Los siete Esab

14 1 0
                                    

Después de un día lleno de emoción todos se fueron a dormir, solamente Alonne paso la noche en vela, sentado frente a su ventana. Veía la luna y las estrellas y recordaba las palabras de Elí y se mordía los labios de rabia. –vengo a tomar su lugar como Seralip –

- Alonne – tonto, mi padre, nunca te escogerá a ti, primero yo sería...yo no puedo intervenir. pero, no lo soporto. No te lo are ten fácil mañana será otro día, antes de partir yo impediré que tu llegues a ser un Esab.

La noche paso rápidamente Alonne venia bajando las escaleras y se sostenía la cabeza, al levantar su vista vio a Aras hablando con Elí.

- Aras – tengo curiosidad de saber la razón por la que has venido a competir

- Eli – ya la sabrás

Cuando Alonne los vio, se enfureció más, Aras inmediatamente que lo vio, lo observo, su rostro lucia cansado y había una pequeña sombra bajo sus ojos, además una pequeña contracción de su frente hacía notar el dolor de cabeza que tenía.

- Aras – que habrá estado maquinando para traer esa cara joven Alonne

- Alonne – lo siento no eh dormido bien

- Eli - no has dormido

Para Elí eran evidentes los sentimientos de Alonne hacia él, realmente se sentía odiado por él.

- Aras – porque sigue aquí, las competencias pronto empezaran en Noro si no te das prisa no participaras

- Alonne – viajare junto a su padre señorita Aras, esta tarde después de la elección de los siete Esab

- Eli – te quedaras a ver

- Alonne – si veré si logras pasar

- Eli – eso no lo dudes

- Alonne – ya lo veremos

Ese día, el estadio del Oidatse estaba a reventar, el gran Seralip estaba vestido con el traje ceremonial, de pie esperando la entrada de los nueve que ese día competirían, Alonne estaba a un lado, solo observaba recostado en un pilar.

No te miras muy emocionado, este es un día muy importante para esta región, tú como mi hijo que eres deberías estar feliz.

- Alonne – lo estoy padre

- No lo parece

- Alonne – es solo que ese chico

- Te molesta

- Alonne – digamos que si

- No veo el porqué, este será el último día que le veas, hoy mismo tú te vas a Noro a competir y seguramente con tus habilidades serás uno de los Esab de Exilon

- Alonne – lo sé. Padre ¿si ese chico no es digno, tú no lo elegirás como uno de tus Esab verdad?

Claro que no, debe ganar su lugar, pero, si es digno esta tarde será uno de mis Esab, entiendes

- Alonne – si padre, lo entiendo

La multitud grito al ver entrar al estadio del gran Oidatse a los aspirantes a Esab, todos se pararon en línea frente al gran Seralip.

- Sean todos bienvenidos a la gran elección de los siete Esab, para mi ustedes nueve ya son dignos, pero, solamente pueden haber siete Esab, Este día solo habrán dos pruebas una de ellas será espiritual y la otra será intelectual, yo les deseo suerte a todos

Soul Saga: El seralip de noroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora