Solo quiero parar este dolor en mi corazón y continuar feliz. Un día como hoy llega todo el peso de los recuerdos a mí. No puedo contener las lágrimas. Solo quisiera olvidar y tener a quien contarle mis problemas. Amigos los cuales se preocupen por mí. Los recuerdos me han atacado. El dolor de un abuso llegó a mi, mi corazón palpita rápido y las lágrimas caen en mi pecho aumentando el dolor en mi corazón. Nunca le había dicho a nadie lo que duele ser abusada, maltratada, violada. Recuerdo ese día como si fuera ayer. Ese poco hombre encima de mi, tocandome con deseo y yo sintiendo asco, lástima. Han pasado años y el dolor sigue creciendo y creciendo en mi pecho como si fuera ayer. Me han faltado las ganas de vivir desde entonces, de seguir adelante, de luchar. El sufrimiento de perder lo más preciado para una mujer, con alguién que no conoces. Pensé que el dolor pasaría, que lo olvidaría y aquí estoy, en mi habitación sin poder respirar. Por eso odio los hombres, por eso no puedo ver a ninguno como mi futuro esposo, por eso mi cambio de gustos, por eso tú. Pensé que el dolor se iría si me enamoraba, pero me enamoré del dolor, del sufrimiento, del rechazo. Hoy, dejo salir mi dolor y por fin alguien más sabrá cuanto yo he vívido en tan poco. Quizás lo crean, quizás no. Pero solo yo sé cuanto me ha dolido. Dios, ¿cuanto más merezco para ser feliz? Hoy, solo quiero volar, llegar a un lugar donde pueda vivir en paz, morir. Por más que ría no soy feliz. Es que me dan ganas de reclamarle a Dios el por qué de mi sufrimiento, pero no puedo hacerlo, debo aceptar que las cosas pasan por qué sí y por que no. Le he cuestionado a Dios por que tuvo que pasar eso en mi vida, ¿cuál es el propósito? Solo tú mi Dios lo sabes. ¿a quién llamar? ¿a quién acudir? ¿quién me dirá que todo estará bien? Dime mi Dios, ¿quién?
Solo quiero que alguien sepa que no todo el que sonríe es por que está feliz.