Hetalia - Mi Amor Imposible.

Capítulo Final, 12: Mi Amor Imposible.

— ¡Alfred!
— ¿Sí?
— Tengo que decirte algo. Em, este, fíjate que... — me puse nervioso, sentía un nudo en la garganta y me dolía el pecho.
— Vamos, dilo rápido, estoy buscando al que me mandó la carta.
— ¡Yo soy el que mando la carta! Te había querido decir todo este tiempo lo mucho que me enamoré de ti, lo tanto que te deseé como para hacer cosas totalmente fuera de órbita sólo por ti. Y aunque tenga una realidad muy pesada y triste por llevar al ya saber tu respuesta. Quiero decirte que te amo, ¡Te amo!

. . .

No respondía, yo miraba el suelo y sudaba mucho. Mi corazón latía muy rápido, mi agitada respiración no me dejaba. Tenía miedo, miedo a perder una hermosa sonrisa todas las mañanas y los comentarios que seguían los mismos. A pesar de sentir tanto por el, solo soy capas de describir una centésima, lo ingleses nunca fuimos bueno con ello, pero esta vez, di todo lo que pude, por que yo sabia lo que esta persona significaba para mi, y no solo eso si no que también lo valía. Levante un poco la cabeza y solo veía a una persona derrochando felicidad con solo su bella sonrisa, no entendía que pasaba.
— ¡Arthur! — no tuve tiempo de reaccionar, Alfred se lanzó hacia mi tirando todo lo que tenía en mano.

No se como describir este sentimiento en palabras, ¿Cómo se podría describir lo imposible? Al sentimiento de felicidad infinita. Aquel que sabes que durará para siempre, y que perdurará con un calor y sentimiento mutuo. Aquel abrazo, no me incomodó, ni me molestó, ni me puso los nervios de punta, solo me tranquilizó, en ese momento no importaba ya nada, no importaba si empezaba a llover, o alguna otra cosa si el estaba ahí, no me importaba, solo lo quería a el, y a nadie más.

— Cre-cre-creí que-que, — Alfred al parecer no sabía que decirme al abrazarme. Empezó a llorar de al parecer felicidad, no creo que pudiera crear un sentimiento tan grande en una persona tan especial para mí. — Ay. También estás llorando. — me dijo limpiándose una lágrima mientras yo apenas estaba dándome cuanta de lo que había dicho. Tenía razón, estaba llorando. Limpie mis lagrimas mientras me recargaba en su pecho, apretando fuerte en un abrazo. — No puedo creer que esto este pasando, hace poco creía que me odiabas, y ahora me sales con esto. Enserio, te amo. No se que podría hacer sin ti, enserio, al pensar en ello creo que me explota la cabeza. Simplemente, me encanta todo de ti, tu pelo, tu sonrisa, tus ojos, tus mano, tu boca, tú.
— Creo que es hora que despierte del sueño. Esto no puede ser real, no, no puede. ¿Cómo es un estarías enamorado de mi en la vida real? ¿Que acaso estoy loco? Esto debe ser un sueño. — di pequeños golpes en su pecho.
— Claro que lo es, es muy real, más de lo que crees.

. . .

Desperté, voltee a la ventana de la habitación, dejando ver a mis ojos una cálida mañana de Mayo.

Sentí que alguien me abrazaba por detrás y logré ver a Alfred acostado detrás mío ya despierto.

— Adivina qué. — pregunté.
— ¿Qué? — me dijo cerrando un poco los ojos con todavía un poco de sueño.
— Soñé cuando estaba intentando conquistarte. — Alfred abrió los ojos muy sorprendido.
— Ya son 6 años de eso, amor. Lo más curioso es que cada año lo sueñas en el
mismo día.
— ¿A sí? ¿Cuál? — pregunté curioso.
— 4 de julio. — abrí los ojos muy sorprendido.
— Deberá ser por algo. — no le tomé importancia, ahora mismo descansaba felizmente.
— Te amo. — me dijo mientras me abrazaba por la espalda y recostaba su cara en mi.
— Yo también te amo. Mi amor imposible.

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Ahí doy final a la serie, de hecho estaba pensando hacer una segunda temporada de como les iba de pareja.
¿Qué piensan? *lenny face*