Una aspiración universal , pero muchas veces pretendemos obtenerla por medio de nosotros mismos, sin embargo, ni siquiera nos entendemos completamente, por lo tanto, ¿cómo no fracasar por conseguirla? Pues solo siguiendo el camino de Dios...
Si abrimos nuestro corazón y nos damos una oportunidad en conocerlo, te darás cuenta que es cierto , ya que tu corazón lo confirmara. Pues este importante órgano no solo late sangre para nuestro subsistir, sino que también está arraigado a las emociones profundas de nuestra apreciada alma. En cambio, nuestra mente usa estrategias primitivas de supervivencia y protección. Por eso , nuestra alma es realmente tocado cuando nuestro corazón es el que conoce a Dios o mejor dicho.. lo vuelve a recordar. Pero como justo nuestra alma es lo más apreciado de nuestro cuerpo, nuestra mente lo cuida ante cualquier ente desconocido y por eso, primero debemos permitirle de abrir nuestro corazón.
Y es que no hay mayor calidad y felicidad que el amor de Dios. Precisamente, este amor se ve reflejado en todas partes. En la sonrisa o abrazo de un amigo, en la paciencia de una madre o en el sol radiante de cada mañana. Resalta lo más bello que tenemos adentro, lo cual es mucho más fuerte y poderoso que nuestras debilidades. Qué haríamos sin este amor , cuyo potencial es mayor que la destrucción de una bomba nuclear , pues esta mata cuerpos pero no almas. Una persona sin afecto puede resultar peligroso, pues el odio y la amargura gobiernan su corazón.
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Un escrito para el alma
RandomSolo soy un viajero más de la vida que escribe lo que ha aprendido en su camino, que da consejos a los que quieren tomarlo, que previene lo que no hace falta disfrutarlo y que le gusta hablar desde lo más profundo de su corazón lo más sencillo ,pero...
