrarlo, pero aun así ella usa su labial rojo que la hace ver viva. No era de un buen peso, pero eso no le impedía verse linda, pero al parecer, ella no se consideraba de esa forma. Su castaño y quebrado cabello la hacían ver aun mas hermosa. Sus ojos, esos hermosos ojos cafés los cuales eran la entrada perfecta al infierno. Todo en ella es bueno, no era la mas popular, pero tenia amigos, había tenido algunos novios, pero se volvió en una persona fría, y no la culpo, ha pasado por tantas cosas mi pequeña.
Es inteligente y atenta, es por eso que los profesores le daban su confianza, y ella sabia de eso, no los defraudaba, su familia debe de sentirse orgullosa de ella, y si no, yo lo estoy por ella sin importar que.

Mientras caminaba por los pasillos para llegar a mi clase la vi con sus libros muy deprisa, cuando paso a un lado de mi llama mi atención el hecho de que son varias de la misma materia y lo primero que pensé fue en que había realizado la tarea de sus "amigos", otra vez.

-Pobre, ya esta mortificándose con algo que no le pertenece. - susurré.
-¿Has dicho algo?- preguntó Mane, mi mejor amigo, quien de repente apareció a un lado de mi sin darme cuenta.
-Nada.

Cuando entre al aula, sus amigos estaban como siempre en el rincón haciendo escándalo, muy tranquilos. Tome mi lugar que era en la otra esquina y comencé a platicar con Mane sobre lo que había pasado ayer por la noche en casa.

-¿Es broma?- me dice mientras me río.
-Claro que no, enserio paso eso anoche en la cena con mi madrastra y mi padre.- me sigo riendo y paro en cuanto veo a Camila entrar al aula entregando las libretas a sus amigos. El profesor llego y todos se sentaron, en el total silencio el profesor Armando alzo la mano, dándonos a entender que entregáramos las libretas, pues ya iba a revisar los trabajos.
-¿Ya son todos?- pregunto el profesor al recibir la mayoría de las libretas del grupo.
-¡Espere!- hablo Camila apurada.- Falto yo.
-Cinco minutos, no mas señorita.- finalizo el profesor. Camila se levanto y entrego su libreta.- Gracias, para la otra, solo llegue y entregue no nos demore.
-Esta bien.- dijo ella.

Toda la clase se quedo en silencio, el profesor se levanto del escritorio y comenzó a poner trabajo en el pizarrín, así que en toda la clase solo se dedico a revisar las tareas y al final comenzó a explicar las dudas que tuvimos durante el trabajo, todos prestábamos atención puesto que era uno de los maestros que mejor daba su clase a pesar de su carácter, lanzaba algunas preguntas y quienes las respondieran bien les daba puntos, Camila fue quien se llevo la mayoría junto con otra chica. En cuanto el timbre sonó, el profesor repartió libretas, dio unas ultimas indicaciones y todos salimos, menos el grupito en el que Camila se juntaba.

-Espera.- le dije a Mane, el no entendía nada hasta que señale al grupito, así que hicimos  como que aun guardabamos nuestras cosas.
-Para la próxima esfuérzate mas, no quiero un 7 en mi boleta idiota.- le dijo el "jefe" del grupito, Iván.
-Por eso nadie te quiere.- agrego su seguidor, Rafa. Entonces se rieron y se fueron, menos Camila, quien se quedó con Marco, uno de los chicos del grupito que pasaba mas tiempo con ella, aunque lamentablemente, temía de Ivan y lo obedecía.
-¡Marco! Vayámonos.- dijo Iván regresando al salón.
-Nos vemos mas tarde.- dijo Marco y salio con Ivan. Cuando dieron el segundo toque, Camila salio con lágrimas en los ojos. Su mirada triste chocó con la mía, no dijo nada, ni yo lo hice, ni mucho menos nos dedicamos un gesto, ella se fue y yo se lo permití,aun sabiendo que yo podría ayudarla a no sentirse de la forma en la que se siente y la hacen sentir. Espero algún día hacerla ver lo que mis ojos ven en ella y que me llegue a perdonar por todo.
-No entiendo porque Marco dice ser su amigo, si la deja sola.- menciona Mane algo molesto.
-Ni yo lo entiendo, pero es Iván, ya veras que lo haremos bajarle a sus humos.
-Tampoco entiendo como tu lo puedes soportar en tu casa, debe ser un infierno tenerlo como hermanastro.
-Ni me lo menciones, pero afortunadamente desde que sale con Victoria no lo veo mucho.
-Amén. 

Mane y yo caminamos a nuestros casilleros, cambiamos de libretas, nos despedimos y caminamos por separado a nuestra siguiente clase a pesar de que ya habían dado los 3 timbres, bien dice que uno nunca llega tarde, sino que todos llegan antes de tiempo.

Al final de las clases, Mane me acompaño a mi entrenamiento de porristas puesto que en unas semanas se jugaría un juego importante para nosotras y claro, para los jugadores ya que habría caza-talentos brindando buenas becas universitarias y no solo para nosotros, también para quienes tienen buen promedio y están dentro de algún taller, así que todos saldríamos ganando. Mi mejor amigo me veía desde las gradas mientras comía papas fritas con queso y adelantaba las tareas en compañía de otros amigos, inclusive ayudaban con los cantos.

-¡Deberían audicionar!- grita el entrenador.
-¡Lo tomaremos en cuenta!- responde Julio.-¡Les vamos a quitar su lugar chicas!
-¡Chicas, vamos a demostrarles que podemos mas que los chicos, que no solo somos caras bonitas!- animo Victoria, la mayor del team, así que realizamos de nuevo la coreografía pero con mas energía y ganamos.- ¡Así se hace chicas! Okay, ahora solo daremos un ultimo repaso y...
-¡Victoria!- interrumpe Camila corriendo hasta donde esta ella.- Lamento la tardanza, yo...
-"Yo" nada Camila, llevamos aquí una hora ensayando, todas somos puntuales para poder seguir con nuestras actividades, no nos quedaremos mas tiempo ni cambiaremos el horario de ensayos solo por tus impuntualidades, lo lamento, solo daremos un ultimo repaso y nos iremos, si en el próximo ensayo no estas aquí puntual, tendré que suspenderte, ¿okay?- Camila solo asintió con la cabeza, dejo sus cosas en la banca y se incorporo a su lugar.- Vamos desde arriba chicas.

El ensayo termino, cada una camino hasta donde estaba sus cosas, yo me dirijo hacia donde esta Mane, tomo una de sus papas y tomo asiento para ver como el campo se va desalojando.

-¿Hubo problemas allá abajo?- pregunta recogiendo sus cosas.
-Ne, solo el asunto de que Camila llega tarde y que si no llega a tiempo el próximo ensayo ya estará suspendida.- explico.- Pero mejor vayámonos, debo de hacer tarea y muero de hambre.- comenzamos a bajar las gradas e Iván me detiene.- ¿Ahora que?
-Nada, debemos irnos a casa, anda, vayámonos.
-No es necesario viejo, yo la llevare.- comenta Mane y es cierto, siempre ha sido el quien me lleva a casa después de los entrenamientos, no entiendo la insistencia de mi padre en que este con Ivan.
-¿Que estas sordo? Yo la llevare, su padre me lo ha pedido, despídete y vayámonos Jaqueline.
-Ne, me voy con Mane.- respondo.
-Si tu padre sabe que no te lleve, me matara.- comenta.
-Pues se esta tardando, yo me voy con Mane, adiós, vamonos amigo.

Tome la mano de Mane y caminamos hacia su auto dejando a Iván  solo y molesto en las gradas, ni estando loca pasare tiempo con ese sujeto.

Lo Que Fue De Ella.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora