Una gran mentira.

Una clara explicación y Beso.

P.O.V JOSE:

Acabamos los dos tumbados dormidos acurrucados. Antes de dar las diez y media de la noche me desperté por el ruido que hacía la televisión. Levanté mi brazo de la cintura de Hope y cogí el mando que estaba en suelo. Cuando quité el peso de mi brazo de su cintura, ella se movió buscándolo, por lo tanto, rápidamente apagué la televisión y volví a poner mi brazo en el mismo sitio de antes.

Moví mi cabeza para mirar hacia abajo donde tenía justamente la cabeza de Hope, pegada en mi pecho. Besé la cima de su cabeza dejando mi boca sobre esta. Volví a cerrar los ojos intentando volver a conciliar el sueño, pero el sonido de mi barriga pidiendo de comer no me dejó.

Lentamente dejé que su cabeza se apoyara en un cojín y sin dejar que se moviera me levanté y coloqué bien la manta encima de ella. Ande rápido hacia la cocina, cuando llegué cogí varios huevos e hice varias tortillas con queso de cabra y jamón york.

Mientras intentaba darle la vuelta unos brazos rodearon mi cintura haciendo que diera un pequeño salto ante tal susto. Dí la vuelta a la tortilla y miré hacia atrás donde estaba Hope sonriendo. Giré sobre mis talones y agarré su cintura con mis brazos para después ella poner su cabeza entre el hueco de su cuello y su hombro.

- ¿Tienes sueño?.-pregunté acariciando la parte baja de su espalda.

- Bueno, solo un poco pero esta noche dormiré.-contestó besando bajo mi oreja. Cerré los ojos ante cuando sentí la respiración de ella sobre mi piel.

- ¿Tienes hambre?.-pregunté, ahora acariciando las puntas de su pelo castaño.

- Bueno si está quemado, pues creo que pasaré y me haré otra cosa .-contestó mirando hacia la sartén en la cual la tortilla se estaba quemando.

Me separé rápidamente de ella y le dí la vuelta a la tortilla y pude ver que estaba negra, y no comestible. Se empezó a reír y se subío encima de la encimera para poder ver bien mi cara. Abrí el armario donde estaba la basura y lo tiré dentro para después poner la sartén en el fregadero.

- ¿Prefieres que yo haga la cena?.-preguntó acariciando mi brazo mientras miraba la sartén. Solo asentí y me senté en la silla de la pesa de la cocina.

Miré como Hope hacía la cena y se movía por toda la cocina ante mi directa mirada. Pero cuando puso la tortilla se dió la vuelta y empezó ha hablar.

- ¿Me puedes explicar mejor lo de antes?.-preguntó apoyándose al lado del fregadero. Asentí.

- Bueno, pues que un día llegaron unos chicos y para molestarnos pues me hizo prometer que me haría "gay" y si lo hacía y no me liába con ninguna chica pues a tí no te harían nada .-expliqué entrelazando mis manos.- por eso estuvisteis todo ese tiempo sin que te hicieran nada. Pero como este es el último año ya me canse y bueno, ya soy libre para hacer lo que quiera

- Lo siento tanto Jose, no sabía nada de eso, ni llegué a pensarlo, me lo creí todo .-exclamó acariciando mis manos entrelazadas.

- Eso era lo que tenía que pasar.-devolví su caricia.- Te quiero tanto Hope, si tuviera que hacerlo de nuevo, no dudaría ni un segundo en volver a mentir.

Hope se levantó rápido de su asiento y me abrazó el cuello para después sentarse encima mía. Rodeé su cintura con mis brazos como anteriormente y bese su sien derecha para después ella poner a llorar.

- Cariño, cariño, no llores, tranquila, no me molestó .-acaricié su pelo.- bueno al principio sí, pero no me importó después, de verdad, no sigas llorando, ahora ya estoy libre de volver ha hacer esas gilipolleces.- susurré en su oído y ella besó mi cuello.

- Es que empiezo a pensar en todo lo que has pasado y me siento mal, muy mal.-contestó separándose de mi cuello y acarició donde estaba su cabeza anteriormente. Acaricié su mejilla cual estaba lleno de lágrimas y la limpié.

- ¿Puedo hacer algo por tí? por favor, algo para que me sienta bien .-dijo acariciando como yo anteriormente hice, acarició mi mejilla tíbia.

- Hay algo que me gustaría probar.-contesté juntando nuestras caras.- pero no se si quieras.

- Lo que sea, dímelo.-dijo ella mirándome a los ojos.

- Bésame..-pedí acariciando sus dos mejillas.

Sin pensárselo posó sus manos en mi cuello y apoyó sus labios en los mios. Lentamente moví mis labios para hacer que los suyos se abriesen un poco. Metí mi lengua y profundicé el beso haciendo que ella se sentara encima de mis piernas. Acaricié la parte baja de su cintura y me acerqué más a ella. Lentamente nos fuimos separando para poder respirar.

- ¿Esto cambiará algo?.-preguntó sonriendo.

- Solo si tú quieres.-contesté dandole un pequeño pico para después sonreir.