CAPITULO VI. parte dos.

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-Bruno. –Pronunció, al mismo tiempo que depositó el portarretratos en su lugar con cierta torpeza, para luego limpiar rápidamente con su dedo pulgar aquella lágrima en su rostro. -Sí, todo bien. –Respondió, volteando para mirarlo.

-Mirá lo que traje. –Cambió de tema él luego de mirarla unos segundos, ahora bajando la mirada a la bandeja. 

-Qué rico. –Sonrió apenas Mica, tomando uno de los vasos con jugo. 

-¿Merendamos? –Preguntó él, dejando la bandeja en la cama. -Después te ayudo a seguir ordenando. –Ofreció, ahora acercándose para dejarle un beso en su mejilla, ya que los labios de ella no se encontraban disponibles debido a que le estaba dando un gran sorbo al jugo.

-Dale. –Fue a sentarse a la cama, frente a la bandeja, y él la imitó.

En la casa de los Nayar, Nacho estaba recostado en el sillón de dos cuerpos con el control remoto en sus manos, mirando el canal de deportes; el único ruido siendo el que provenía del televisor. En ese momento, su hermano irrumpió en el living, llegando y terminando con aquel ámbito armónico en el que se encontraba.

-Nacho, ¿qué haces? –Improvisó un inicio de diálogo Ramiro.

-¿No es obvio? –Respondió Nacho, sin despegar su vista del televisor.

-Me refiera a si vas a hacer algo ahora… –Arregló Rama. -¿Tenés algún plan?

-No. –Lo miró. -¿Qué querés?

-¿Tengo que querer algo? –Cuestionó. -Te estoy preguntando, nada más…

-Está bien. –Cedió enseguida Nacho con desinterés volviendo la mirada al televisor, pero sabiendo que su hermano quería algo.

-Igual, si no tenés nada que hacer nos podés acompañar a Estefi y a mí al cine. –Insinuó, intentando parecer relajado.

-No, no me va la idea de ir a hacer mal tercio. –Rechazó, todavía con la mirada fija en el partido. -Pero gracias por la invitación.

-Podés invitar a Francheska si querés. –Sugirió, mencionando a la nueva amiga de Nacho.

-No. –Volvió declinar.

-¡Vení con nosotros! –Ordenó ahora exaltado Rama, arrebatándole el control y apagando el televisor para acaparar la atención de su hermano. -¡Por favor!

-Yo sabía que la invitación no era casual. –Rió Nacho, por fin mirándolo. -¿Por qué estás tan desesperado por que vaya con ustedes?

-La película que quiere que miremos es malísima. –Se rindió. -Es romántica, no quiero ser el único pasándola mal… necesito a alguien para que me acompañe en sentimiento. –Explicó.

-A medida que hablás, la invitación se hace cada vez menos tentadora. –Advirtió. -Pero como soy buena persona, te voy a acompañar. –Aceptó finalmente. -Invitalo a Gonza para que se una al sufrimiento. –Propuso.

-Dale. –Coincidió, sacando su celular de su bolsillo. -Mejor les aviso a todos. –Resolvió Ramiro, abriendo la conversación en whatsapp que se titulaba “Ohana significa familia”, grupo que integraba con sus amigos.

¿Pinta cine esta noche? –Envió Rama.

¡¡¡Sí!!! –Fue Bianca la primera en responder.

Nico y yo también vamos. –Agregó Flor.

Paulita se está bañando ahora, pero seguro dice que sí. Y yo también. –Aportó Paio.

¿Qué peli vemos? –Interrogó Gonza, sumándose de manera implícita.

“Yo antes de ti” –Escribió Rama, y apretó enviar.

¡Ay, sí! Tenía muchas ganas de ver esa película. –El mensaje de Flor demostraba entusiasmo.

Me salvaron de tener que ir a verla solo. –Adhirió Nico, dando a entender que su novia le venía insistiendo para ir a ver dicha película. Ramiro sonrió ante aquel mensaje pensando en que seguro él y Florencia estaban juntos, y sin embargo escribían los dos en la conversación.

No te tenía así de romántico, Ramita. –Envió Bian.

No soy yo, Estefi me obliga a mirarla. –Explicó Rama.

¿Me están jodiendo? ¿Una película romántica? –Cuestionó Gonzalo.

Ya sabemos que te gustan las películas románticas Gonzalo, dejá de hacerte el macho. –Reprendió Bianca.

¿Puedo ir con Bruno? –Preguntó Mica.

Ramiro levantó la vista de su celular para posarla en su hermano, quien tenía la mirada en su propio celular, ya que iba leyendo la conversación a medida que ésta se iba efectuando pero sin escribir para participar de ella. Cuando observó que Nacho no demostró ningún tipo de reacción, volvió a fijar la mirada en su teléfono.

Sí, Mica. Obvio. –Escribió el único melli que hasta ahora había hablado en el grupo.

Luego de esto, Nacho sacó la conversación grupal y abrió la conversación que compartía con Francheska en whatsapp. La invitó a ir al cine con él y sus amigos, y ella por supuesto aceptó encantada. Cada vez que Nacho la invitaba a hacer algo, no desaprovechaba la oportunidad, porque sabía que no ocurría seguido, ya que por lo general era ella quien iniciaba las conversaciones entre ambos. 
La película empezaba a las diez de la noche, por lo tanto Micaela y Bruno ya estaban camino al cine ya que el reloj marcaba las nueve y media. Querían ir con tiempo para poder encontrarse entre todos un rato antes, y así tener la posibilidad de comprar lo que iban a comer y beber durante el film.

-¿Me vas a contar que te pasó hoy o no? –Indagó Bruno, sin quitar la vista del frente.

-¿Qué? –Inquirió Mica, desconcertada.

-Estabas llorando. –Esclareció brevemente.

-No estaba llorando. –Se apresuró a responder ella, ahora entendiendo y mirando hacia abajo.

-Sí estabas llorando. –Contrarió él. -Y por Nacho. –Agregó.

-Nacho no tiene nada que ver. –Contestó Micaela a la defensiva.

-Mica, te vi mirando una foto de él mientras llorabas, ¿me lo vas a negar? –Preguntó, ahora mirándola, ya que había frenado en un semáforo en rojo.

-No. –Se dio por vencida, suspirando.

-¿Entonces? –Arqueó una ceja. -¿Por qué llorabas? –Insistió, poniendo nuevamente el auto en movimiento luego de la luz verde.

-Las cosas entre Nacho y yo no están muy bien últimamente. –Sintetizó Mica; no quería contarle a Bruno cómo era la situación con su amigo.

-¿Se pelearon? –Quiso saber un poco más.

-No. –Negó, mirando por la ventana.

-Si no me contás no puedo adivinar, mucho menos ayudarte.

-No quiero hablar del tema. –Respondió Micaela, ahora mirándolo.

-¿Por qué no? –Bruno estaba empecinado en entender lo que sucedía.

-Porque no, Bruno. –Contestó tajante. -Yo vine acá para distenderme y pasarla bien, no quiero hablar de algo que me va a bajonear. –Finalizó.

Apenas Micaela terminó de pronunciar la última palabra, llegaron al cine. Bruno estacionó el auto, y luego ambos bajaron. Micaela intentó olvidarse de lo de recién y recuperar la buena predisposición que tenía hasta hace unos instantes cuando Bruno decidió insistir con sus preguntas. Él, por su lado, llevaba cara de pocos amigos; le molestaba que ella no confiase en él. 

Buenas bombonazxs, como están??? Yo muy bien 😆 Vieron que temprano estoy actualizando, todo por ustedes jaja 🙈 Muchas pero muchas gracias por sus votos y comentarios, tan lindos como siempre 😍😍. Hope you enjoy, lxs quiero. Les mando un beso enorme 💘😘

Perks of being friends {Nachoela}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora