Me molesta que controlen.
Desearía vivir con menos restricciones, pues de pronto siento una carga difícil de llevar.
En el colegio me dan instrucciones todo el día. En la casa, mis padres me indican lo que tengo que debo hacer y no debo hacer ¡Hasta en el transporte! En la calle, a veces me tratan como si fuera un niño, y en otras ocasiones, especialmente cuando quieren que hagan o compre algo, me tratan como si fuera adulto.
Me gustaría que me dejasen vivir en paz. Toma mis propias decisiones sin tener que rendirle cuentas a nadie. Al fin y al cabo, ¿esta vida no se supone que es mi vida?Para reflexionar:
"Para los padres que aprecian la libertad de sus hijos valoran tanto la voluntad Autónoma propia del adolescente como su comportamiento disciplinado. Estimulan el intercambio verbal y, cuando ejercen la autoridad paterna a través de exigencias o prohibiciones, explican sus razones para hacerlo" (Diana Buamrund).
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Espejo Para Un Adolescente
Genç KurguMientras leas este libro, pensaras: ¡Esto es exactamente a mí me pasa! Si te reconoces en alguna de estas páginas, también puedes tener la seguridad de otros lectores mayores comenzarán a comprender mejor el mundo del adolescente, lo aceptaran y lo...